Andrés Tovar | Luis Roberto Martínez
21/03/2018
La diáspora venezolana es una tragedia humanitaria, intelectual y económica. Las crisis actual que vive el país caribeño, combinada con la persecución política, han obligado a muchos venezolanos a huir. Alrededor de quinientas mil personas han dejado el país solo en los últimos dos años. Si las condiciones empeoran, muchos más venezolanos seguirán ingresando a los países vecinos. Colombia se vería más agobiado por estas salidas, dada la longitud de la frontera compartida. Asimismo, Brasil, Guyana y las islas caribeñas cercanas también verían un aumento en los refugiados que podría abrumar a las clínicas y escuelas. Y potencialmente desestabilizar las economías locales y las entidades políticas.
Para calificar la diáspora venezolana o el perfil de los migrantes venezolanos se deben tomar en cuenta diversos factores. Primeramente, se habla de diáspora venezolana porque se trata de una burbuja que ha ido explotando y dirigiéndose a distintos lugares en el mundo. En los diversos informes emitidos sobre migrantes venezolanos, tanto de medios de comunicación como de organizaciones humanitarias, se les califica dentro de tres categorías. Refugiados, asilados o expatriados. En el caso de la diáspora venezolana, caben las tres calificaciones, pues son diversos los motivos que los han obligado a salir de sus fronteras. La Organización Internacional de Migraciones ofrece un glosario de términos que permiten clarificar estos estatus.
Así es la diáspora venezolana
Pero especialmente relevante es la fuga intelectual que se produce en esa migración. Según los diversos estudios, la diáspora venezolana se lleva consigo una pérdida de capital intelectual. Gente preparada con tercer y hasta cuarto nivel de estudios componen un grueso de la diáspora venezolana. Todo un conocimiento necesario para una futura reconstrucción del país. Asimismo, especialmente relevante -y doloroso-, es que la emigración crece como plan de vida de los venezolanos. El deseo de migrar se incorpora con bases más sólidas a la cultura de un país que había sido un país receptor de emigrantes, fundamentalmente europeos y suramericanos.
En esta infografía, graficamos los componentes de la diáspora venezolana, como un aporte al debate de lo que la nación suramericana está perdiendo en cada maleta.