Por Andrés Tovar
01/11/2017
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- Puigdemont no irá a declarar a la audiencia, por lo que podría ser detenido
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Cual relato de Dante, los independentistas comienzan a caminar los círculos del castigo político ya sentenciado desde la DUI, manteniendo en llamas la crisis política del caso Cataluña. Los escollos los ven en todos lados: con la justicia, dentro de sus partidos y en su propia militancia, hoy visiblemente decepcionada tras los últimos acontecimientos.
Derrotado y hundido, Carles Puigdemont se queda en Bruselas esperando juicio y cárcel, luego que la jueza de la Audiencia Nacional, Carmen Lamela, respondiera a su desafío sentenciando que si no comparece, le detendrá. La confesión de su abogado en Bruselas, Paul Bekaerts, pone al expresident con pie y medio en la cárcel al ratificar que éste «no asistirá» a la audiencia y que «prefiere esperar».
«Es bastante obvio que mi cliente va a adoptar ahora la actitud de esperar a ver qué pasa», afirmó el letrado belga ante los medios ante la pregunta de si Puigdemont se presentará ante la Justicia española, añadiendo que cree que su cliente «no tendrá un juicio justo» en España. «He sugerido que le interroguen aquí, en Bélgica. Es posible», ha añadido.
Mientras tanto, a El Fugitivo -como han bautizado a Puigdemont en las redes acostumbradas a la mordacidad- sólo le ha quedado hasta ahora mirar al cielo desde su cuenta en Instagram, donde da los buenos días con imágenes tomada en el Palau de la Generalitat. Y negarse a responder a las preguntas de los periodistas españoles al no darles la palabra en Bruselas.
Un hombre queda encerrado en el aeropuerto de Bruselas y no puede regresar a su hogar, pues su república no existe. pic.twitter.com/yboCwoCC4B
— Juanma del Álamo (@jmdelalamo) October 30, 2017
Ya más cerca, sus «aliados» se enfrentan a un panorama no menos complicado. Los ‘exconsellers’ Joaquim Forn y Dolors Bassa entraron a El Prat entre abucheos y sin Puigdemont, recibidos con banderas españolas, megáfono al ritmo de ‘Que viva España‘ y gritos subidos de tono. Carme Forcadell y los miembros de la Mesa del Parlament disuelto Lluís Guinó, Lluís Corominas, Anna Simó, Joan Josep Nuet, Raül Romeva, Jordi Turull y Ramona Barrufet han recibido este miércoles por la mañana la citación del Tribunal Supremo para ir a declarar el jueves y viernes por el presunto delito de rebelión.
Y también Oriol Junqueras, quien, pese al panorama, sigue reivindicando la proclamación de la República catalana de la semana pasada está legitimada por el resultado del 1-O.
Amb humilitat, fermesa, coratge i valor, iniciem un camí històric!
Guanyem la llibertat!— Oriol Junqueras 🎗️ (@junqueras) January 10, 2016
Se mantiene, se tambalea
A lo interno, la huida de Puigdemont ha aumentado el conflicto dentro del PDeCAT y agrava la guerra con Junqueras. El expresident se fue a Bruselas a espaldas del ex vicepresident y también del grueso de su propio partido, y todo esto a escasos días de tener que confeccionar sus listas electorales para las elecciones en Cataluña del 21 de diciembre. Algunos ante la situación prefieren abrirse campo, como el exconsejero de Empresa, Santi Vila, quien ya comunicó a Marta Pascal y Artur Mas su intención de encabezar una candidatura para enterrar el procés y devolver a su partido al «centrismo».
Pero el mayor pesar está en los propios militantes en las calles catalanas. Entre decepción y decepción, luego que no vieran materializada su declaración de independencia, se enfrentan a que el líder que pidió que resistieran huyó en las primera oportunidad. Algunas encuestas le dan al ERC una posible mayoría en los venideros comicios, pero habrá que seguir muy cerca cómo redunda la actual percepción de los militantes en las urnas, porque aún queda trayecto por escribirse en medio del desconcierto y la profunda fragmentación del movimiento. Y, mientras tanto, formaciones como Ciudadanos y el PSC emergen como la alternativa, para lo que han trabajado desde hace rato.
Así arrancan las encuestas en Cataluña. Hay partido. Hay que ganar la convivencia, la unión y la estabilidad #21D https://t.co/tv6zPcGx8S
— Albert Rivera (@Albert_Rivera) November 1, 2017
En fin, nada que no fuera pronosticado…