POR CAMBIO16
05/12/2017
Donald Trump reconocerá a Jerusalén como capital de Israel y ordenará trasladar allí la embajada de EEUU.
Su pronunciamiento oficial sobre el tema tendrá lugar este miércoles, adelantaron hoy altos funcionarios de la Casa Blanca.
En un discurso a las 13.00 hora local del miércoles (18.00 GMT), Trump ordenará al Departamento de Estado que «comience un proceso» para trasladar a Jerusalén la embajada estadounidense en Israel.
Así, Estados Unidos se convertirá así en el único país del mundo que reconoce como capital de Israel a Jerusalén.
Actualmente, la embajada del país norteamericano está en Tel Aviv.
Ninguna nación tiene su embajada debido a que, tras la anexión israelí de la parte oriental de la urbe en 1980, la ONU llamó a la comunidad internacional a retirar sus legaciones de la Ciudad Santa.
Los palestinos quieren establecer allí la sede de su futuro estado.
Sin embargo, la Casa Blanca considera su decisión «como un reconocimiento histórico»
La UE: Trump reconocerá a Jerusalén y afectará la paz
La decisión de EEUU de trasladar la sede de su embajada en Israel a Jerusalén ha preocupado a la Unión Europea (UE).
Federica Mogherini advirtió a Washington que esa medida puede poner en peligro el proceso de paz entre Israel y Palestina.
La declaración la emitió durante una conferencia de prensa conjunta con el secretario de Estado de EEUU, Rex Tillerson.
La funcionaria reiteró que apoya «la reanudación de un proceso de paz significativo», que permita una solución del conflicto.
Por consiguiente, rechazó «cualquier acción que socave» esos esfuerzos, en alusión a la reciente decisión anunciada por Washington.
Mogherini adelantó que el lunes de la semana próxima se reunirá en Bruselas con el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu.
Asimismo, dijo que que a principios de 2018 lo hará con el presidente palestino, Mahmoud Abbás.
«No tiene por qué afectar»
Por su parte, la Casa Blanca no cree que el anuncio en el que Trump reconocerá a Jerusalén pueda perjudicar las perspectivas para un proceso de paz en la región.
Ésto, a pesar de que los palestinos han advertido de las «graves repercusiones» que tendría esa medida en el futuro.
«La localización física de la embajada estadounidense no es un impedimento para la paz», aseguraron las fuentes.
«Esto es un cambio a una política de ambigüedad que no ha funcionado durante los últimos 22 años» finalizaron.
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