Por Cambio16
10/03/2017
En 1905, Friedrich Trump, abuelo del presidente Donald Trump, cuestionaba en una carta a Leopoldo, príncipe regente de Baviera, “¿Por qué debemos ser deportados?”.
El gobierno había ordenado que Trump y su familia abandonaran el reino por no haber cumplido con el servicio militar obligatorio ni haber registrado su emigración inicial a Estados Unidos veinte años antes.
En una carta en alemán, traducida al inglés y publicada por la revista Harper’s, Friedrich señala que se encontraban paralizados de miedo por la orden de dejar su hogar.
“Nos enfrentamos de inmediato, como un relámpago en el cielo claro, con la noticia de que el Alto Real Ministro de Estado ha decidido que debemos abandonar nuestra residencia en el Reino de Baviera. Estamos paralizados de espanto; nuestra vida familiar feliz está empañada. Mi esposa ha sido superada por la ansiedad y mi preciosa niña ha enfermado», escribió.
“¿Por qué debemos ser deportados? Esto es muy, muy difícil para una familia. ¿Qué piensan nuestros conciudadanos si los sujetos honrados se enfrentan a un decreto semejante, por no mencionar las grandes pérdidas materiales que implicaría?”.
Friedrich Trump nació en Kallstadt (en la actual Alemania) en 1869, y a los 16 años se mudó a Estados Unidos, donde obtuvo la ciudadanía y amasó su fortuna. En 1901 regresó a su tierra natal.
El príncipe Leopoldo rechazó la solicitud de repatriación de Trump y la familia se mudó a Nueva York.
El abuelo de Trump hizo su fortuna gracias a un restaurante-bar en Canadá en el que ofrecía buena comida, bebida y contaba con cuartos para «damas y fiestas».
