Por Andrés Tovar
13/01/2017
Los accionistas de Nintendo no están impresionados con los nuevos pasos de la compañía.
El gigante de los juegos con sede en Kyoto (Japón) ha anunciado que su próxima consola híbrida, el Switch, podría salir a la venta el 3 de marzo y vender por $299 (300 euros) y casi inmediatamente el precio de sus acciones cayó, lo que sugiere inversores no creen que el dispositivo no le ahorrará a la empresa un futuro inestable.
Durante una presentación de una hora en Tokio, la empresa confirmó que el Switch se podrá utilizar en tres formas: como un dispositivo móvil, un dispositivo de sobremesa y una consola de sobremesa que se conecta a los televisores. Para las dos últimas opciones, los jugadores pueden utilizar unos mandos desmontables llamados Joy-Cons, muy parecidos a los mandos con sensores de movimiento que hizo de la consola original de Wii un éxito hace más de una década.
Los ejecutivos destacaron dos ofertas próximas que harán un mejor uso de las Joy-Cons. La primera, 1-2 Switch, una colección basada en mini-juegos que se pueden jugar sin mirar a una pantalla, lo que permite una mayor interacción cara a cara. La segunda, llamada Arms, es un juego de boxeo que permite a los jugadores lanzar golpes virtuales con sus propios cuerpos.
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La compañía también mostró las vistas previas para Super Mario Odyssey (un nuevo título de Mario) y Zelda: Breath of the Wild (otra actualización de un clásico). No se dieron fechas de lanzamiento.
También añadió que el Switch vendrá con un servicio de suscripción para descargas en línea, permitiendo a los usuarios pagar por los juegos luego de un preview, algo que la compañía ha sido relativamente tardía en poner en práctica en comparación con sus pares.
También se menciona una red de juegos en línea que permitiría a los usuarios jugar con amigos y chatear en línea, una característica que ha sido durante mucho tiempo disponible en las consolas de la competencia, a pesar de que es nuevo para Nintendo.
Peor aún, con sus casi $ 300 de costo, el dispositivo será más caro que las últimas consolas de Sony y Microsoft. Un Sony PlayStation 4 se vende por alrededor de $ 270 (280 euros). Lo mismo vale para una Xbox One.
Nada de esto excita a los inversores. Las acciones abrieron en Japón ligeramente por debajo de su cierre anterior con rumores difundidos sobre el precio del dispositivo. Cuando la compañía confirmó el precio durante la presentación, el precio de las acciones de Nintendo se redujo aún más. La acción cerró abajo de 5.75% desde el día anterior.
Daniel Ahmad, un analista de la industria de juegos de la firma de investigación de Niko Partners, cree que el precio de la consola hará poco para excitar a los clientes potenciales, que ya están acostumbrados a los servicios en línea de sus competidores. «A este precio la consola puede tener difícil competir con los nuevos compradores que están buscando una experiencia completa con sus consolas en casa», dijo.
Nintendo necesita urgentemente para modernizar su modelo de negocio para adaptarse a los cambios de la industria. A medida que los consumidores medios crecen en sus dosis de juegos en los teléfonos inteligentes en lugar de las consolas domésticas, la compañía ha estado contra las cuerdas. Sony y Microsoft han mantenido las ventas saludables apelando a los jugadores hardcore. Pero el punto fuerte de Nintendo siempre ham sido los jugadores casuales -el grupo más probable para deshacerse de un dispositivo doméstico caro para una descarga gratuita de Flappy Bird en su teléfono inteligente-. Esto es problemático para Nintendo: la empresa hace casi la totalidad de sus ingresos de las consolas y los juegos jugados en ellos.
La compañía sus horizontes año pasado. Puso en marcha dos juegos para teléfonos inteligentes basados en personajes famosos: Pokemon y Super Mario Go Run. El primero fue un gran éxito , pero Nintendo tiene que compartir los ingresos con las tiendas de aplicaciones, con el co-desarrollador Niantic, y una empresa de licencias denominada la Compañía Pokémon, en la que que Nintendo tiene una participación. Super Mario Run, por su parte, atrajo una oleada de descargas para una versión básica gratuita, pero rápidamente cayó de la lista de juegos de mayor recaudación en la App Store de Apple, lo que sugiere algunos jugadores estaban dispuestos a pagar $ 10 para la experiencia completa.
Así que, si los juegos móviles ni el Switch logran remontar sus ganancias a medidos de año, de la compañía podría verse en aprietos.