Alrededor de 6,3 millones de niños murieron antes de cumplir 15 años en 2017, lo que significa que muere un niño cada cinco segundos, sobre todo debido a la falta de agua, higiene, nutrición y atención médica básica, según un informe de agencias de las Naciones Unidas hecho público el martes.
La gran mayoría de estas muertes – 5,4 millones -, se producen en los primeros cinco años de vida, y los recién nacidos representan alrededor de la mitad de los fallecidos, según el informe.
5 segundos. Es lo que necesitamos para salvar a un niño
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«Con soluciones simples como medicamentos, agua potable, electricidad y vacunas» esta cifra podría reducirse drásticamente, dijo Laurence Chandy, experto del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF). Pero sin medidas urgentes, 56 millones de niños menores de cinco años, la mitad de ellos recién nacidos, morirán de aquí a 2030.
En total, en 2017, la mitad de todas las muertes en niños menores de cinco años se produjeron en el África subsahariana, donde uno de cada 13 niños murió antes de cumplir cinco años. En los países de altos ingresos, esa cifra fue de uno de cada 185, según el informe codirigido por UNICEF, la Organización Mundial de la Salud y el Banco Mundial.
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Menos muertes
La investigación descubrió que la mayoría de los niños menores de cinco años mueren debido a causas prevenibles o tratables, como complicaciones durante el parto, neumonía, diarrea, sepsis neonatal y malaria. Entre los niños mayores, de entre cinco y 14 años, las lesiones se vuelven una causa de muerte más destacada, especialmente por ahogamiento y tráfico.
Para niños de cualquier parte, el momento más vulnerable es el primer mes de vida. En 2017, 2,5 millones de recién nacidos fallecieron en el primer mes. Asimismo, un bebé nacido en el África subsahariana o en el sur de Asia tenía nueve veces más probabilidades de morir en el primer mes que uno nacido en un país de altos ingresos.
A pesar de estos problemas, el informe de la ONU concluyó que cada año mueren menos niños en todo el mundo. El número de muertes de menores de cinco años cayó a 5,4 millones en 2017 desde los 12,6 millones en 1990, mientras que el número de muertes en niños de cinco a 14 años se redujo a menos de un millón desde los 1,7 millones en el mismo período.
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