La última misión espacial impulsada por la NASA, emprendió un largo viaje hacia Psyche, un asteroide rico en metales que orbita alrededor del Sol entre Marte y Júpiter. El interés de esta nueva aventura radica en que, según las observaciones telescópicas, es uno de los objetos más inusuales del Sistema Solar y está compuesto de hasta un 60% de hierro y níquel.
El lanzamiento de la nave de investigación, también llamada Psyche, se realizó desde Cabo Cañaveral, en Florida este viernes 13. La misión emprendió viaje de seis años y 3.500 millones de kilómetros (2.200 millones de millas) en busca de muchas respuestas.
Los científicos esperan que su cantera esté llena de sorpresas. Del millón y medio de asteroides conocidos en el Sistema Solar, sólo nueve parecen compartir algo de las propiedades de Psyche. La observaciones indican que el asteroide está hecho principalmente de metales y se piensa que formó parte del núcleo de un planeta que falló en su formación. De ser así, esto podría darnos más información sobre cómo se formó el núcleo terrestre y el de otros planetas.
«Ahora comienza la verdadera diversión. Mientras corremos hacia el asteroide Psyche para descubrir los secretos de cómo se forman y evolucionan los planetas», afirmó Laurie Leshin, directora del Laboratorio de Propulsión a Chorro (JPL) de la NASA en el sur de California.
Nicola Fox, administradora asociada de la Dirección de Misiones Científicas de la NASA en Washington, comentó que «al estudiar el asteroide Psyche, esperamos comprender mejor nuestro universo y nuestro lugar en él”. El lanzamiento de la sonda coincidió con el anuncio de la NASA de los resultados de una muestra de material traído a la Tierra desde el asteroide Bennu, en las cuales se observan moléculas de agua y de carbono.
¿Misión científica o económica?, tras las pistas del asteroide Psyche
Pero, ¿cuánto cuesta esta misión científica?. Y ¿cómo se puede determinar realmente el valor monetario de un asteroide como Psyche?.
La misión tiene un costo de 100.000 billones de dólares. Si los metales de Psyche estuvieran en la Tierra, valdrían más que toda la economía mundial, según una estimación de la científica principal de la misión Psyche, Lindy
Elkins-Tanton. Pero, por supuesto, estos metales no están en nuestro planeta, ni siquiera cerca. Aún así, el valor espectacularmente alto indica cuán emocionante e impactante podría ser la misión Psyche, no solo para la ciencia planetaria sino también para la incipiente industria minera de asteroides, reseña la web Space, dedicado al espacio y la astronomía.
Psyche (Psique), que lleva el nombre de la diosa del alma en la mitología griega, podría ser parte del núcleo de hierro y níquel de un «planetesimal». Un bloque de construcción de todos los planetas rocosos, que quedó expuesto después de que una antigua colisión desprendiera el exterior.
Además, es un asteroide de tipo M, lo que significa que es metálico. Aunque no está del todo claro de qué tipo de metal está hecho. La espectroscopia, una de las formas en que los científicos determinan la composición de los objetos celestes, divide la luz que sale de un objeto en un espectro, dándole a cada objeto una «huella digital espectral».
«Desafortunadamente, el metal no tiene una huella espectral única», comentó a Space, Vishnu Reddy, profesor del Laboratorio Lunar y Planetario de la Universidad de Arizona. «Se puede saber que algo es metálico, pero no se puede saber específicamente de qué metal se trata».
Un asteroide lleno de minerales
Métodos como el radar muestran que la superficie de Psyche es altamente reflectante pero no revelan cuál es el material reflectante, precisó el académico. Muchos científicos creen que la superficie de Psyche está compuesta principalmente de níquel y hierro, ya que esos elementos tienden a ser comunes en los asteroides, añadió.
Los científicos también pueden utilizar simulaciones por computadora, junto con los gigantescos cráteres de impacto en la superficie de Psyche, para determinar de qué podría necesitar estar hecho el asteroide para sobrevivir a las colisiones que crearon los cráteres.
Wendy Caldwell, científica del Laboratorio Nacional de Los Álamos, indicó que algunos de sus resultados más prometedores, incluidos los hallazgos de un estudio de 2020, señalaban que el asteroide estaba hecho de Monel. Un metal compuesto principalmente de níquel y cobre. Y se cree que es representativo de la composición de los objetos metálicos en el espacio.
«No podemos decir definitivamente si esta es la composición», dijo Caldwell. Pero estos modelos pueden ayudar a los científicos a identificar los materiales que pueden o no ser factibles, añadió, y lo sabremos mejor una vez que lleguemos allí. Lamentablemente, la espera es larga. La nave espacial Psyche no está programada para llegar a su objetivo hasta 2029.
Independientemente de qué esté hecho Psyche, es probable que contenga tanto metal que al estimar su cantidad y multiplicarlo por el valor de mercado actual se obtenga una cifra increíble. Como la cifra de 100.000 billones de dólares que Elkins-Tanton estima que se podría obtener únicamente con la extracción de hierro.
La huella del hombre: riqueza y rentabilidad
No hay planes para minar Psyche, ni tecnología que nos lo permita. Incluso si pudiéramos extraer Psyche y traer los materiales de regreso a la Tierra, el asteroide está tan lejos que el costo de hacerlo anularía su valor, dijo Philip Metzger, físico planetario de la Universidad de Florida Central.
Sin embargo, confió en que algunas empresas, como AstroForge, tienen planes de explotar asteroides. «Creo que la minería de asteroides será algo real y rentable», destacó. Asimismo consideró que es posible desarrollar la tecnología necesaria en unas décadas. Los asteroides más pequeños, incluidos los de tipo M, probablemente serían el primer objetivo de los mineros de asteroides.
No sólo vale la pena extraer metales como el hierro de los asteroides, añadió Metzger. Los asteroides compuestos principalmente de arcilla contienen mucha agua, que potencialmente podría usarse para producir combustible para cohetes en asentamientos fuera del mundo. Para volverse rentables, las empresas también podrían intentar directamente extraer metales valiosos como el platino.
Uno de los mayores desafíos de la minería de asteroides será encontrar formas de brindar acceso a los recursos a personas de todo el mundo, argumentó el físico. El acceso desigual a los recursos ya es un problema importante en nuestro planeta y espera que las futuras regulaciones industriales ayuden a permitir un acceso más equitativo.
En un futuro lejano, podríamos explotar Psyche para proporcionar recursos a los astronautas con destino a destinos como Marte, insistió. Sin embargo, a corto plazo, es más probable que visitar Psyche nos enseñe más sobre los asteroides de tipo M. Preparando así a los futuros mineros de asteroides para lo que podría esperarles en objetivos más cercanos, adicionó.