En poco más de seis meses se celebrará la cumbre de la COP26 en el Reino Unido y son muchas las expectativas que en torno a esa cita global por el ambiente. Su presidente,Alok Sharma, en un anticipo, está pidiendo a todas las naciones que abandonen la energía del carbón. Y hagan de las conversaciones sobre el clima de la ONU de este año el momento en que el mundo «consigne el carbón a la historia».
Sharma ─desde Glasgow, Escocia, donde se realizará la cumbre, a los compromisos alineados con el Acuerdo de París─ dijo que la Conferencia de las Partes (COP) de la Convención Marco de la ONU sobre Cambio Climático representa «la mejor ocasión» para construir un futuro más verde y limpio. De oportunidades para la energía renovable.
“Si nos tomamos en serio el 1,5 °C, Glasgow debe ser el policía que entregue el carbón a la historia. Estamos trabajando directamente con los gobiernos, y a través de organizaciones internacionales para acabar con el financiamiento internacional del carbón. Además, para instar a los países a que abandonen el poder del carbón, con el G7 a la cabeza”, insistió.
Su discurso es el más claro hasta ahora sobre los criterios de los anfitriones del Reino Unido para una conferencia exitosa. Más allá de la tarea técnica de finalizar el reglamento del Acuerdo de París.
En los últimos meses ha habido varias señales de que Asia está lista para alejarse del carbón, igual que Europa y América del Norte.
Luego de la COP26 el carbón debe pasar a la historia
El el mes pasado, en la cumbre climática de líderes que organizó Estados Unidos, Corea del Sur prometió poner fin al financiamiento del carbón en el extranjero. China se comprometió, por primera vez, a alcanzar el máximo consumo de carbón en 2025 antes de reducir gradualmente su dependencia del carbón en los siguientes cinco años.
Un número creciente de prestamistas asiáticos le está dando la espalda al carbón. Y el propósito de esta cumbre del COP26 es que todos los países se sumen a dejar el carbón.
Entretanto, el Banco Asiático de Desarrollo y el Grupo Financiero Sumitomo Mitsui de Japón figuran entre las instituciones financieras que pondrían fin a la financiación de nuevas centrales eléctricas de carbón.
El Reino Unido se ha movido más allá del carbón. En 2012, su uso representó el 40% de su electricidad. Hoy es menos del 2%, según datos del gobierno. Está comprometido a eliminar gradualmente toda la energía del carbón para 2024. Incluso, está revisando la apertura de una mina de carbón coquizable en el norte de Inglaterra luego de que los asesores le señalaron que era una la contradicción con los objetivos climáticos.
Muchas voces dicen NO al carbón
Al emplazamiento del presidente de la COP26 contra el carbón se han unido otras voces. Fatih Birol , jefe de la Agencia Internacional de Energía, señaló que acabar con el carbón, el más sucio de los combustibles fósiles, debería ser la prioridad para los países.
«Me decepciona el resultado de la recuperación económica. A pesar de toda la retórica y las expectativas de que el mundo saldría de la COVID-19 de manera más sostenible, vemos que la recuperación es marrón, no verde», lamentó.
Luego declaró que las plantas de carbón son «responsables de un tercio de todas las emisiones». Por lo tanto, Birol subrayó que es muy importante hacer dos cosas en cuanto al carbón: «Uno, no construir otras plantas de carbón, y a otra, quizás más crítico, elaborar un plan para eliminar las plantas de carbón existentes, especialmente en Asia».
Otro criterio de peso se suma a esta propuesta medioambiental, el mensaje del secretario general de la ONU, António Guterres, a los gobiernos. Guterres, desde 2019, ha pedido a las naciones que dejen de construir plantas de carbón.. Recientemente instó a las naciones ricas a eliminar gradualmente la energía del carbón para 2030 y a las naciones en desarrollo para 2040.
Dejar al carbón en el pasado
El presidente de la COP26, citando a Guterres, dijo que el negocio del carbón está en llamas. “Los días en que el carbón proporcionaba la forma más barata de energía han quedado en el pasado y allí deben estar. Hagamos que en la COP26 el carbón quede en el pasado. Mientras apoyamos a los trabajadores y las comunidades creando buenos empleos verdes para llenar el vacío”, asentó.
Al calificar la cumbre de Glasgow como «la última esperanza de mantener vivo el 1,5 °C», Sharma esbozó el plan diplomático para la financiación climática. Mejorar la adaptación y aumentar la ambición global en los próximos meses. Esto incluye el uso de los foros del G7 alojados en el Reino Unido y del G20 alojados en Italia. «Tengo fe en que los líderes mundiales estarán a la altura de las circunstancias y no faltarán en su encuentro con el destino», manifestó.
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