Por Miguel Ángel Artola
08/02/2017
Más de 20 actos –encuentros con la militancia, según sus propias palabras– ha protagonizado el diputado socialista por Gipuzkoa, Odón Elorza (San Sebastián, 1955), para afianzar en el seno de las bases de su partido la “rebeldía democrática” contra los dirigentes que derrocarron a Pedro Sánchez y permitieron a Mariano Rajoy seguir en el Gobierno de España gracias a la abstención del grupo socialista. Elorza, abanderado del no a Rajoy, se ha convertido en uno de los hombres de confianza de Sánchez en la “batalla” interna para recuperar la Secretaria General del PSOE. Cambio16 ha compartido con él –taza de té en mano– un intercambio de ideas sobre el presente y futuro de la socialdemocracia en España.
¿Por qué cree Odón Elorza que Susana Díaz está tardando tanto en anunciar su candidatura a las primarias? ¿Miedo a perder o pura estrategia?
Susana Díaz no ve las cosas claras y es consciente –aunque no lo reconozca– que hay un movimiento de rebeldía democrática y pacífica en la militancia, que no ha aceptado los cambios de posición que se han producido en el PSOE y su forma de comportarse, impulsando esa especie de conspiración final contra Pedro Sánchez. Está testando que cuando va a un lugar fuera de Andalucía no tiene grandes acogidas, no mueve en absoluto multitudes dentro del partido socialista. Además dentro de la propia Andalucía se ha producido un levantamiento de un sector de los militantes, aunque aún no se sabe el apoyo que va a tener finalmente Pedro Sánchez.
Más allá de los personalismos, ¿qué diferencias de modelo para el PSOE están en juego en las próximas primarias y en el Congreso?
Los militantes tienen que elegir entre continuísmo puro y duro, con todo lo que significa no poder dar la batalla a Podemos para recuperar militancia y no poder tener un partido que recupere credibilidad. Y la otra vía, la otra opción, la de apoyar un proyecto colectivo que sea un revulsivo para que el PSOE recupere su credibilidad, para que el partido se sitúe en el espacio de una izquierda reformista y transformadora, diferente por supuesto a la de Podemos, con personalidad propia. Defender una política de alianzas que busque el entendimiento, cada cual con su personalidad, de las fuerzas de progreso y de izquierda del conjunto del Estado.
¿Habrá alguna “jugada” de última hora para eliminar los primarias o intentar controlar su resultado final?
Le resultaría muy difícil al aparato del partido y a la vieja guardia hacer ahora otra conspiración, dar una especie de golpe. No creo que se atrevan aunque las cosas les vengan mal dadas. Por tanto, creemos que las primarias se celebrarán, pero tampoco estamos absolutamente confiados. Estamos vigilantes y seguimos además apoyando a las plataformas de militantes,que se han creado muchas de ellas por generación espontánea en toda España, que siguen también en guardia reclamando primarias democráticas, con concurrencia y un Congreso democrático.
¿Le preocupa que la candidatura de Patxi López pueda dividir el voto crítico contra Susana Díaz?
La presentación de Patxi López como candidato no me pilló de sorpresa, porque la operación se veía venir ya desde hace algún tiempo. Y también el cambio de posición de una serie de dirigentes del PSOE como Óscar López, César Luena, Antonio Hernando y otros cuantos. Pero no nos preocupa porque esta batalla interna en el seno del partido socialista no la van a resolver los generales ni los aparatos, la va a decidir la militancia en unas primarias abiertas en las que el voto de un secretario general vale lo mismo que el de cualquier otro militante .
¿Le parece adecuado decir que los barones están con Susana, los cuadros medios con Patxi y la mayoría de la militancia con Pedro?
No es exactamente como dices, aunque el dibujo se puede parecer. En todo caso esa fotografía va a ir cambiando y mucho durante las próximas semanas. Creo que la estamos ya cambiando porque cada vez que hacemos un acto y sobre todo cada vez que protagoniza un encuentro Pedro Sánchez al poco tiempo ya hay cargos públicos y orgánicos que estaban un poco a la expectativa, algunos que incluso podían estar de perfil, que a la vista de cómo va creciendo esa marea roja dentro del PSOE ya se definen. Sánchez gana apoyos día a día tras cada acto en el que se provoca una gran movilización.
Estas primarias son muy diferentes a las de hace dos años y medio. Han cambiado muchas cosas y sobre todo tenemos una militancia mucho más madura que no se va a dejar pastorear ni a dejarse influir por llamadas telefónicas desde una dirección o un comité determinado para indicarles que tienen que votar. Eso se ha terminado porque va en contra de la regeneración y de un partido democrático abierto. La militancia votará en libertad por mucho que algunos recurran a técnicas clientelares.
¿Si gana Pedro Sánchez el proceso de primarias qué pasos dará para recuperar la maltrecha unidad interna en el seno del PSOE?
Es verdad que lo inmediato será reconstruir la unidad del partido socialista. Estamos reflexionando, sobre los pasos a dar, lo hemos analizado y tendrá acogida en el documento estratégico del equipo de Pedro Sánchez. Entendemos que el nuevo liderazgo que salga de las primarias y del Congreso tiene que ser un liderazgo incluyente, no excluyente, tiene que ser un liderazgo integrador, también hacia sectores de la sociedad que sufren la crisis.
¿Estamos abocados a vivir una futura guerra de avales, de enmiendas a los textos oficiales de la Gestora cara al Congreso, en definitiva, al cuerpo a cuerpo entre candidatos o el PSOE puede dar finalmente una imagen de juego limpio interno?
A mí me parece que la gestora tiene que ser –no quiero parecer ingenuo– absolutamente neutral, garantista de que el proceso de primarias y el Congreso se desarrolle con todas las garantías democráticas sin ningún tipo de cosas extrañas, sin ningún tipo de trampas, de ingerencias, en igualdad de condiciones para todos los candidatos o candidatas. La gestora no puede seguir tomando partido por una opción concreta, no pueden apoyar actos en favor de una supuesta candidatura que se pueda dar. Es exigible, no ya de una ejecutiva saliente, sino todavía con más razón por parte de una gestora provisional que tiene una muy dudosa legitimidad que sea garantista, que sea objetiva y que sea neutral.
La exigencia hacia la Gestora va a subir de tono a la vista de lo que estamos viendo. El último ejemplo ha sido elaborar una lista de 226 hombres y mujeres socialistas invitados a participar en los trabajos de desarrollo de las ponencias y en esa larga lista no hay ninguna persona vinculada, cercana a él, a Pedro Sánchez, o como es mi caso a las posiciones políticas que representa. Estamos preocupados y creemos que el conjunto del partido tiene que estar muy vigilante.