Por Cambio16
11/01/2018
El exconseller Joaquim Forn, el expresidente de la ANC Jordi Sànchez y el presidente de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart, declaran este jueves en el Tribunal Supremo. Todos ellos lo hacen a petición propia, para pedir su libertad. Y han sido citados por el juez del Supremo, Pablo Llarena, sobre los supuestos delitos de rebelión, sedición y malversación.
Una delegación de ERC se ha concentrado ante las puertas del Tribunal Supremo para apoyar a los investigados. Unos exdirigentes catalanes que se encuentran en prisión provisional desde el pasado mes de noviembre.
Dicha delegación ha estado formada por diputados en el Congreso encabezados por Joan Tardà. Y en la que también estaban Ester Capella, Teresa Jordà, Jordi Salvador, Joan Capdevila, Xavier Eritja y Joan Olòriz. La delegación de senadores de ERC ha estado formada por su portavoz, Mirella Cortés, junto con Bernat Picornell, Quim Ayats, Laura Castel, Josep Rufà, Elisenda Pérez y Anna Azamar.
ERC es pesimista
Tardà ha mostrado su escepticismo ante la decisión del juez sobre la petición de libertad de Forn, Cuixart y Sànchez. «Somos pesimistas porque la voluntad es convertir a los encarcelados no solo en presos políticos. Sino en rehenes para amedrentar a la sociedad».
El abogado de Vox, Javier Ortega, considera que las declaraciones de Joaquim Forn, Jordi Sànchez y Jordi Cuixart serán poco creíbles. Y la acusación que ejerce el partido de extrema derecha ha anunciado que pedirá su mantenimiento en prisión. Ortega ha realizado estas declaraciones antes de entrar al Supremo.
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