POR ENERGIA16
23/11/2017
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El ministro de Energía, Turismo y Agenda Digital, Álvaro Nadal, recibirá esta tarde al primer ejecutivo de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán y a los presidentes de las comunidades de Castilla y León y Asturias, Juan Vicente Herrera, del PP, y Javier Fernández, del PSOE, para abordar la petición de la compañía de cerrar las centrales térmicas de carbón de Velilla del Río Carrión y Lada.
Hasta los momentos se conoce la intención del gobierno de no cerrar las centrales y la de las empresas como Iberdrola de cerrarlas rotundamente, sin embargo Juan Vicente Herrera reconoció su «disgusto» tras conocer las intenciones de la eléctrica y pidió a Iberdrola que reconsiderase esta decisión, al tiempo que acusó a la compañía que preside el salmantino Sánchez Galán de «falta de respeto institucional».
Según la información de EuropaPress aunque Martínez ha indicado que habrá que esperar a ver lo que ocurre en el encuentro, ha recordado que los criterios de Asturias, el Ministerio y el Gobierno de Castilla y León sobre este asunto coinciden. En este sentido ha manifestado que espera que, o bien Iberdrola reconsidere su decisión o bien el Ministerio ejerza sus competencias administrativas para impedir el cierre.
«Hay suficientes y buenas razones para que Iberdrola rectifique», ha dicho el portavoz del Gobierno asturiano, que ha reiterado que un «cierre precipitado» de las instalaciones que utilizan carbón para producir energía puede propiciar un incremento del precio de la electricidad y la amenaza de nueva reconversión industrial en Asturias.
Nadal quiere negociar
Nadal señaló esta semana que la intención del Gobierno con el decreto de cierre de centrales es que la clausura de estas instalaciones, de llevarse finalmente a cabo, se aborde de forma ordenada y con arreglo a criterios «lógicos».
Explicó que mediante este real decreto se pretende adoptar una serie de medidas que garanticen en todo momento la seguridad del suministro en el territorio nacional. Así, considera que la norma tiene como finalidad establecer las medidas regulatorias que aseguren que las decisiones de cierre de centrales de generación eléctrica son «coherentes» con los instrumentos de planificación energética y «compatibles» con los objetivos en materia de seguridad del suministro, cambio climático y precio de la energía.
Nadal aboga por tratar de mantener en el ‘mix’ energético las tecnologías que son baratas, como la nuclear, que no genera CO2, o el carbón, y ha señalado que el cierre de las centrales nucleares encarecería el precio de la tarifa eléctrica un 25%, mientras que la clausura de las centrales térmicas de carbón supondría un sobreprecio del 15% en las horas punta, es decir, en los días más fríos del invierno o en los más calurosos del verano