Por Cambio16 | Efe
28/09/2016
El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha retado a la presidenta de Andalucía, Susana Díaz, a aclarar «en qué bando está» y si apoya la abstención a Mariano Rajoy como defiende el exjefe del Gobierno Felipe González.
«Felipe está en el bando de la abstención, yo estoy en el bando del voto en contra a Rajoy y de crear un gobierno alternativo. Me gustaría saber en qué bando está Susana», ha asegurado Sánchez en una entravista concedida al eldiario.es.
Además, Pedro Sánchez ha animado a presentar hoy mismo su dimisión a los miembros de la ejecutiva federal que no se sientan parte del proyecto que él encabeza: «Si no se sienten parte de este proyecto, que no esperen que haya la mitad más uno, yo en su lugar dimitiría hoy», ha dicho.
Sánchez se ha referido así a la posibilidad que barajan los críticos desde hace semanas de conseguir la dimisión de más del 50% de los miembros de la ejecutiva (18 de 35) para apartar a Sánchez de la secretaría general y crear una comisión gestora que guíe al partido y permita con su abstención un gobierno del PP.
El secretario general, que se ha mostrado convencido de que eso no va a ocurrir, ha advertido a sus promotores de que la imagen que trasladarían sería que solo persiguen «derrocarle», en lugar de confrontar su posición política en el congreso del partido.
Contra la abstención
Según el secretario general, facilitar el gobierno de Rajoy a través de la abstención sería «abrir la puerta a la legislatura del chantaje» y situar al PSOE «en una posición subalterna respecto al PP».
Sánchez ha reconocido que «después de meditarlo mucho, de dudar mucho y de consultar mucho», llegó a la conclusión de que lo mejor era celebrar el congreso en diciembre y las primarias en octubre para que el partido defina su estrategia.
«Es importante que nos digamos las verdades, que lo hagamos en el lugar que corresponde, que es un congreso, y que aquella persona que salga elegida, sea elegida con una posición clara y definida sobre qué paso tiene que dar el PSOE», ha sostenido.
A su juicio, lo que vaya a pasar durante las próximas semanas, «va a condicionar el futuro» del partido, razón por la que «advierte de las consecuencias» de la decisión que se adopte.
Sánchez ha hecho estas declaraciones después de que González haya asegurado que «se siente engañado» después de que el secretario general le dijera que se abstendría ante Rajoy en segunda votación en una reunión mantenida tres días después de las elecciones del 26 de junio.
Ha mostrado su «respeto» por las opiniones de Felipe «como exdirigente del PSOE», pero le ha recordado: «Las decisiones las toma la Ejecutiva y las tomo yo en primera persona, que soy el secretario general».
El secretario general ha insistido en que el voto en contra del PSOE en la investidura de Rajoy se pactó en el Comité Federal celebrado el pasado 9 de julio con el apoyo de todos los barones territoriales, con los que consensuó la postura en los días previos.
No obstante, ha recordado que el mismo día en que se reunió el máximo órgano del partido y en las jornadas posteriores, hubo dirigentes que dijeron que el partido iba a «modificar la posición en agosto o posteriormente al debate de investidura».
Por ello, Sánchez ha vuelto a emplazar a los barones críticos a «dar un paso al frente, clarificar y hablar de verdad» en el congreso que propone, lo que debe ratificar o no el Comité Federal en la reunión del próximo sábado.