Los servicios meteorológicos han replanteado al alza sus predicciones sobre la ola de calor en España y Europa. Hace unos días la Aemet alertó de las altas temperaturas y su incidencia directa en los incendios forestales, que aparecen replicados en el territorio español, pero sin alcanzar niveles históricos. Ahora, la agencia anunció que este fin de semana se espera un “episodio extremo” e incluso de “peligro extraordinario” en Navarra, La Rioja y Aragón, antes del fin de la intensa ola de calor este domingo.
En las próximas horas los termómetros se dispararán entre 40 y 43 °C en Ciudad Real, Córdoba, Girona, Granada, Guadalajara. Así como en Jaén, Lleida, Pamplona, Toledo, Zaragoza e inclusive en Madrid.
La ola de calor en España deja récords de máximas absolutas en el mes de junio, se acentuó este viernes con una nueva subida de temperaturas que superaron los 35 °C en amplias zonas de la Península y Baleares.
Los pronósticos apuntan a que este episodio de calor «extremo», como lo califica la Agencia Estatal de Meteorología, concluirá este domingo. Una vez entre por el norte del territorio, una bocanada de aire fresco procedente del Atlántico. Y provoque un «descenso acusado y generalizado» de temperaturas de hasta 12 grados menos que el día anterior. Una montaña rusa de temperaturas.
A la par de las altas temperaturas, se reportan chubascos y tormentas dispersas en áreas de la mitad norte peninsular y de forma más aislada en la mitad sur. Poco nuboso en Baleares. En Canarias, intervalos nubosos en el norte de las islas, y poco nuboso o despejado en el sur. No se descarta algún banco de niebla matinal en el interior de Galicia y del Cantábrico. Probabilidad de calima en la Península, Baleares y Canarias, dijo la Aemet.
Arrecia el calor en España y parte de Europa
La intensa ola de calor en España y en Europa occidental, anticipa la llegada formal del verano. Sus picos y récords reflejan el cambio climático.
Ropas ligeras, abanicos, playa, bebidas refrescantes se observan en la casi totalidad de la península. Con temperaturas generalizadas cercanas o superiores a los 40 °C previstas para el fin de semana. Los meteorólogos estiman que el calor alcance su punto máximo en Francia el sábado y el corazón en Alemania el domingo. En España, como ya señalamos, junto a Polonia y Austria sentirán temperaturas anormalmente altas durante las próximas horas.
El miércoles, Madrid escaló los 40,5 °C. La Agencia consideró que esta ola de calor es la más temprana en más de 40 años.
Cataluña, al noreste de España, tuvo uno de sus días más calurosos registrados el jueves, con 43,1 °C. Saint-Jean-de-Minervois, Francia, alcanzó los 40 °C el jueves, lo más temprano que el país ha alcanzado esa temperatura máxima en la historia registrada, reseñó The Washington Post.
El calor llega después de varios eventos de calor importantes de pretemporada en Europa durante mayo. España y Francia registraron cada uno su mayo más cálido en el archivo.
Mientras tanto, lugares en Polonia, Austria e incluso Rusia o Ucrania podrían experimentar temperaturas anormalmente altas a principios de la próxima semana.
La Organización Meteorológica Mundial advirtió que la actual ola de calor en Europa occidental, que ha traído temperaturas superiores a los 40 grados en España o Francia, «es un anticipo del futuro». Con más fenómenos climáticos extremos debido al calentamiento global.
«Como resultado del cambio climático, las olas de calor comienzan antes y se vuelven más frecuentes y severas. Debido a las concentraciones récord de gases de efecto invernadero que concentran el calor», añadió la portavoz de la OMM, Clare Nullis.
Presentadores de TV no saben cómo hablar de la ola de calor
La ola de calor en España y Europa occidental aumenta el consumo de energía, con el uso de aire acondicionado. Para aquellas viviendas que no tienen acceso a estos equipos, los riesgos son mayores para niños y ancianos que deben extremar la hidratación.
El clima, sin dudas ha cambiado y para mal. Ya los comentaristas del tiempo en los canales de televisión, no se muestran tan alegres y divertidos al referirse al verano, sus temperaturas altas y las vacaciones divertidas. Radio Francia Internacional desplegó una reseña sobre esos cambios.
