RAFAEL FEBRES-CORDERO /ESTILO online | FOTOS CORTESÍA STARCK.COM
A finales de junio, cuando cada año escolar terminaba, la madre hacía traer un camión de arena al garaje donde Philippe pasaría la mayor parte del verano creando un mundo de calles, casas, pueblos y muebles con la arena. Sus padres se habían divorciado cuando tenía 6 años y aquella segunda casa y sobre todo el inmenso mesón y las herramientas del taller de su abuelo fueron la mayor distracción durante su infancia.
El tiempo mostró el lado positivo de aquella solitaria infancia:
Todo esto formó un caldo de cultivo ideal para la creatividad: la soledad, un aburrimiento asombroso, depresivo, asociados al garaje y la arena. Crear era natural. Una evidencia. No he conocido más que eso.
Entrevista para la revista Cerveau & Psycho, 13 mayo 2015
Aquel niño hastiado devino en el diseñador más prolífico de las últimas décadas. Hoy Philippe Starck tiene 72 años y, tras una exitosísima carrera de más de cincuenta años, ha producido unas 10.000 creaciones, que van desde un cepillo de dientes hasta los habitáculos de naves y estaciones espaciales para Axiom Space[1] y Virgin Galactic.
Starck ha sido una referencia importante para todo diseñador, ha creado una estética propia que no se compara con lo conocido. Cada una de sus piezas supera lo esperado. Y lo sorprendente es que este rompedor de esquemas utiliza los anagramas clásicos, las sillas Luis XV, las lámparas de araña y las bibliotecas, los integra recurrentemente en sus ambientes, recreándolos con materiales nuevos, aplicándoles color o exagerando su tamaño.
El restaurante Teatriz de Madrid (1990), con su barra de alabastro retroiluminada y las mesas barrocas como lavamanos; la silla Louis Ghost de la casa Kartel (2000) o los ambientes del Hotel 9 Confidentiel de París (2018) son ejemplos de cómo su estilo contestatario dialoga con íconos clásicos. Los ha incorporado siempre en su discurso estético, transfigurándolos para estimularnos con escenarios frescos y sobre todo divertidos.
EL ESCAPE AL MUNDO PROPIO MUNDO
Conocer a un personaje así me ha hecho preguntarme: ¿qué mueve su creatividad? ¿De dónde viene esa capacidad de sorprendernos? ¿Qué piensa de esta sociedad actual? No es difícil responderse luego de recorrer las innumerables entrevistas que ha tenido.
Yo siempre he sido un fantasma, siempre hui de la posibilidad de tener una etiqueta, porque una vez que te han catalogado, etiquetado, ya estás en la caja, ya estás muerto, así que lo importante es desplazarse siempre.[3]
Entrevista para el sitio web La ciudad de las ideas (México, septiembre 2013)
Estar en continuo movimiento lo considera un deber, pero crear debe de ser para él como el caminar, un don natural arraigado en su ser y en su cotidianidad.
Yo he tenido una especie de creatividad visceral, debido a que durante toda mi juventud y el haber estado al borde de la muerte cerebral, hizo que yo me escapara, yo me escapé a crear mi propio mundo.
Hay eventos que nos forman y condicionan, situaciones vividas durante las edades tempranas que terminan configurando nuestra personalidad.
Después de que mis padres se divorciaran cuando yo tenía seis años, vivía solo. Muy solitario. Mi madre salía mucho y me dejaba con mis abuelos en el campo durante meses.
¿Hubo un paralelismo entre aquellas circunstancias y su personalidad? Transformar aquella montaña de arena, de aquella etapa introspectiva, solitaria y tristona en algo vivo como un pueblo ¿es como lo que le pasó a él? Aquellas horas de juego creativo en la arena ¿lo llevarían a darse cuenta de que quizás, podía hacer algo similar consigo mismo? Sacar belleza de algo que, a simple vista, es inerte y apagado, convirtiéndolo en algo distinto y mejor, quizás sería el primer atisbo de lo que podía hacer con su persona. Definitivamente, lo ha movido un potente propósito y una temprana relación con el proceso creativo y la invención, y seguramente algo en su herencia genética.
No sé cuál es la proporción de transmisión genética en el proceso creativo. Ni siquiera sé si existe. Pero, en lo que a mí respecta, no sería de extrañar que exista una herencia familiar. Mi padre era un ingeniero aeronáutico reconocido por ser muy creativo. Su fábrica, Aviones Starck estaba ubicada en Porte Maillot, y vivíamos a 50 metros de distancia […] siempre he visto una mesa de dibujo, planos, escuadras cerca de mí, desde que nací, así como miles de maquetas de aviones colgando del techo y en armarios.
