El líder opositor ruso Alexei Navalni, sale del coma inducido y está respondiendo a estímulos verbales, informó el hospital Charité, en Berlín, donde está siendo tratado. Navalny es un activista político y uno de los críticos más fuertes al presidente Vladimir Putin.
El 22 de agosto fue trasladado a Alemania, a petición de su familia, dos días después de enfermarse a bordo de un vuelo interno en Rusia, tras beber de una taza. Expertos alemanes dijeron que las pruebas toxicológicas mostraron que el líder, de 44 años de edad, fue envenenado con un agente químico del tipo Novichok, que data de la era soviética.
Directivos del hospital Charité, informaron a través de un comunicado, que la condición clínica de Navalni es mejor. “El paciente sale de su coma inducido médicamente. Y, se le ha retirado la ventilación mecánica. Además, responde a los estímulos verbales”.
Sin embargo, el parte médico advirtió que «aún es demasiado pronto para evaluar los posibles efectos a largo plazo de su grave envenenamiento”.
Asimismo, los médicos tratantes indicaron que permanecen en estrecho contacto con la esposa de Navalni, quien autorizó la divulgación sobre la salud del político.
Navalni, envenenamiento y coma inducido
La Bundeswehr (ejército alemán) y el hospital berlinés Charité, identificaron la semana pasada el tipo de veneno que se le suministró al líder opositor. Se trata de un agente nervioso de origen soviético Novichok que afectó la salud de Navalni, y hoy se notifica su salida del coma inducido.
A raíz de esa comprobación, la canciller alemana Angela Merkel emplazó a Rusia con una «reacción común adecuada» de la Unión Europea (UE) y la OTAN. Tras referirse al envenenamiento del líder opositor.
«Esperamos que el Gobierno ruso aclare estos hechos. Se plantean ahora preguntas muy graves que sólo puede y debe responder el Gobierno ruso. La situación de Alexei Navalni despierta interés mundial. El mundo espera respuesta», dijo Merkel el pasado viernes.
Mientras tanto, el portavoz de la canciller, Steffen Seibert se refirió en rueda de prensa al caso del líder opositor ruso.
Al consultarle si la jefa de Gobierno trataría de evitar que se viera afectado el proyecto de gasoducto Nord Stream 2, en caso de sanciones contra Rusia.Seibert respondió: «La canciller considera que sería un error descartarlo desde el principio».
No obstante recordó que no se trata de un proyecto alemán, sino «europeo», y que cuenta con una «base legal» comunitaria.
Indicó además, que han pasado cuatro días desde que se anunció el envenenamiento con un «arma química militar» del grupo del ”Novichok” contra Navalni.
El «tiempo necesario» para una respuesta no ha sido precisado con un ultimátum. «Pero no hablamos de meses ni de finales de año», agregó Seibert. «Muchas personas y gobiernos esperan que Rusia aclare» lo sucedido.
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