El austero plan fiscal argentino aplicado por el Gobierno de Mauricio Macri, llegó al prometedor y rico yacimiento de gas no convencional Vaca Muerta. Y es que el precio sostén fijado para el gas, por el ex ministro de energía Juan José Aranguren, no cuadra con las cifras del presupuesto del Gobierno argentino.
Aunque Vaca Muerta es el mayor atractivo para las inversiones, Macri avanzará igualmente en recortes a las partidas de la resolución 46; que subsidia a las productoras que incrementaron el volumen que extraen de gas no convencional.
El mundo empresarial energético no está conforme con la medida, aunque lo consideran acorde a la crisis que enfrenta el Gobierno. En la industria se da por descontado que la movida producirá un relajamiento en los planes de inversión previstos para la formación neuquina, reseñó lmneuquen.com.
«La resolución 46 fue un aporte del gobierno nacional al denominado acuerdo por la productividad de Vaca Muerta. El incentivo incluso incluyó una precarización del convenio colectivo de los trabajadores petroleros y el compromiso de invertir de las empresas», explicó la publicación.
El mencionado acuerdo se fundó sobre las bases fijadas por el ex ministro de Energía, Juan José Aranguren, que consideró un sendero de precios ascendentes para el gas nacional que se volvió de aplicación imposible en la práctica.
Plan fiscal argentino aprieta al sector energético
La crisis financiera, acompasada con la corrida cambiaria y la caída de la actividad, voló por el aire las variables del plan energético del gobierno nacional de la nación sudamericana.
La política de precios diseñada por Aranguren, se fue al traste y la liberación total del mercado en 2021, a seis dólares por millón de BTU, fue arrasado por la realidad. Los mayores afectados serán actores primarios de la producción en Vaca Muerta frente a los movimientos gubernamentales enfocados en la renegociación de las reglas.
La resolución 46 prevé un precio de 7,50 dólares por millón de BTU para este año, 7 dólares para el año que viene, 6,50 dólares para 2020 y 6 dólares para 2021. Cuando se dictó la resolución, el año pasado, se consideró que el monto a subsidiar decrecería con el paso del tiempo, pero falló ese cálculo.
Resulta que los precios que se pagan por el gas no subieron como se pensó, por lo que la porción a subsidiar para llegar al precio sostén de la resolución 46 es mayor a la estimada originalmente.
Por su parte, el gas que se usa para generar electricidad se contrató a 4,20 dólares por millón de BTU, un dólar menos que lo previsto, por lo que las operadoras subsidiadas en Vaca Muerta reciben 7,50 dólares por millón de BTU. La diferencia entre los dos montos es asumida por el Gobierno.
Tecpetrol en dificultades por plan fiscal argentino
La principal beneficiada por los subsidios es Tecpetrol, la petrolera de Techint, que sería la más perjudicada por el cambio de reglas que viene imponiendo el gobierno respecto a su plan inicial. Cinco empresas en Neuquén. YPF, Capex, Tecpetrol, PAE y Total cobran el subsidio.
Tecpetrol desembolsó cerca de 1.400 millones de dólares en Fortín de Piedra. Su idea era extraer 11 millones de metros cúbicos diarios en año y medio, de perforar el primer pozo. Según números oficiales, Tecpetrol debería cobrar 350 millones de dólares de subsidio este año y unos 650 millones de dólares el año que viene con el precios del gas en torno a los cuatro dólares por millón de BTU.
La petrolera evitó pronunciarse sobre el plan fiscal argentino y respecto a los cambios en la resolución 46. Fuentes extraoficiales comentaron que la empresa de Techint esperaba alguna medida analizada por el Gobierno. Lo mismo plantearon respecto de otras empresas involucradas en los beneficios de la resolución 46.
En Neuquén se aprobaron seis proyectos, que ahora verán reducidos sus ingresos por la reestructuración de los subsidios. Mientras otros ocho estaban en lista de espera cuando se anunció que no entrarían más proyectos al plan. Los cambios de reglas conspiran contra las inversiones.
Las empresas sacan sus cuentas
El cambio en las reglas del juego pone a las empresas a sacar sus cuentas. Está claro que para las empresas incorporadas al programa será un revés. Pero el golpe más duro será para las compañías que esperaban entrar al plan. Sin embargo, se piensa que los proyectos en marcha no serán desechados.
De todas formas, los planes de inversiones de las compañías que verán reducidos los precios de venta por ajuste en el subsidio de la resolución 46 serán revisados en función del impacto de la reestructuración en la renta considerada para el negocio.
En el caso de Tecpetrol, la productora que cobra la mayor porción del subsidio en cuestión, podría ralentizar el proceso de crecimiento de la producción en Fortín de Piedra, una vez puesto en marcha el nuevo plan fiscal argentino.
Con información de lmneuquen.
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