Texto y fotos Benito Guerrero
06/05/2017
Carlos Garaicoa es uno de los artistas más reconocidos de América Latina. Ahora expone por primera vez en Bilbao y en concreto en Azkuna Zentroa, la antigua Alhóndiga. Con la muestra Epifanías urbanas busca devolver a la calle el reclamo popular a través de objetos cotidianos ofreciendo una imágen poética de las ciudades. La instalación cuenta con tres partes independientes. La primera, Alcantarillas, reúne tapas de estos conductos encontradas en la capital vizcaína y Madrid y reinterpretadas con comentarios irónicos. Para el montaje se ha cubierto la sala con las baldosas que pueden pisarse en las aceras de la ciudad vasca.
La siguiente pieza, Partitura, ha sido madurada en los últimos diez años. Se trata de un conjunto de atriles dispuestos en forma de orquesta en los que se sostienen tabletas que muestran las actuaciones de artistas callejeros junto a sus partituras. En la tribuna del director puede escucharse una obra compuesta por Esteban Puebla que ha mezclado magistralmente el conjunto de actuaciones recopiladas en la calle. Por último, encontramos Fin de silencio, una serie de tapices que muestran nombres de comercios de La Habana de los años 40 y 50 a los que el autor ha sumado sus propios textos.
EL corazón sociocultural de bilbao
El centro en el que se muestra la exposición ha sido diseñado por el arquitecto Philippe Stark. Azkuna Zentroa está dirigido por Lourdes Fernández y se ha convertido en su corta trayectoria en un punto de referencia en la vida cotidiana de la ciudadanía bilbaína. Se ha integrado en su día a día gracias a que cuenta con una completa mediateca, siete salas de cine, gimnasio, piscina y el restaurante Yandiola.
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