Por Cambio16
13/07/2018
El Gobierno de Theresa May desveló el contenido del esperado Libro Blanco del Brexit. El documento que plantea la relación que Reino Unido desea mantener con la Unión Europea tras el Brexit. Principalmente sustentado en lo que han calificado como «un intercambio recíproco». Una cierta movilidad de personas a cambio de facilitar el trámite aduanero para algunos productos.
El Ejecutivo ha resaltado en el documento que su postura en la negociación ha «evolucionado». Pero que mantiene sus principios para el Brexit, el mayor cambio en la política exterior y comercial de Reino Unido en décadas.
El libro blanco del Brexit, de 98 páginas, sugiere que el Gobierno «espera mantener estrechos vínculos» con el bloque y participar en sus instituciones de productos químicos, médicos y de aviación, tal y como ha recogido Reuters.
Downing Street propone que los ciudadanos comunitarios puedan viajar sin visado a Reino Unido, siempre que sea por turismo o para trabajos temporales. Asimismo, que los jóvenes europeos puedan estudiar en las aulas británicas. Y que (sic) «la gente con talento» de las empresas pueda moverse libremente del país a la UE y viceversa.
Las «reglas» del Libro Blanco del Brexit
«La futura alianza económica debe, por tanto, proporcionar acuerdos recíprocos. Consistentes con el final de la libertad de movimiento», incluyendo medidas para «apoyar a los negocios que proporcionen servicios para que puedan mover a la gente con talento», reza el Libro Blanco del Brexit.
En este sentido, propone redactar «un libro común de reglas» para fijar los estándares para alimentos y bienes tras el Brexit. Principalmente que garanticen los trámites aduaneros. Pero que también aseguren que Reino Unido recaude tanto las tarifas británicas y comunitarias para todos los bienes que entraran en el país.
La figura propuesta es denominada «territorio aduanero combinado». Fundamentalmente insiste en el control de sus propias tarifas respecto a los productos procedentes de otras partes del mundo, esgrime.
El documento incluye además un importante cambio para el enorme sector de servicios financieros de Reino Unido. En líneas generales, el Gobierno abandona los planes de mantener los vínculos comerciales que quería la City. En defensa, el Gobierno asegura que los postulados del libro blanco del Brexit ofrecen «flexibilidad». Pero un acceso al mercado más limitado.
El libro de la (des) unidad
May ha defendido en la introducción del texto la necesidad de enfocar las negociaciones con la UE «con pragmatismo y compromiso por ambas partes. Este es el espíritu con el que el gabinete ha acordado un camino a seguir en Chequers», ha añadido. Sin dejar de insistir en «la unidad del Gobierno» tras las dimisiones de los ministros para el Brexit y Exteriores.
La posición de May ha generado malestar entre las filas del Partido Conservador, provocando la dimisión de Davis y de Boris Johnson. El ex ministro de Exteriores ha alertado de que esta propuesta convertiría a Reino Unido en una «colonia» de la UE.
Menos de nueve meses antes de que Reino Unido abandone el bloque, May ha estado bajo presión de las empresas, las autoridades de la UE y sus propios políticos. Todos exigen que May explique a fondo su posición negociadora para desbloquear las conversaciones del Brexit. Todas actualmente estancadas.
Éste es el libro blanco del Brexit
El libro blanco de Brexit está disponible para descargar en el sitio web del Gobierno británico. Para descargar el documento en formato PDF, visite https://www.gov.uk/government/brexit o haz click en la imagen para acceder a la versión directa (en inglés).
El documento consta de 98 páginas, con los fundamentos técnicos de la relación que Reino Unido plantea con la UE. Todo bajo el paraguas de unos principios expresados en el prólogo bricado por Theresa May, el cual reproducimos a continuación.
En el referéndum del 23 de junio de 2016, el mayor ejercicio democrático jamás realizado en el Reino Unido, los británicos votaron a favor de abandonar la Unión Europea.
Y eso es lo que haremos. Dejar el Mercado Único y la Unión Aduanera, poniendo fin a la libre circulación y la jurisdicción del Tribunal de Justicia de las Comunidades Europeas en este país, abandonando la Política Agrícola Común y la Política Pesquera Común y terminando los días de envío grandes sumas de dinero a la UE cada año.
Tomaremos el control de nuestro dinero, nuestras leyes y nuestras fronteras. Y comenzaremos un nuevo y emocionante capítulo en la historia de nuestra nación. Ahora nos corresponde a todos escribir ese capítulo.
Es por eso que en los últimos dos años he viajado por todo el país. Escuchando las opiniones de las cuatro naciones de nuestro Reino Unido y de todas las partes del debate.
Una cosa siempre ha sido clara: hay más de los que unen a este gran país que de los que lo dividen.
Compartimos la ambición de que nuestro país sea más justo y más próspero que nunca.
Somos una nación comercial externa. Tenemos una economía dinámica e innovadora. Y vivimos por valores comunes de apertura, el estado de derecho y la tolerancia de los demás.
Salir de la UE nos brinda la oportunidad de cumplir con esa ambición de una vez por todas: fortalecer nuestra economía, nuestras comunidades, nuestra unión, nuestra democracia y nuestro lugar en el mundo, manteniendo una estrecha amistad y una sólida asociación con nuestros vecinos europeos.
Pero hacerlo requiere pragmatismo y compromiso de ambas partes.