POR ENERGIA16
20/11/2017
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Las empresas petroleras que operan en Colombia duplicarán la inversión este año hasta 5.000 millones de dólares, en un esfuerzo por mantener los niveles de producción aprovechando la estabilidad de los precios del crudo.
La decisión se toma porque la producción colombiana de petróleo ha caído en los últimos años, principalmente por la baja de los precios internacionales del crudo, que llevó a muchas empresas del sector a aplazar proyectos de exploración y de bombeo que no eran rentables.
“Queremos consolidar las señales de recuperación que estamos viendo. Tenemos una inversión programada para este año de entre US$4.700 y US$5.000 millones, más del doble de lo invertido el año pasado”, dijo a Reuters el presidente de la Asociación Colombiana del Petróleo, Francisco José Lloreda.
“Estas inversiones apuntan a que no se nos caiga más la producción y recuperar la dinámica exploratoria para incorporar nuevas reservas”, explicó Lloreda al revelar que se pretende hacer entre 45 y 60 pozos exploratorios, desde 25 en el año pasado, y 600 de desarrollo desde 150.
El directivo reconoció que la caída de entre 150.000 y 200.000 barriles por día (bpd) en la producción se debe principalmente a que un número importante de barriles no era rentable con precios por debajo de US$50 y admitió que todavía hay proyectos que no son viables financieramente con el rango actual del valor del crudo.
Petroleras afectadas por la guerrilla
El Gobierno colombiano estableció para este año una meta de producción de 865.000 barriles por día. Colombia tiene 2.002 millones de barriles de reservas probadas de crudo, equivalentes a 5,5 años de consumo, y busca incrementarlas con nuevos hallazgos y programas de mejoramiento.
Los ataques del ELN mantienen paralizado en la actualidad el bombeo por el oleoducto Caño Limón-Coveñas, lo que obligó a la estadounidense Occidental a suspender la producción de unos 52 mil barriles diarios en el Arauca, fronterizo con Venezuela.
La producción promedio de petróleo de Colombia cayó un 12% interanual en 2016 a 885.000 bpd, desde 1,006 millones de bpd en el año previo. El bombeo se ubica actualmente en niveles similares a los del 2010.