El secretario de Estado de los Estados Unidos, Mike Pompeo, instó a Kazajistán a unirse a Washington para presionar a China por su trato a las minorías musulmanas en la región de Xinjiang.
Grupos de defensa de los derechos humanos dicen que las autoridades chinas han sometido a intensa vigilancia, detenciones arbitrarias y adoctrinamiento forzado a uigures, kazajos y otros grupos étnicos mayoritariamente musulmanes.
China es un importante socio comercial para el país de Asia Central. Los medios de comunicación controlados por el Estado de Kazajistán han evitado informar sobre los centros de internamiento en Xinjiang.
Great opportunity to reconnect with @MFA_KZ Foreign Minister Tileuberdi in Nur-Sultan today. We look forward to expanding our cooperation and strengthening our partnership in 2020. pic.twitter.com/sMEF4wXUu9
— Secretary Pompeo (@SecPompeo) February 2, 2020
Difícil situación de los musulmanes
Este domingo, durante una visita a Nur-Sultan, la capital de Kazajistán, Mike Pompeo dijo que había planteado el tema en conversaciones con el canciller kazajo Mukhtar Tileuberdi.
El jefe de la diplomacia estadounidense discutió con su homólogo «la difícil situación de más de un millón de musulmanes uigures y kazajos étnicos que el Partido Comunista de China ha detenido en Xinjiang, al otro lado de la frontera con Kazajistán». «Estados Unidos insta a todos los países a unirse a nosotros para presionar por el fin inmediato de esta represión. «Les pedimos simplemente que brinden refugio y asilo seguros a quienes buscan huir de China. Protejan la dignidad humana, simplemente hagan lo correcto», agregó.
Tileuberdi no hizo ningún comentario sobre el tema, se centró en cambio en la cooperación económica y de seguridad.
https://twitter.com/Cambio16/status/1223968059263598592
Violación de derechos humanos
En agosto de 2018, las Naciones Unidas informaron que aproximadamente un millón de uigures y miembros de otros grupos étnicos indígenas en la región se encontraban recluidos en «centros de contraextremismo».
La ONU dijo que millones más habían sido internado en «campos de reeducación». China niega que las instalaciones sean campos de internamiento o de trabajos forzados.
Pompeo se reunió con altos funcionarios de la ex república soviética para expresar el apoyo de los Estados Unidos. Washington compite con Moscú por la influencia en la región.
La visita del secretario de Estado incluye reuniones con el presidente Qasym-Zhomart Toqaev y su predecesor Nursultan Nazarbaev.
Pompeo, que visitó Londres antes de dirigirse a Ucrania y Bielorrusia, tiene previsto seguir a Uzbekistán.
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