POR CAMBIO16
09/09/2017
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Rafa Nadal se clasificó hoy para la final del Abierto de Estados Unidos al derrotar en semifinales al argentino Juan Martín del Potro por 4-6, 6-0, 6-3 y 6-2, en un partido que se extendió por dos horas y 31 minutos.
Nadal se enfrentará el domingo al sudafricano Kevin Anderson, que previamente había ganado en su semifinal a Pablo Carreño por 4-6, 7-5, 6-3 y 6-4.
🇪🇸 🎾El glorioso "match point" con el que Rafa Nadal batió a Del Potro. A la final del #USOpen https://t.co/xHdPHjFhoQ https://t.co/Lxf0yFN6GZ
— Cambio 16 (@Cambio16) September 9, 2017
En breves declaraciones en la cancha al final del partido, Nadal reconoció que en el primer set estaba jugando demasiado contra el revés de Del Potro. «Sabía que algo tenía que cambiar», añadió.
El tenista español destacó la importancia de llegar a la final del Abierto neoyorquino, que consideró como el partido más importante de la temporada.
También reconoció que para llegar a ese encuentro tuvo unos primeros partidos con los que no está totalmente satisfecho, aunque los últimos han sido «muy positivos», especialmente el de hoy.
A Anderson, su próximo rival, lo calificó como un tenista «muy duro» y un «enorme jugador», que tiene una estatura de 2,02 metros.
Nadal, arrollador
El duelo de Nadal con Anderson, de 31 años, número 32 del mundo, será el quinto partido como profesionales con ventaja de 4-0 para el tenistas de Manacor en los cuatro anteriores.
Nadal llegará a la final sin haber hecho un esfuerzo extra porque siempre estuvo en control del partido que disputó ante Del Potro, el decimocuarto entre ambos como profesionales, con marca de 9-5 a su favor, incluidos los 5-5 en pista dura.
El tenista de Manacor, que busca su segundo título de Grand Slam en lo que va de temporada, ganó también el Roland Garros y disputó la final del Abierto de Australia, sólo tuvo problemas en el set inicial cuando Del Potro hizo su mejor saque y resto.
Pero a partir del segundo la historia fue muy diferente con un Nadal dominante en todos sus golpes, restó impecable ante un Del Potro que comenzó a fallar y en apenas 27 minutos lo terminaba sin ceder un solo juego.