Las libertades de expresión, ya menguadas en el régimen de Recep Tayyip Erdogan, se encuentran ahora más disminuidas por la acción oficial. El Parlamento de Turquía aprobó una ley que permite al Estado ejercer mayor control sobre las redes sociales, Facebook, Twitter y YouTube.
Decenas de miles de páginas web están actualmente bloqueadas en Turquía, pero con la nueva ley, podrían elevarse mucho más. El instrumento jurídico le permite al régimen censurar los contenidos. Wikipedia estuvo prohibida casi tres años.
En el texto legal obliga a Facebook, Twitter y YouTuben a cumplir unas estrictas condiciones de operatividad. De lo contrario, tendrán que afrontar el pago de fuertesvmultas o reducciones de ancho de banda, que las volverían inútiles.
La ley fue aprobada con la mayoría de parlamentarios integrantes de la formación de Erdogan, del Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP). Y su aliado de extrema derecha, el Partido del Movimiento Nacionalista (MHP).
Los defensores de la libertad de expresión y de derechos humanos califican la ley de «draconiana». Dará a Erdogan más poder para controlar y censurar los contenidos en Internet. Piden a las grandes empresas tecnológicas como Google que rechacen los quehaceres legislativos de Erdogan y sus asociados.
Las redes sociales que tengan más de 1 millón de usuarios al día tendrán que nombrar un representante legal en Turquía. En el caso de que no nombren un representante legal, que deberá ser un ciudadano turco, las empresas podrán ser obligadas a pagar una multa entre 1.500 y 1 millón de dólares. Asimismo, se reducirá su ancho de banda, en forma progresiva, hasta que la red social quede inutilizable.
Erdogan, más control de las redes sociales
La ley regulatoria establece que las redes sociales deberán almacenar los datos de sus usuarios de Turquía. De este modo, será más fácil para los fiscales y las autoridades el acceso a esa información. En adición, se establece un plazo de 48 horas para eliminar contenido que las autoridades consideren “ofensivo”.
Después de que el nacimiento de su nieto fuera objeto de burlas en Twitter, Erdogan amenazó con regular las redes sociales. «¿Entienden por qué estamos contra las redes sociales como YouTube, Twitter y Netflix? Para erradicar esa inmoralidad», argumentó.
Con frecuencia la dictadura turca detiene y procesa a personas por criticar las políticas gubernamentales desde las redes sociales.
Erdogan considera las redes sociales como centros de «depravación» y como una «fuente de mentiras, difamaciones, ataques contra los derechos de las personas y asesinatos simbólicos».
Andrew Gardner, portavoz de Amnistía Internacional en Turquía, se refirió a la ley: “Este texto aumentará significativamente los poderes del Gobierno para censurar contenido en la red y procesar judicialmente a los usuarios de redes sociales”.
Manifestó que “es una clara violación del derecho a la libertad de expresión en la red. Contraviene el derecho y las normas internacionales de derechos humanos”. Durante el debate parlamentario, miles de usuarios publicaron mensajes en Twitter bajo la etiqueta “paren la ley de censura”.
Lee también: