Unidas Podemos aspira a que el Gobierno, del cual forma parte, normalice las relaciones diplomáticas con Venezuela. Enrique Santiago, diputado de esa organización y secretario general del PCE se refirió a la decisión ejecutiva de no sustituir al embajador en Caracas y de enviar en su lugar a un encargado de negocios.
El Gobierno no solo confirmó la llegada del líder opositor Leopoldo López a Madrid el 25 de octubre, sino que su presidente, Pedro Sánchez lo recibió en la sede del PSOE. El encuentro distendido y cordial se extendió por más de hora y media. En ese sentido, Santiago opina que «no es adecuada en este momento» la foto que Sánchez se tomó con López, sin precisar detalles. Aunque lo considera «un asunto interno del partido socialista español».
El también portavoz de IU en el grupo confederal insiste en que el Gobierno “normalice las relaciones diplomáticas con Nicolás Maduro. Toda vez que la gestión de Sánchez optó por no sustituir al embajador en Caracas y de enviar en su lugar a un encargado de negocios. Sin referirse a nada concreto, en entrevista a Efe, esbozó que las elecciones presidenciales de 2018 fueron «justas ni transparentes» y no como dice la UE.
Santiago, cercano al líder de Podemos, Pablo Iglesias, argumentó que los comicios en el país suramericano no han sido impugnados. «Todas las elecciones de Venezuela han sido observadas por organismos internacionales, desde la fundación Carter a la OEA o la UE. No ha habido nunca ninguna impugnación, por lo cual para nosotros los resultados son absolutamente válidos. Y las distintas fuerzas pueden concurrir. Hasta el señor (Juan) Guaidó fue elegido diputado», se atrevió a afirmar sin constatar que los hechos indican lo contrario. La OEA no participó en las elección de Maduro ni en la escogencia írrita de la asamblea constituyente.
El Gobierno y su relación con Venezuela
Al confirmar la llegada de Leopoldo López a Madrid, el Gobierno a través de la cancillería, se pronunció sobre Venezuela y su grave crisis.
“España reitera su convencimiento de que la crisis multidimensional que atraviesa Venezuela requiere de una salida negociada. Y debe ser dirigida por los propios venezolanos, que permita la celebración de elecciones presidenciales y parlamentarias con plenas garantías democráticas. España reitera su disposición a ayudar en dicho proceso”, agregó el despacho.
Días después, la secretaria de Estado de Asuntos Exteriores, Cristina Gallach, confirmó la designación de Juan Fernández Trigo como encargado de negocios, en sustitución del embajador Jesús Silva. Decisión que se suma a la de Italia y Países Bajos que no tienen jefes de misión en Caracas.
Ante tan diáfana medida ante un gobierno usurpador e ilegítimo, el líder del PCE pretende que el Gobierno «normalice» las relaciones diplomáticas con Venezuela y con toda América Latina. Refirió que en Bolivia tampoco hay en estos momentos embajador. «Creemos que es lo que corresponde», afirma.
Sin embargo, el dictador Nicolás Maduro marcó distancia con el Gobierno. ”Siempre cometes errores con Venezuela, Pedro Sánchez. Hasta cuándo, Pedro Sánchez, tu subestimación, tu desprecio por la realidad venezolana”, alardeó en cadena de radio y televisión.
Respecto a las acusaciones de Maduro, sobre que España es el epicentro de la conspiración contra su régimen, responde Santiago: «Él sabrá, imagino que tendrá motivos para decirlo».
Sin condiciones para las elecciones
Las elecciones presidenciales en 2018 estuvieron ensombrecidas por la inasistencia oposición a los comicios. La llamada Mesa de la Unidad Democrática no encontró las condiciones de transparencia y garantías democráticas para participar. A los principales líderes de la oposición, con más arrastre popular, no se les permitió competir contra Maduro y los partidos fueron ilegalizados.
Los resultados favorecedores a Maduro se lograron con la abstención más alta que ha registrado la historia democrática del país en unas presidenciales y lo dejó como el jefe del Ejecutivo electo con menos respaldo en las urnas.
El proceso fue avalado por el exjefe del Gobierno español José Luis Rodríguez Zapatero, amigo del régimen. Por el Consejo de Expertos Electorales de Latinoamérica (Ceela), presidido por el ecuatoriano Nicanor Moscoso. Así como por China, Bolivia, Rusia e Irán.
Para las elecciones parlamentarias de este 6 de diciembre la situación es la misma. El Grupo Internacional de Contacto (GIC) considera que el calendario no permite el envío de observadores. Porque «no se reúnen» las condiciones para unos comicios «transparentes» y «justos».
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