En varios municipios de la Comunidad de Madrid, se ha detectado la presencia de plaga de mosca negra. Vecinos de Valdebebas, San Fernando de Henares o Coslada, reportan un mayor número de visitas a las urgencias, por las picaduras de estos insectos.
La mosca negra o simuliidae, que es su nombre científico, mide entre 3 y 6 milímetros, se parece a la avispa y su pinchazo provoca una gran hinchazón. Esta familia de dípteros tiene poco que ver con las moscas revoltosas y desaseadas, que merodean los depósitos de basura.
En general, estos bichos se alimentan de los jugos de los vegetales, pero las hembras adultas pueden picar a las personas y a otros animales, para chupar su sangre. Según National Geographic son un azote para el ganado, ya que algunas especies actúan como vectores de graves enfermedades, como la oncocercosis, o «ceguera de los ríos» .
La expansión de las moscas negras se debe al confinamiento. En estos meses no se han limpiado adecuadamente los cauces de los ríos. Además, las altas temperaturas también han propiciado una temprana eclosión, así como la paulatina desaparición de sus depredadores.
No se trata de una especie invasora. En España su presencia es habitual en comunidades como Cataluña, Aragón y Madrid. En 2019 su incidencia fue alta. Y para los próximos meses, los expertos advierten la presencia de muchas condiciones que seguramente ayudarán a su proliferación.
El paso de la mosca negra en Madrid
«La falta de esa limpieza desde hace meses por causa del coronavirus es una causa importante de su expansión. Hay que sumar que cada año sus depredadores (golondrinas, murciélagos o vencejos) van desapareciendo», explica Rosa Pérez, portavoz de la Sociedad Española de Medicina de Urgencias y Emergencias (SEMES).
Esta no será la única ‘plaga’ a la que la Covid-19 pueda dar alas este verano, agrega. “Las segundas residencias sin mantenimiento y la alta demanda de piscinas hinchables son buenas noticias para el mosquito tigre. Su población se extiende por distintas zonas del territorio español”.
En 2018, más de 300.000 madrileños fueron atendidos por su picadura. Esta presenta una gran inflamación con un punto rojo en el centro. Lo mejor es aplicar hielo y acudir a urgencias si hay síntomas de reacción alérgica. La mosca negra necesita la sangre para poner sus huevos.
Durante la campaña del año pasado, la incidencia se extendió a la zona del río Jarama, la Laguna del Campillo y Perales del Ríos.
Los municipios más atacados por la mosca negra fueron Alcalá de Henares, Coslada y San Fernando de Henares. También Getafe, Velilla de San Antonio, Arganda, Rivas Vaciamadrid, Mejorada del Campo y Torrejón de Ardoz.
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