El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, afirmó en una rueda de prensa que estaba tomando hidroxicloroquina más un suplemento de zinc. Lo hacía a pesar de que no hay evidencia científica sólida que confirme que el medicamento antimalárico sea eficiente para controlar la infección por COVID-19.
Las afirmaciones del mandatario desataron una ola de advertencias por parte de los expertos. Dicen que la hidroxicloroquina no ha mostrado eficiencia a la hora de tratar la COVID-19, además de que puede aumentar el riesgo de mortalidad.
Un estudio, que se publicó en la prestigiosa revista médica británica The Lancet, concluye que los pacientes gravemente enfermos con la COVID-19 que fueron tratados con hidroxicloroquina y cloroquina presentaron mayores probabilidades de morir y padecer arritmias cardíacas peligrosas.
Medicamentos antimaláricos y la COVID-19
La investigación se trata del estudio observacional más grande publicado hasta los momentos sobre el tratamiento que utiliza los medicamentos antimaláricos con o sin antibióticos. La investigación analizó la data de 93.032 pacientes internados con la COVID-19 en 671 hospitales de seis continentes.
Se estableció una comparación de pacientes que recibieron cuatro tratamientos con los fármacos antimaláricos (solo cloroquina, solo hidroxicloroquina, cloroquina más un antibiótico o hidroxicloroquina más un antibiótico) con 81.144 pacientes (grupo de control) también con la COVID-19 que no recibieron el tratamiento con estos fármacos.
Los cuatro tratamientos relacionados con los medicamentos antimaláricos mostraron un mayor riesgo para los pacientes de morir en el hospital. Las proporciones pueden ilustrar esta conclusión.
En el grupo de control murió un paciente por cada 11. Entre el grupo de pacientes a quienes se les administró solo cloroquina o hidroxicloroquina, murió uno de cada seis.
Por último, entre los que recibieron cloroquina más el antibiótico murieron uno de cada cinco. Mientras que quienes fueron tratados con la combinación de hidroxicloroquina más un antibiótico murió uno de cada cuatro.
Entre los resultados del análisis, también se encontró que las arritmias graves cardíacas fueron más frecuentes entre los pacientes que recibieron cualquiera de los cuatro tratamientos con los fármacos antimaláricos.
Sin beneficios
«Nos pudimos confirmar un beneficio de hidroxicloroquina o cloroquina, cuando se usa solo o con un macrólido (antibiótico), sobre resultados hospitalarios para COVID-19. Cada uno de estos regímenes faramcológicos se asocio con una disminución de la supervivencia en el hospital y una mayor frecuencia de arritmias ventriculares cuando se usa para el tratamiento de la COVID-19″, señala el estudio.
El análisis parte del hecho de que la hidroxicloroquina y la cloroquina se están utilizando ampliamente en el tratamiento de la COVID-19, a pesar de que no hay evidencia concluyente sobre su uso. Además, de que la seguridad y los beneficios de los medicamentos antimaláricos están mal evaluados.
A la espera de ensayos bien realizados
La hidroxicloroquina o la cloroquina se han utilizado para disminuir la infección por COVID-19 en función de sus propiedades inmunomoduludaoras y antivirales. Sin embargo, la comunidad científica mundial aún espera por la realización de ensayos clínicos aleatorios que evalúen su seguridad y eficacia. Los fármacos están asociados con toxicidad cardíaca.
«Hidroxicloroquina o cloroquina con o sin macrólido para el tratamiento de COVID-19: un multinacional análisis de registro» es un estudio que realizaron especialistas de varios centros hospitalarios de los Estados Unidos y Suiza.
Señala el Dr. Frank Ruschitzka, director del Centro del Corazón del Hospital Universitario de Zurich y participante de la investigación, que el análisis confirma que la posibilidad de mejoría de la COVID-19 por medio del tratamiento con medicamentos antimaláricos es «bastante baja».
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