Por Cambio16
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Pablo Iglesias ha sido elegido candidato a la Presidencia del Gobierno en las primarias celebradas por Podemos, en las que ha obtenido un 93,89% de los votos emitidos (81,8 de los válidos). Asimismo, su equipo ha copado los primeros puestos de la lista con la que concurrirán al Congreso de los Diputados en las generales.
Las 65 personas que integraban el «Equipo Pablo Iglesias» han sido las que mayor apoyo han conseguido en las primarias, en las que competían con otras nueve listas, y que han concluido con una participación del 15,69%, ya que sólo han votado 59.723 personas de las 380.548 inscritas en Podemos.
El presidente del Comité Electoral de Podemos y secretario general en Aragón, Pablo Echenique, ha anunciado hoy en rueda de prensa los resultados y ha restado importancia a la escasa participación y a su posible relación con las criticas internas al reglamento de primarias, que establecía la circunscripción única para el Congreso y la posibilidad de elegir una lista completa conocida como «voto en plancha».
«El resultado es muy bueno, 59.000 personas no votan en ningún proceso en este país», ha dicho Echenique, quien ha aplaudido que el sistema de su partido es «el más democrático de lejos» frente a las «primarias sin primarias» del PSOE o el «dedazo» del PP.
«Muchos han planteado sugerencias constructivas sobre la mejor manera de llevar a cabo unas primarias y yo mismo he participado en ese debate», ha explicado, aunque también ha admitido que el proceso se puede mejorar y, de hecho, se estudia introducir mejoras para calcular el censo de inscritos, que es muy superior al número de personas activas en las votaciones.
Pese a ello, es posible que el reglamento de las primarias, como se temían sus detractores, haya beneficiado al equipo de Iglesias, que además no contaba esta vez con una competencia lo suficientemente potente como para hacerle sombra.
Iglesias ha obtenido 48.494 votos, mientras que ninguno de los otros cuatro aspirantes a candidato a la Presidencia ha superado el 4% de los sufragios.
La candidatura al Congreso la encabezarán, detrás de Iglesias, el número dos de Podemos, Íñigo Errejón -el segundo más respaldado con 45.122 votos-; la secretaria de Análisis, Carolina Bescansa -42.901-; la de coordinación de áreas, Irene Montero -42.345-; el responsable de Relaciones con la Sociedad Civil, Rafael Mayoral -41.444-; el secretario de Organización, Sergio Pascual -41.013-, y el responsable de unidad popular y secretario general en Madrid, Luis Alegre -40.977-, entre otros.
Les siguen Pablo Bustunduy, Ángela Ballester y Auxiliadora Honorato, todos miembros de la dirección del partido, además del abogado experto en propiedad intelectual y derecho informático David Bravo.
Hay también una pequeña representación de independientes, como la ex candidata de IU Tania Sánchez, el ex vocal de Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) José Manuel Gómez Bénitez y el ex portavoz de la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) Juan Antonio Delgado.
Además, entran en la candidatura al Congreso el portavoz nacional del Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT), Diego Cañamero; el alcalde de Marinaleda, José Manuel Sánchez Gordillo, y el director de cine Benito Zambrano, que se presentaban a las primarias en una lista alternativa denominada «Utopía y Dignidad», y que han sido los tres candidatos con más votos detrás de los miembros del equipo de Pablo Iglesias.
Esto se debe a que aproximadamente un 75 por ciento ha votado en bloque la lista del secretario general de Podemos, aunque Echenique ha rechazado que ese sistema haya beneficiado a los candidatos más conocidos.
Por el contrario, ha defendido que el modelo de primarias de Podemos ha conjugado «perfectamente» la lógica de la pluralidad y la necesidad de concurrir a las generales con un «equipo fuerte».
«Todos los procesos de primarias son mejorables», ha reiterado el dirigente de Podemos, quien ha señalado que el tiempo acelerado de la política no les ha beneficiado y ha puesto como ejemplo las amenazas por parte del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, de adelantar las elecciones, algo que les ha hecho acelerar su proceso de selección de candidatos.
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