Cada 22 de marzo se celebra el Día Mundial del Agua, una iniciativa de Naciones Unidas que tiene como objetivo concienciar a la población e impulsar medidas que permitan afrontar la crisis del agua y el saneamiento. El Objetivo de Desarrollo Sostenible número 6 de la ONU: garantizar la disponibilidad de agua y su gestión sostenible y el saneamiento.
Los datos publicados por la ONU indican que “una de cada tres personas no tiene acceso a agua potable salubre, dos de cada cinco personas no disponen de una instalación básica destinada a lavarse las manos con agua y jabón y más de 673 millones de personas se ven obligadas a realizar sus necesidades fisiológicas al aire libre”. Con estas cifras, los países miembros se comprometieron en 2015 con el ODS 6 como parte de la Agenda 2030 para el desarrollo sostenible.
En este contexto, la compañía biomédica MSD reitera su compromiso con la gestión ESG, como manifiesta en su informe 2021/2022 basado en cuatro pilares: acceso a la salud, empleados, sostenibilidad medioambiental y ética y valores.
Históricamente MSD ha expresado una especial sensibilidad y compromiso con el cuidado y la protección del agua, dado que su visión global contempla alcanzar una gestión sostenible del agua en todas sus operaciones y cadena de suministro.
El propósito es emplear el potencial de la ciencia de vanguardia para salvar y mejorar vidas, por lo que a medida que trabaja para inventar soluciones de salud que promuevan la prevención y el tratamiento de enfermedades en el mundo, reconoce la necesidad de hacerlo mediante un uso más eficiente del agua.
En este sentido, MSD refuerza su compromiso con el objetivo de reducir el uso del agua en un 25% para 2025. Estima que la mayor parte del uso que hace del agua reside en su cadena de suministro, por lo que ha aumentado su compromiso. Así, el código de conducta para colaboradores requiere que todos los proveedores conserven los recursos naturales y cuenten con sistemas para cuantificar la cantidad de agua que utilizan para alcanzar una gestión sostenible del agua en sus operaciones y su cadena de suministro.
Una de las prácticas implementadas es el análisis de los que operan en áreas de bajo estrés hídrico y desarrollar planes de gestión.
El enfoque One Health, clave en la estrategia de MSD
Consciente de la relación entre la salud del planeta, personas y animales, MSD ha sido un impulsor activo del enfoque One Health (una única salud), que implica un trabajo colaborativo entre los tres aspectos. Actualmente, es de las pocas biomédicas que integra la salud humana, animal y la protección medioambiental para afrontar los futuros retos de salud.
Partiendo del impacto que el cambio climático puede tener en el agua, MSD ha colaborado en la iniciativa Sanidad por el Clima una plataforma online para acelerar la acción frente al cambio climático del sector. De este modo, no solo se visibiliza la relación entre la salud de las personas y el cambio climático, sino que genera una ruta de acción que ayude a disminuir la huella de carbono de los entornos sanitarios. Asimismo, colabora en la consecución del objetivo de neutralidad de emisiones en España en 2050.
No es la única iniciativa de MSD. También está involucrada en acciones enfocadas en la mejora de la salud y la calidad de vida de las personas, en las que destacan los determinantes sociales en salud, los aspectos relacionados con la existencia de desigualdades con impacto en la salud y en la esperanza de vida. MSD trabaja diariamente para intentar que un día no muy lejano sea posible evitar las actuales desigualdades en la salud. Un objetivo plausible si se aúnan esfuerzos.
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