El encargado de presentar el tiempo en BFMTV, uno de los principales canales de noticias de Francia, trocó la tonalidad de su habitual tono, dando rienda suelta a su indignación.
“Francia va a incendiarse”, afirmó encolerizado. «Creo que hay que cambiar la forma de hablar de esto, porque no lo están registrando (…) Esto va a ir a peor», advirtió el presentador Marc Hay.
«En el fondo, tiene razón. El calentamiento global nos afecta a todos. El asunto es demasiado serio”, coincide la periodista Christine Peña, especializada en el tiempo del canal estatal Franceinfo. Ella ha consultado con otros encargados de la rúbrica sobre cómo hablar del tiempo en época de cambio climático.
A la actitud de Marc se le une también la presentadora Géraldine de Mori, del medio RMC. «El discurso de Marc Hay me pareció muy bueno”.
Hace unos años, comentó “si me hubieras hablado de una ola de calor en junio, te habría dicho que era ciencia ficción. Estamos viendo cómo aumentan estos eventos extremos. Y por mucho que intentemos alertar, tenemos la impresión de que se habla un poco de ellos en su momento, y luego la gente no se preocupa. No sabemos cómo presentar las cosas para que reaccionen. Recibo muchos mensajes de gente que dice ‘sí, va a hacer calor, pero no vamos a llorar’. Sí, hay que llorar”, subrayó.
Europa, EE UU y otros lugares del mundo acalorados
El tema del calor en España y Europa y sus formas de alertarlo, también está alcanzando a algunas localidades de Estados Unidos. Las temperaturas máximas y mínimas récord han cubierto gran parte del centro y sureste del país en los últimos días. Y es probable que se desarrolle otro pulso de calor en el Medio Oeste y empuje hacia el este la próxima semana.
Estas olas de calor durante el último mes son solo algunas de las muchas que afectan al mundo en los últimos años. Esta primavera, India y Pakistán registraron los meses de marzo y abril más calurosos registrados en medio de una secuencia de olas de calor, que tienen 30 veces más probabilidades de haber ocurrido debido al cambio climático local. En 2021, el noroeste del Pacífico alcanzó temperaturas récord en una ola de calor considerada «prácticamente imposible» sin el calentamiento global.
“El cambio climático local está trayendo eventos climáticos extremos más frecuentes. Se prevé sequía y escasez de agua en Francia este verano, con daños directos a la agricultura”, escribió en un correo electrónico pata The Washington Post, Marc Poumadere. Científico de riesgo en París en el Instituto Symlog de Francia.
Los días de olas de calor pueden duplicarse para 2050 en la Península Ibérica, según un estudio. Encuentra que a medida que las ondas de calor se vuelven más largas y más intensas, también lo harán los riesgos para la salud humana, el riesgo de incendio y la demanda de energía.
Independientemente de los desafíos, hay indicadores de que Europa continúa adaptándose a la frecuencia elevada de calor intenso.
“En 2003, los riesgos de las olas de calor se subestimaron en gran medida, causando ese año en Francia unas 20.000 muertes más”, dijo Poumadere. “Francia ahora aplica un plan de ola de calor para restringir las muertes”.
Lluvias, calor y tornados
China fue golpeada esta semana por una rara convergencia de lluvias récord y olas de calor. Además, un tornado en la megaciudad sureña de Guangzhou, que desplazó a millones de personas, dañó propiedades e inundó tierras de cultivo, con más tormentas e inundaciones en camino.
Se espera que el sur de China vea lluvias torrenciales hasta el martes, informaron los medios estatales. Sin un respiro inmediato para la región inundada por los aguaceros de la semana pasada, reseñó Reuters.
Al menos siete provincias y regiones del sur emitieron alertas por tormentas severas e inundaciones para las próximas 24 horas.
Las autoridades lanzaron advertencias de «eventos meteorológicos extremos» ya en abril, antes de la temporada de lluvias que marca la transición estacional de primavera a verano en junio.
Históricamente, China es propensa a las inundaciones, lo que provoca deslizamientos de tierra e inunda muchos acres de tierras de cultivo.
En los últimos tiempos, el país se ha vuelto aún más vulnerable debido a la deforestación, la recuperación de humedales y el almacenamiento de agua para la generación de energía y el riego.