Piaget ha vuelto a inspirarse en el sol para su nueva colección de joyería Piaget Sunlight, en la que todas sus piezas transmiten la alegría y la fuerza del astro rey. Sin duda, el sol es un símbolo festivo, cautivador y alegre, perfecto para el trabajo de orfebrería con oro.
En esta colección, el sol presta su forma inconfundible a collares y pendientes que resplandecen estilística y literalmente con los materiales más hermosos y los diseños más precisos. Un regalo para la mujer que adora la calidez y alegría compartida que brindan esos momentos bajo el sol.
Las piezas de Piaget Sunlight están hechas con Ópalo, una piedra preciosa que ha sido clave en las creaciones de la Maison desde los sesenta, y Nácar, que está presente tanto en los colgantes como en los aretes y pendientes.
En esta ocasión un colgante engastado con un ópalo blanco central y rayos engastados con 28 diamantes irradian desde su centro. Proveniente de Australia y de la máxima calidad, este ópalo tallado a la perfección refleja miríadas de tonos, en amarillo, rojo, verde y azul. La gama de colores depende de la estructura interna del ópalo, que hace de cada piedra una pieza única.
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Piezas exclusivas
Pequeñas esferas de sílice liberan tonos azules y otros tonos rojos más acusados. Los efectos luminosos también cambian en función del movimiento del portador y de la naturaleza de la luz. Cada colgante es una creación exclusiva, debido a la singularidad y estructura irrepetible de cada ópalo.
Igualmente, en Piaget Sunlight se presentan tres collares con diamantes – uno con un disco completamente engastado con rayos de diamantes, uno en forma de media luna grande con rayos de diamante y un tercero pequeño en versión más bijoux.
Las diferentes longitudes de las cadenas de cada uno de estos tres collares permiten lucir estas creaciones de forma individual, o apiladas para crear un efecto de capas, para el día a día, pero con una estética preciosa, ideal para la mujer Piaget actual.
Por su parte, el colgante en nácar es la representación definitiva del sol. Está rodeado de “rayos” en oro rosa engastados con 49 diamantes talla brillante. El color natural, sin tratamiento alguno y extremadamente blanco de la mejor calidad es debido al entorno en el que se cultivan estas ostras.
Además, tanto con el ópalo con el nácar, se presentan dos pares de pendientes, respectivamente. Un par de pendientes stud con diamantes, stud con diamantes y cadenas, un par de aretes hoops, en sintonía con las creaciones más juveniles de Piaget, engastados con 90 diamantes que brillan como los centelleantes reflejos de la luz del sol en el agua y un par de pendientes con borla.
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