El metano es responsable de aproximadamente 30% del calentamiento global, por lo que reducir un 45% de sus emisiones sería la vía mas eficaz para frenar el cambio climático. Su reducción también evitaría 260.000 muertes prematuras, 775.000 visitas a los hospitales relacionadas con el asma, 73.000 millones de horas de mano de obra perdidas por calor extremo y 25 millones de toneladas de pérdidas de cultivos al año, según sugiere una nueva investigación.
Una evaluación global del metano publicada por la Coalición Clima y Aire Limpio (CCAC) y el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) muestra que es posible reducir las emisiones de metano hasta un 45% en la próxima década. Tales reducciones evitarían casi 0,3°C de calentamiento global para 2045. Además, contribuirían a cumplir con el objetivo del Acuerdo de París de limitar el aumento de la temperatura global a 1,5°C.
Reducir drásticamente el metano
El informe, que involucra a investigadores del Instituto de Medio Ambiente de Estocolmo (SEI) en la Universidad de York, considera importante centrarse específicamente en la mitigación del metano como parte de la acción climática en esta década, lo que conducirá a nuevas reducciones hasta 2050. Sobre todo ahora que más países están reconociendo que es necesario la reducción de emisiones de metano como parte de la acción climática.
El metano se produce cuando los seres vivos se descomponen, por lo que es un ingrediente clave en el ozono a nivel del suelo y un contaminante dañino para los seres humanos. Representa casi una quinta parte de las emisiones globales de gases de efecto invernadero. Esto lo hace el principal contaminante climático de corta duración que debe abordarse para hacer posible la meta de 1,5°C.
“Reducir el metano es la vía más eficaz que tenemos para frenar el cambio climático. Además, complementa los esfuerzos necesarios para reducir el dióxido de carbono”, dijo Inger Andersen, directora ejecutiva de la agencia de la ONU.
La necesidad de acción es urgente debido a que las emisiones de metano causadas por el hombre están aumentando más rápido que en cualquier otro momento desde que comenzaron los registros en la década de 1980. Pero a diferencia del CO2 que permanece en la atmósfera durante cientos de años, el metano comienza a descomponerse rápidamente. Incluso, la mayor parte desaparece después de una década. Esto significa que reducir las emisiones de metano ahora puede reducir rápidamente la tasa de calentamiento a corto plazo.
Principales responsables de las emisiones de metano
La evaluación explica que la mayoría de las emisiones de metano causadas por el hombre provienen de tres sectores: combustibles fósiles, desechos y agricultura. El sector de los combustibles fósiles, la extracción, el procesamiento y la distribución de petróleo y gas representan 23%. La minería del carbón el 12% de las emisiones.
En cuanto al sector de los desechos, los vertederos y las aguas residuales representan aproximadamente 20% de las emisiones. Y en el sector agrícola, las emisiones de ganado provenientes del estiércol y la fermentación entérica representan alrededor de 32% y el cultivo de arroz 8% de las emisiones.
Soluciones rápidas y eficaces
La evaluación identifica posibles reducciones rápidas y significativas de los gases de efecto invernadero utilizando las tecnologías existentes y a un costo muy bajo. Al implementar estas soluciones, las emisiones de metano pueden reducirse 30% para 2030. Sin embargo, las medidas específicas por sí solas no son suficientes. Aquellas medidas que no se dirigen exclusivamente al metano, como un cambio hacia la energía renovable, la eficiencia energética residencial y comercial y una disminución de la pérdida/desperdicio de alimentos pueden reducir las emisiones de metano otro 15% para 2030.
La investigación encontró que el potencial de mitigación varía entre países y regiones. El mayor potencial de Europa e India está en el sector de los residuos. En China proviene de la producción de carbón, seguido de la ganadería, mientras que en África proviene de la ganadería, seguida del petróleo y el gas. En la región de Asia-Pacífico, con excepción de China e India, el mayor potencial está en el carbón y los desechos, y en el Medio Oriente, América del Norte y Rusia, está en el petróleo y el gas. Para América Latina, el mayor potencial reside en el subsector ganadero.
Grandes beneficios climáticos, económicos y de salud
A pesar de que la pandemia de la COVID-19 en 2020 impidió que se alcanzara otro máximo de emisiones de dióxido de carbono (CO2), la cantidad de metano en la atmósfera se disparó a niveles récord. Esto en base a los datos publicados por la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de los Estados Unidos (NOAA). Andersen insiste en que los beneficios para la sociedad, las economías y el medio ambiente son numerosos y superan con creces el costo. «Necesitamos cooperación internacional para reducir urgentemente las emisiones de metano tanto como sea posible en esta década», asegura.
Drew Shindell, quien presidió la evaluación de la CCAC señala que si se quiere cumplir con objetivos climáticos globales, es necesario reducir tanto las emisiones de metano como las de CO2. La buena noticia es que con estas acciones no solo habrán beneficios climáticos, sino también beneficios económicos y de salud.
Lea también: