OpenAi abrió su tienda de chatbots y para sorpresa de muchos los que asumieron el liderato en la demanda son los de “novias con IA”. Del mito griego de Pigmalion a Las esposas perfectas (The Stepford Wives) pasando por Her y Ex Machine, la idea de una novia perfecta ha seducido y se ha instalado en el imaginario masculino.
El 10 de enero, OpenAI anunció la tan esperada apertura de la tienda online de GPTs. Ahora, miles de bots diseñados para diversas necesidades están disponibles para cualquier individuo o empresa con una suscripción a ChatGPT Plus. Los chatbots son aplicaciones software que simulan mantener una conversación con los usuarios, utilizando inteligencia artificial y procesamiento del lenguaje natural.
A lo largo de los años, han experimentado modificaciones para ser aplicados en diferentes ámbitos, como el comercio digital, la atención al cliente y la automatización de procesos. Los bots pueden ayudar en una variedad de tareas, desde planificar tu próxima aventura de montañismo, diseñar el logo de tu emprendimiento, hasta revisar tu tesis académica.
Según el anuncio oficial de la empresa, desde el lanzamiento de la iniciativa, los usuarios han generado aproximadamente 3 millones de versiones personalizadas de ChatGPT. La visión original siempre fue combinar toda esta creatividad en una tienda en línea para que todos tengan acceso a ella. Además, se contempló la posibilidad de monetización para los desarrolladores. Una demostración el poder y la versatilidad de la inteligencia artificial. Y de como puede ser utilizada para fomentar la creatividad y la innovación. En una revisión superficial de los Chatbots disponibles realizada por Gizmondo, encontraron desde la posibilidad conversar con Jesús (el hijo de la Santísima Trinidad) y con Hitler o con una roca mascota (que obviamente no responde) y con bot «fumado».
Sorpresa
Sin embargo, un fenómeno curioso surgió tras el lanzamiento de la tienda de OpenAI. Al buscar la palabra “novia”, aparecen al menos ocho chatbots de inteligencia artificial diferentes que prometen desempeñar el papel. Los chatbots relacionales, como “Novia mandona”, “Tu ex-novia Jessica”, “Tu novia de IA, Tsu” y “Tu novia Scarlett”, se han vuelto populares. Estos bots inundaron rápidamente la tienda GPT de OpenAI tras su lanzamiento.
Los chatbots de novias con IA ofrecen una experiencia de novia virtual personalizada y atractiva. Simulan ser una novia que puede interactuar con los usuarios, ofreciendo conversaciones y respuestas personalizadas. Los usuarios pueden elegir el nombre, la personalidad y las características de su novia virtual. Lo que les permite crear una experiencia a la medida.
La tendencia no debería sorprendernos. Las relaciones interpersonales están cada vez más mediadas digitalmente a través de aplicaciones y pantallas. Especialmente entre las generaciones más jóvenes. Lo que ha permitido que los robots de relaciones se conviertan en un complemento natural. No obstante, las nuevas parejas románticas virtuales podrían ser más una novedad que una nueva normalidad. “No creo que vayamos a perder las relaciones personales en favor de las relaciones con chatbots”, opina Laura Nelson, profesora de sociología de la Universidad de Columbia Británica. Afirma que los chatbots de relaciones ocupan un nicho y es probable que sigan así.
Los chatbots de relaciones existen desde hace más de una década. En 2014, Microsoft lanzó su chatbot Xiaoice, que se convirtió en un éxito viral en China. Fue considerado por muchos como una novia virtual. Sin embargo, los chatbots de novia con IA no tuvieron tanto éxito en Estados Unidos en ese momento. Nelson es escéptica sobre si los chatbots de novia o novio tendrán un auge en el corto plazo.
IA «femeninos»
La socióloga cree más probable que los chatbots para relaciones se dirijan a los hombres. Históricamente ha habido un pequeño sector de la población en el que más hombres que mujeres buscan una conexión sexual y emocional a través de medios. Como los mensajes de texto sexuales y los foros en línea. Nelson cree que seguirá siendo así en el mercado de la inteligencia artificial. Donde, además, se puede ganar dinero.