EL DISEÑO COMO OFICIO Y FORMA DE VIDA
¡No hay trabajo en mi vida! Solo hay juego, curiosidad, generosidad y visión, declara el propio Starck sobre su labor. Yo agregaría humor, porque uno tiene la impresión de que sigue cultivando un espíritu juguetón. Trasmite un afán entretenedor que desde su mundo nos va dejando novedad, frescura y vanguardia. Y digo su mundo porque en su caso, parece un tesoro muy bien cuidado. En palabras suyas, Soy autista. Afortunadamente a un nivel muy bajo, pero claramente autista.
Y él mismo profundiza:
Cuando no se habla con nadie, cuando no se ve a nadie, cuando no se ve la televisión […] cuando se prefiere estar solo que acompañado, se acaba por entender ciertos mecanismos. Y este autismo me hace vivir en una autarquía casi total, no tengo ninguna información del exterior. Lo que me interesa lo encuentro a través de mi profunda curiosidad y mi amor profundo por nosotros, los seres humanos, por lo que somos.
Entrevista para la cadena Euronews, octubre 2014
Philippe Starck, diseñador sin límites
Ese mundo rico en ideas, alimentado desde muy pequeño en el taller de diseño aeronáutico de su padre donde tenía una cama, con aviones colgando por todas partes, no ha dejado de crecer, y él no ha parado de volar, diseñando en muchos ámbitos. Objetos, restaurantes, night clubs, motocicletas, yates, hoteles.
Para Starck nada es obstáculo. Lograr que una creación en ámbitos tan distintos funcione correctamente, no solo requiere prolongada dedicación y maduración de una idea. Trasero contra taburete, como decía uno de mis maestros, Martín Vegas, solo que por “trasero” usaba otra palabra. Las ideas y diseños que admiramos llevan largas horas de pruebas, variantes, croquis arrugados. La constancia de Starck asombra, al igual que su propia filosofía, que no ha sido pronunciada en un documento único, sino en cada trabajo que año a año ha dejado ver las frases sueltas un discurso coherente.
Todos sus diseños tienen una gran calidad estética, formal, lo que nos permitiría verlo como un artista, pero a la vez cumplen cabalmente con la función que les es inherente. Starck logra ambos objetivos, belleza y funcionalidad. El buen diseñador, al igual que los arquitectos de épocas pasadas, debe dominar ese difícil equilibrio. Sin embargo, Starck jerarquiza[2]:
La utilidad del objeto prima sobre su belleza, lo útil ayuda a la evolución, lo inútil no.
PHILIPPE STARCK
Desconozco que haya renunciado a la belleza en algún proyecto, pero para mí ambos conceptos están íntimamente vinculados, desde el momento en que la belleza puede ser establecida según la pureza con que se logra la utilidad. Un buen ejemplo es su exprimidor. Formas esbeltas y puras que cumplen su función cabalmente. Nada le sobra.
LA FORJA DE UN DISEÑADOR
Starck comienza a dibujar desde temprano; el papel parece haber sido la pantalla donde se reflejan sus pensamientos.
Uno empieza poco a poco, comienzas a dibujar en una clase, el profesor te echa porque nunca trabajas. Nunca he hecho un examen porque no he sido capaz de aprender nada. Un día el profesor ve que el dibujo es interesante y es la primera vez que vas a comerciar: me das tus dibujos y te dejo en paz. […] Vivo de mis diseños y de mis creaciones desde que tengo cinco años.
Entrevista para la cadena Euronews, octubre 2014
Nunca hizo un examen y además dejó el liceo. Cuenta que se escapaba y erraba por París en su bicimoto Solex[3] días enteros, confiesa que se fugaba permanentemente. No le veía sentido a ese aprendizaje, o a su dinámica y rigor. Eso puede pasar a quien tiene muy claro lo que quiere hacer en su vida o quizá una gran seguridad en sí mismo para rebelarse contra lo establecido.
El hecho es que no completó su formación secundaria, pero la siguiente educación formal sí fue una elección en línea con sus tempranas experiencias. En 1968 y a la edad de 19 años se inscribe en la École Camondo de París para cursar la carrera de diseño y arquitectura interior. Ese mismo año comienza su incesante producción de diseños con la empresa que funda para producir objetos inflables.
Al año siguiente Pierre Cardin le ofrece trabajo como director artístico y allí diseña una de sus primeras sillas. Con 25 años se muda a los Estados Unidos, pero dos años después, en 1976, regresa a París, donde proyecta su primer night club, La Main Bleue. Es su primer diseño interior, y a partir del cual su nombre queda unido a locales exitosos por la atmósfera que se respiró en ellos.
«Sex Machine» de James Brown resuena a través de una vasta y siniestra caverna en el corazón de un distrito de clase trabajadora de izquierda, en algún lugar entre los lotes baldíos y las obras de metal. Miles de bailarines sudan y aplastan sus problemas al ritmo del bajo demoledor de los éxitos de Motown y los ritmos sexys de los mayores éxitos del funk y el reggae […]. Es uno de los pocos lugares en París donde está sucediendo algo original.
Alice Augustin para daily.redbullmusicacademy.com, septiembre 2017
Pronto “La Mano Azul”, como sería su nombre en castellano, se convirtió en el sitio de moda de personalidades importantes, artistas y bohemios. Starck no había cumplido los 30 años, y recibe el encargo para otro club nocturno en París, Les Bains Douches. Otro hito de la época con historia previa. Este local había sido en 1885 el lugar de los baños públicos Guerbois, o lo que hoy conocemos como un spa. La placa de la entrada aún dice: Baños de vapor con piscina, baños turcos y rusos. Hidroterapia completa, duchas de vapor y sulfurosas.
En este interesante espacio, Starck crea un club nocturno inédito, con ambientes modulables y privatizables, que incluía sala de conciertos, discoteca, restaurante y bar. Pronto se convirtió en el lugar de moda donde artistas, personalidades del espectáculo y de las artes coincidieron. Las ideas originales se dejan ver en todos los ambientes, como el tablero de ajedrez gigante en el fondo de la piscina cuyas piezas eran movidas por un hombre rana. Starck a sus 29 años y con solo 10 de experiencia había logrado una posición relevante como diseñador. Era el año 1978.
“NO HAY OBSTÁCULOS”
Así respondía Starck a la pregunta de cuál había sido el obstáculo más importante de su carrera, y no sabemos si creerle. Seguramente ha tenido obstáculos, pero al responder nos transmite lo que ha sido su actitud a lo largo de su productiva carrera. Luego de su exitoso comienzo, le encargan numerosos locales nocturnos, restaurantes y cafés, ya no solamente en París donde realizó el famoso café Costes (1984) y la silla para el lugar fabricada por la casa italiana Driade. En aquellos años diseña un club nocturno en la ciudad de Dallas, el restaurante Theatron en Ciudad de México, el Café Mystique y el restaurant Manin en Tokio.
Las famosas sillas del Café Costes de París ya cumplieron 50 años
Si bien la arquitectura interior fue y sigue siendo la disciplina mas constante en su trabajo, también lo ha sido el diseño de mobiliario y objetos. Desde la silla para Pierre Cardin en 1971 y la del citado club “La Main Bleue” en 1976, Starck ha tenido en las sillas otro tema constante en su carrera.
Algunos modelos de sillas para distintas casas de diseño creadas por Starck
Pero en los años transcurridos hemos visto algo difícil de encontrar en los diseñadores que conocemos: su trabajo trasciende el diseño industrial y la arquitectura de interiores. Cuando se estrena como arquitecto de edificaciones, plasma en ellas su particular estilo: El Asahi Beer Hall y el Edificio Nani Nani, Tokio 1989; Edificio Le baron vert, Osaka 1992; El museo de arte, Groninger 1994; Centro cultural Alhóndiga, Bilbao 2012 y sus casas prefabricadas P.A.T.H., 2014. Estas últimas configurables en los acabados interiores, cubierta y baños, diseñadas para funcionar con tecnología sustentable.
A la vista de tal cantidad de proyectos en campos tan diversos, uno se pregunta como es la dinámica de trabajo que le ha permitido tal productividad. Uno supone que bajo su dirección hay un numeroso equipo de diseñadores, técnicos y arquitectos.
Tengo muy pocas personas, un nanoteam, porque creo en mantenerme lo más ligero posible. La creatividad es algo ligero. Algunas personas las he tenido durante 30 años, y las elegí primero solo por intuición. Amé algo dentro de ellos. Puede que no tengan experiencia en diseño, pero tienen inteligencia, elegancia y honestidad.
Mi manera es no delegar. Diseño todo con mucha precisión, así que cuando le doy un proyecto a mi equipo, nada queda en duda. Lo reciben completamente terminado; no hay nada que hacer excepto cristalizarlo: ponerlo en la computadora —porque trabajo sólo con papel y pluma— y hago el prototipo.
Revista Harvard Business Review, Abril 2013.
La personalidad única de Starck se percibe en todos sus diseños. No parecen haber sido creados por un equipo, y estas palabras lo confirman. Como arquitecto sentí la necesidad de conocer como maneja día a día su trabajo y el necesario equilibrio entre la abstracción y aislamiento, con las reuniones, interacción con colaboradores, inspección en obras y talleres.
