Por Cambio16
20/11/2017
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París será la nueva sede de la Autoridad Bancaria Europea (EBA, por sus siglas en inglés) cuando abandone Londres a causa del «brexit», según decidió hoy el Consejo de Asuntos Generales de la Unión Europea (UE), informó esa institución en Twitter.
La capital francesa, al igual que pasó momentos antes con Ámsterdam a la hora de elegir la sede de la Agencia Europea del Medicamento, resultó elegida por sorteo, pues en la tercera y última ronda de votación había quedado empatada a trece puntos con Dublín, indicaron fuentes comunitarias.
Tras el anuncio, el presidente de Francia, Emmanuel Macron, estimó que «el compromiso europeo» del país ha sido clave para que París fuese designada.
«¡París acogerá la Autoridad Bancaria Europea! Es el reconocimiento de la atracción y del compromiso europeo de Francia. Estoy contento y orgulloso de nuestro país», dijo Macron en un mensaje en Twitter.
Paris accueillera l’Autorité bancaire européenne ! C’est la reconnaissance de l’attractivité et de l’engagement européen de la France. Heureux et fier pour notre pays.
— Emmanuel Macron (@EmmanuelMacron) November 20, 2017
En la segunda ronda, Fráncfort había quedado fuera de la carrera al obtener sólo cuatro puntos frente a los trece logrados por Dublín y los diez de París.
Fráncfort (Alemania), sede del Banco Central Europeo, era en las apuestas la predilecta para albergar la EBA.
La banca europea se mirará desde París
La EBA, que cuenta con 159 empleados, se encarga de garantizar un nivel efectivo y coherente de regulación y supervisión en todo el sector bancario europeo.
Sus objetivos generales son mantener la estabilidad financiera en la UE y velar por la integridad, la eficiencia y el correcto funcionamiento del sector bancario.
Francia contaba ya con cuatro agencias de la UE, dos de ellas en la capital: Oficina Comunitaria de Variedades Vegetales (en Angers), la Agencia Ferroviaria de la Unión Europea (Valenciennes), la Autoridad Europea de Valores y Mercados (París) y el Instituto de Estudios de Seguridad de la Unión Europea (París).
La Comisión Europea deberá preparar sin tardanza las propuestas legislativas para los traslados, que necesitarán el visto bueno final de los países y la Eurocámara.