Trump promulga decreto para poner fin a la separación de familias de migrantes

Por Cambio16
20/06/2018

Donald Trump promulgó este miércoles un decreto para mantener juntas a las familias de migrantes en situación irregular que cruzan la frontera desde México. Principalmente la orden ejecutiva precisa que las agencias estadounidenses involucradas, incluido el Pentágono, deben tomar medidas para encontrar lugares donde albergar unidades familiares. Asimismo, las familias también serán priorizadas en el proceso de adjudicación de residencia. 

No obstante, también precisa que que los inmigrantes que ingresen a EEUU con niños no se mantendrán juntos si existe temor por el bienestar del niño. Trump declaró que es política de su administración «mantener la unidad familiar». Incluso deteniendo a familias enteras juntas «cuando corresponda. Pero siempre de acuerdo con la ley y los recursos disponibles».

«Es una orden ejecutiva muy importante. Su objetivo es mantener juntas a las familias. Ésto, mientras se garantiza una frontera muy poderosa y muy fuerte», dijo Trump sobre el decreto para las familias de migrantes, según ha informado la cadena de televisión CNN.

Trump recalcó que «esto solucionará el problema» de las familias de migrantes. Pero ha prometido que Washington mantendrá su política de ‘tolerancia cero’ en la frontera. «Tenemos tolerancia cero con las personas que entran a nuestro país de manera ilegal».

Familias de migrantes vs «parálisis» legislativa

La decisión del presidente estadounidense ha llegado en medio de las críticas desde todo el espectro político del país y la comunidad internacional a causa de la separación de niños de sus padres en la frontera. Desde España, el ministro de Exteriores, Josep Borrell, pidió a Trump «reconsiderar» la medida.

Unos 2.000 menores de edad han sido separados de sus padres y encerrados en las últimas semanas. Trump había justificado esta drástica medida, reclamando la aprobación en el Congreso de una reforma migratoria.

Incluso responsabilizó a los demócratas de la parálisis en el Congreso. Fundamentalmente argumentando que Estados Unidos tiene «las peores y más débiles leyes del mundo» y «los demócratas no hacen nada por cambiarlas».