Soy una especie de monje moderno. Mi esposa y yo tenemos una colección de cabañas en medio de la nada, y nos mantenemos al margen de todo. No vamos a cenar; No vamos a los cócteles; No vamos al cine; No vemos televisión; No uso mi energía en otras personas. Yo solo trabajo y leo. Vivo conmigo mismo frente a mi página en blanco.
Yo gerencio en ausencia. Voy a la oficina dos, tres días al mes, y esos son los peores días para mí. Así que la gente de mi equipo hace lo que quiere, cuando quiere, pero los resultados tienen que ser perfectos, perfectos como el cristal.
Revista Harvard Business Review, Abril 2013
¿DISEÑO DEMOCRÁTICO?
Este hombre diseñó para el más alto nivel socioeconómico y hasta político –el Gobierno del presidente francés Francois Miterrand le encargó en 1982 el diseño interior de las estancias privadas del palacio presidencial de l’Elysée–. Pero no será tan recordado por ello, como por haberse planteado hacer llegar al público general el buen diseño.
Starck decide no trabajar solamente en un alto nivel socioeconómico, quiere extender el buen diseño a más personas y formula el Diseño Democrático. Nuevamente encontramos aquí una coherencia con sus ideas manifestadas en distintas ocasiones. Este “diseño democrático” está en línea con sentirse parte de una sociedad para la cual tenemos un deber:
Creo que el deber principal para merecer existir es servir
PHILIPPE STARCK
Dediqué treinta años de mi vida tratando de crear esta idea del “diseño democrático” que consiste en elevar la calidad, bajar el precio y hacerlo disponible a mucha gente. Y sabe usted, eso es mucho trabajo, es mucho más fácil hacer una pieza de mobiliario que valga un millón para tres personas, que hacer tres millones de piezas para tres millones de personas, porque no estamos en la fantasía, estamos en la vida real.
Pero en otro sentido, referido al proceso creativo y sus motivaciones, Starck dice en más de una oportunidad:
Pienso que hay personas que diseñan para su propia gloria, para que vean cuan buenos son, me motiva el cómo ayudar a mi familia, mis amigos, mi tribu, mi sociedad, mi civilización […] yo no diseño lo que la gente quiere, diseño lo que yo creo que la gente necesita.
Hay una manera muy fácil de establecer la diferencia entre buen y mal diseño, bueno es el diseño que contribuye a la calidad de nuestra civilización
PHILIPPE STARCK
Starck ha diseñado una cantidad de objetos utilitarios de bajo costo, esta vez no para ser adquiridos en tiendas de diseño, sino en tiendas como las de la cadena norteamericana Target, conocida por sus bajos precios. Esta idea de democratizar el diseño tiene tanto sentido y calado en el público, que la firma Ikea, presente en todo el mundo, la ha tomado como bandera. Ikea contrata a reputados profesionales como la diseñadora de interiores inglesa Ilse Crawford para fabricar utensilios para el hogar.
Diseños de Starck para Axiom Space
Siempre ha habido utensilios y artefactos de diseño, como la cafetera de Richard Sapper para Alessi, expuesta en el MoMA o los exquisitos artefactos eléctricos de la casa Braun creados por Dieter Rams, pero a precios no muy “democráticos”. Podríamos decir que al proponer la democratización del diseño, Philippe Starck ha sido uno de los responsables de que cada vez haya más hogares en el mundo con utensilios o mobiliario bellamente diseñados.
Otro inusual evento pero muy en línea con la formulación del “Democratic Design” fue su participación en la serie televisiva de la cadena inglesa BBC 2 llamada “Design for Life” (Diseño para la vida) en el año 2009. Starck seleccionaba 10 finalistas entre numerosos aspirantes del Reino Unido y como si estuviesen en un instituto de diseño cada participante tenía su mesa de trabajo y participaba con su idea en un examen para ganar el primer premio. El profesor Starck evaluaba y corregía proyectos que iban desde utensilios hasta residencias futuristas. No tengo duda de que estos programas dieron inspiración y ejemplo a muchos jóvenes. Sobre todo, dieron a conocer a muchos mas una disciplina útil a la sociedad.
Serie televisiva de la cadena inglesa BBC 2 llamada “Design for Life”[4] en el año 2009, en donde Starck es el mentor
UN MENSAJE AL FUTURO
Philippe Starck es quizá el único diseñador que ha completado con calidad una extensa gama de diseños en muchos ámbitos. Aunque muchas cosas han cambiado desde que comenzó su carrera, ha sabido mantener durante mas de cuarenta años una propuesta de vanguardia. Ha dejado una obra completísima, un ejemplo y también una filosofía.
La claridad es cortesía del filósofo, escribió Ortega y Gasset, Starck ha sabido transmitirnos el sencillo y profundo contenido que inspira su obra.
Yo creo que cuando uno nace, firma un contrato con su comunidad
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