Por Benito Guerrero
18/02/2018
Esta exposición en el Circulo de Bellas Artes de Madrid pretende recrear el museo como fuente de inspiración para la obra de Pablo Picasso, un aspecto poco estudiado hasta la fecha. Picasso visitó por primera vez el Museo del Prado con 13 años y allí pudo contemplar la obra de grandes maestros españoles como Zurbarán, El Greco, Velázquez o Goya, entre muchos otros, unas imágenes que le acompañarían a lo largo de toda su vida y que influenciarían claramente su obra.
En su época de formación, llegó a pasar ocho horas al día en el Prado copiando a los grandes pintores. Pero, sin duda alguna, la obra del Prado que más le fascinó fue Las Meninas de Velázquez, un cuadro del que en 1957 llegó a realizar 58 versiones diferentes.
Otros artistas que le sirvieron de inspiración
En el caso de El Greco, Picasso vio por primera vez con 17 años un cuadro que supuso todo un descubrimiento para él. En 1897, visitó Toledo junto con los compañeros de la Academia de Bellas Artes de San Fernando y allí contempló en la Iglesia de Santo Tomé El entierro del conde de Orgaz, una obra que ejerció una gran influencia a lo largo de toda su carrera artística.
Otro museo parisino que ejerció una gran influencia en su obra fue el del Trocadero, donde acudió en 1906 por recomendación de su amigo, el artista André Derain, y donde conoció el arte primitivo, una iconografía que plasmaría en su cuadro Las señoritas de Aviñón, inicio de su periodo cubista. Esta exposición incluye el cuaderno de bocetos que dio origen a esta obra maestra de la historia del arte.
Todo este universo se ve reflejado en esta exposición, comisariada por Javier Molins, que cuenta con cerca de 200 obras procedentes de instituciones tan prestigiosas como el Museo Picasso de Barcelona, la Fundación Bancaja, la Fundación Picasso (Museo Casa Natal) de Málaga o la colección privada de Francisco Fandos.
¿Qué se ha querido transmitir con esta muestra?
Esta exposición pretende abordar el tema del museo como fuente de inspiración para Picasso. Se ha hecho a través de casi 200 obras que abarcan cronológicamente; desde una pintura realizada cuando tenía 18 años hasta algunos grabados ejecutados cuando ya tenía más de 90.
¿Cómo influye el museo en la obra de Picasso?
La mayor parte de la obra de Picasso es un diálogo con la historia del arte; con los grandes maestros de la pintura que él descubre en los museos. Picasso visita por primera vez el Museo del Prado cuando tiene 13 años y allí conoce las obras de los grandes maestros españoles como Zurbarán, El Greco, Velázquez o Goya, pero durante esa primera visita, tan sólo copió en su cuaderno dos obras de Velázquez: «El bufón calabacillas» y «El niño de Vallecas»; lo que ya adelantaba su gusto por los personajes marginales.
Durante su etapa de formación en la Academia de Bellas Artes de San Fernando pasaría más de 8 horas al día en el Prado copiando a los grandes maestros. Una vez se instala definitivamente en París; ya nunca volvería a España debido a su clara oposición a la dictadura franquista; por lo que el Prado fue sustituido como museo de referencia por el Louvre; donde conocería la obra de Delacroix e Ingres. Sobre Ingres; profundizaría en el Museo Ingres de Motauban; y en el Museo del Trocadero fue donde descubrió el arte primitivo que incorporaría a obras suyas tan conocidas como Las señoritas de Aviñón. Por tanto; los museos fueron para él tanto un lugar de aprendizaje como de inspiración para su obra.
Una muestra sin precendentes
¿Que novedades trae esta exposición respecto a otras de Picasso?
Esta exposición aborda por primera vez el tema del museo como fuente de inspiración para Picasso y; para ello; reúne obras procedentes de colecciones tan prestigiosas como el Museo Picasso de Barcelona; la Casa Natal Picasso en Málaga; la Fundación Bancaja o colecciones privadas. La exposición tiene una clara vocación didáctica y pretende introducir al visitante a través de 8 apartados claramente diferenciados en el universo creativo del artista.
El recorrido incluye fragmentos de la película documental El misterio Picasso; del cineasta francés Henry-Georges Clouzot; que se alzó en 1956 con el Premio Especial del Jurado del Festival de Cannes. La cinta; rodada en el estudio del pintor malagueño, permite conocer la técnica y el modo de trabajar de Picasso mostrando la creación de diversas obras de arte que fueron destruidas después de la filmación. Asimismo; la exposición también contiene una serie de esculturas africanas muy similares a las que contempló Picasso en el Museo Trocadero.