Nelson dijo que, en gran medida, los chatbots de IA “femeninos” son más comunes que los “masculinos” por razones sociales. Los hombres, debido a la presión social, para entablar amistad no son tan buenos creando vínculos emocionales con otros hombres. Los chatbots para amigas pueden satisfacer necesidades que muchos no reciben de sus amigos varones. Para las mujeres, la interacción con un chatbot está más estigmatizada. Por lo que es menos probable que hagan pública la idea de salir con un chatbot. Mientras tanto, las relaciones entre hombres y la IA se han normalizado a través de la cultura pop. Quizá el ejemplo más destacado sea la película Her, en la que Joaquin Phoenix entabla una relación con una asistente virtual de inteligencia artificial con la voz Scarlett Johansson.
Secuela de la pandemia
El fenómeno de los bots, que hoy vemos materializado, comenzó anteriormente con diversas aplicaciones. Se intensificó durante la pandemia. Un período en el que muchas personas se encontraron aisladas y sin la posibilidad de socializar en persona. Según un artículo de El País que explora las aplicaciones que funcionan como “novias o novios”, la socióloga Blanca Moreno opina que aunque pueden proporcionar compañía a las personas que a menudo se sienten solas, no promueven la verdadera socialización. Ya que con los bots “nadie les lleva la contraria”.
A pesar de lo cual, existen iniciativas que buscan reemplazar las interacciones humanas con inteligencia artificial. Incluso en herramientas destinadas a ayudar con la salud mental. The Guardian publicó que la startup Inflection AI lanzó en mayo su chatbot Pi, diseñado para brindar apoyo emocional a las personas a través de consejos y respuestas amigables. Pi fue entrenado con más de 600 personas, incluyendo profesionales de la salud mental, para dotarlo de características sensibles y conversacionales.
Un estudio de la National Library of Medicine sugiere que este tipo de chatbots tiene el potencial de ofrecer elementos de terapia cognitivo-conductual y otras herramientas de salud mental para aliviar los síntomas de la depresión y el estrés. Sin embargo, aún no hay suficiente evidencia para llegar a una conclusión definitiva.
Empatía importa
¿Pueden los bots realmente actuar como un ser humano? Según un artículo de Science, un estudio dirigido por Hang Juang, informático del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), concluyó que los modelos de lenguaje que entrenan a la inteligencia artificial pueden adquirir diferentes tipos de personalidades con rasgos como la introversión, el antagonismo y la neurosis, y luego reproducirlos en una conversación.
Candela Arregui, psicóloga especializada en adolescentes y adultos, explica en una entrevista con RED/ACCIÓN que, aunque los chatbots pueden ser muy útiles en ciertos contextos, es imposible que reemplacen las interacciones humanas. Según Arregui, la tecnología es una forma de simplificar la realidad. Pero la humanidad es compleja e intrincada, con un nivel emocional y espiritual que a menudo se pasa por alto.
Además, Arregui señala que, aunque estos bots pueden reproducir palabras e ideas programadas por los humanos, no pueden empatizar con una persona que sufre, por ejemplo, de soledad. Según Arregui, “No hay sentimientos por parte del bot. Las respuestas son programadas, no existe la particularidad”.
Moda o burbuja
Para la socióloga Laura Nelson una preocupación importante son las barreras de seguridad que se establecen cuando un usuario comparte información confidencial con un bot. No obstante, con gigantes tecnológicos como Microsoft y OpenAI lanzando nuevos chatbots con los que la gente interactúa a diario, está claro que han llegado para quedarse. La pregunta es qué otras formas adoptarán en el futuro. En China, el chatbot Xiaoice se ha integrado en la sociedad, proporcionando en algunos casos apoyo emocional a los padres ancianos. China tiene políticas más estrictas sobre lo que la tecnología puede y no puede hacer, lo que puede haber influido en el rumbo tomado por el chatbot.
Un estudio de 2019 descubrió que el uso de robots no verbales, similares a mascotas de peluche, tenía el potencial de mejorar la calidad de vida, la interacción social y la soledad de los adultos mayores que viven con demencia. Nelson especula que es probable que veamos chatbots diseñados para asistir en el trabajo, redactar correos electrónicos o cuidar a los ancianos. Y que, como con cualquier ciclo tecnológico, una vez que se calme el ruido inicial, surgirán los usos reales.
Los desarrollos en el campo de los chatbots son emocionantes y tienen el potencial de cambiar la forma en que interactuamos con la tecnología. Pero, si recordamos los finales de todas esas obras de novias perfectas creadas por el hombre, de la escultura de Pigmalion a la robot con IA de ExMachine, veremos que no fueron más que una ilusión. Nunca fueron reales y ni tuvieron el famoso “vivieron felices por siempre”. Mejor les ha ido a los hombres con las novias con inteligencia natural, aunque no sean perfectas.