En enero la justicia irlandesa condenó a dos padres de origen africano a prisión por practicar la mutilación genital femenina en su pequeña de un año en 2016. A pesar de que esta práctica vulnera los derechos humanos de niñas y mujeres y está prohibida en la mayor parte del mundo, 4.1 millones de niñas están en riesgo. De allí que las Naciones Unidas haya establecido un Día Internacional de Tolerancia Cero con esta agresiva costumbre.
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«La tercera se inclinó y me circuncidó»
La condena de los padres de la pequeña de Dublín se repartió así: cinco años y medio de prisión para el padre, cuatro años y nueve meses para la madre. El padre acudió con la menor al hospital, con la pequeña sangrando sin parar desde la región perineal. Explicó que la niña había caído sobre un juguete y se había lastimado.
Durante el juicio, la doctora Sinead Harty declaró que el sangrado no podía ser la consecuencia de la caída sobre un juguete, pues la cabeza y el glande del clítoris estaban completamente extirpados, reseña The Irish Times.
🔴 Matrimonio infantil
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Hace 21 años la justicia en Francia condenó a una curandera maliense a ocho años de prisión por extirpar el clítoris de 48 niñas y adolescentes del mismo origen. También fueron condenadas 23 madres y tres padres por hasta tres años de prisión. En ese momento, la denuncia de una joven estudiante de leyes y su testimonio llevó a esta curandera a enfrentar nuevamente por la misma causa a la justicia francesa.
En el libro Corte genital femenino en los países industrializados: mutilación o tradición cultural (2014), se cuenta que Mariatou Koita decidió demandar a Hawa Gréou cinco años después de que esta fuera al piso de sus padres a circuncidar a su hermana menor. Ella misma fue víctima de la curandera: “Había varias mujeres. Dos me forzaron a acostarme. Una agarró mis piernas y otras mis brazos. La tercera se inclinó y me circuncidó”.
Mutilación genital femenina contraindicada
La mutilación genital femenina está contraindicada por la OMS (Organización Mundial de la Salud). Esta práctica produce dolor severo; hemorragia; inflamación genital; fiebre; infecciones como el tétano; problemas urinarios, vaginales y menstruales; incrementa las complicaciones en el parto y hasta la muerte. Por lo tanto, la OMS hace un llamado urgente a todos los profesionales de la salud a no seguir con esta práctica.
Existe la creencia de que si la ablación del clítoris se hace bajo supervisión médica es segura, pero no es así. En estos primeros días de febrero, se conoció la noticia de la muerte de una niña de doce años en Egipto como consecuencia de la mutilación genital femenina. Un médico retirado fue arrestado por realizar la operación. Los padres de la niña fueron puestos en custodia durante cuatro días, mientras se desarrollaba la investigación.
Los datos actuales proyectan que para 2030, 68 millones de niñas podrían estar en riesgo de ser víctimas de la mutilación genital femenina. Por esta razón, la ONU no disminuye sus esfuerzos para educar y empoderar a las niñas en aras de que sus derechos humanos se respeten. Esta práctica que se ejerce bajo argumentos tradicionales y ritualistas, viola el derecho de niñas y mujeres a la salud, a la seguridad, a la integridad física, a estar libres de cualquier trato inhumano, cruel o degradante. Viola su derecho a la vida. #C16Denuncia #FinMGF
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