Por Andrés Tovar
24/08/2017
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Las Vegas albergará este domingo uno de los más lucrativos eventos deportivos de todos los tiempos. La bautizada como «The Money Fight«, entre el luchador de la UFC (Ultimate Fighting Championship), el irlandés Connor Mcgregor y el invicto Floyd Mayweather tendrá lugar en el T-Mobile Arena de Las Vegas y se desarrollará bajo las reglas del boxeo profesional, el primer encuentro de ese tipo para el irlandés.
El combate ha generado mucha polémica debido a espectáculo de provocaciones y acusaciones mutuas que los protagonistas se han venido lanzando en cada espectáculo de promoción del choque, y que han ocupado a la prensa deportiva.
Lo que no está en duda es que ambos hombres saldrán del ring mucho más ricos que cuando entren a él. Ambos ya tienen asegurado en la bolsa más de $ 100 millones por su participación. Con un valor de 90 millones de dólares en entradas para la venta y $ 500 millones de ingresos que estima se hagan por la vía del pay per view televisivo, es por mucho el combate más lucrativo en años.
Pero, a pesar de estas cifras, vale la pena preguntarse cuál de los dos deportes de combate representados en este evento saldrá en mejor forma. O si el encuentro tan promocionado representa un juego de suma cero para los dos deportes, en el que la ganancia de uno será a costa del otro. Veamos…
¿Qué pone en la mesa la UFC?
La UFC ha presentado la disciplina de las artes marciales mixtas (MMA) al mundo por alrededor de tres décadas. En ese tiempo ha pasado de ser acusado de ser «un mero combate de gallos humanos» a convertirse en un deporte popular, aunque manteniéndose controversial. Lo cierto es que llena arenas -y se llena de ellas- en todo el mundo y fue valorado en cerca de $ 4 mil millones en 2016.
La popularidad del deporte se basa en gran parte en el atractivo de estrellas entre un pequeño número de competidores carismáticos, incluyendo a uno de nuestros protagonistas, Connor «The Notorius» Mcgregor.
Las afirmaciones de que sus luchadores «son más duros» que otros atletas también es una gran parte de la marca de UFC. Una fuerte derrota para McGregor en Las Vegas podría por lo tanto causar un daño significativo a la marca UFC, especialmente si un humillado McGregor es capaz de hacer un exitoso regreso a su antiguo campo de batalla.
La decisión de permitir que la estrella de la UFC compita en una pelea de alto perfil con uno de los más cotizados boxeadores del mundo es potencialmente perjudicial tanto para la reputación de Mcgregor como para la marca del deporte en general al que está asociado. Pero al menos McGregor será recompensado genialmente si gana o pierde la pelea.
¿Y que se juega el boxeo?
Pero, mientras que la MMA ha estado en una trayectoria ascendente, el futuro financiero del boxeo ha llegado a ser menos claro. Algunos combates recientes, como la victoria de Anthony Joshua sobre Wladimir Klitschko en abril de 2017 y la victoria de Mayweather sobre Manny Pacquiao en mayo de 2015, han recaudado dinero y atraído a grandes multitudes. Pero hay un sentimiento más profundamente arraigado en los últimos años. Ese que muchos fanáticos albergan y que acusa en declive al futuro del negocio del boxeo.
Hay algunas iniciativas que buscan nuevas alternativas en este sentido, como por ejemplo la recién anunciada «Serie Mundial de Boxeo Super«, creado por uno de los promotores más poderosos de los deportes de combate que ofrecerá a los combatientes una parte de 50 millones de dólares. Es claramente la esperanza de que traerá algunos grandes nombres, así como gran dinero a través de la venta de entradas y el patrocinio.
Para algunos, la disminución en la popularidad del boxeo puede deberse a la creciente popularidad de UFC, y los eventos asociados de MMA, lo que nos diría que están luchando por la misma cuota de mercado. Así, la McGregor-Mayweather por lo tanto tiene el potencial de revigorizar el boxeo, especialmente si un boxeador como Mayweather, que está al final de su carrera, es capaz de humillar públicamente a una estrella actual de UFC frente a una audiencia tan grande.
En última instancia, sin embargo, las probabilidades están en contra el boxeo. Basta con ver el aluvión de críticas generadas este jueves luego que en la última conferencia de prensa del evento este jueves, el Consejo Mundial de Boxeo (WBC, por sus siglas en inglés) haya anunciado la creado un «cinturón especial» para el ganador del combate. El propio Mauricio Sulaimán lo detalló: piel de aligátor, así como 3.360 diamantes, 600 zafiros, 300 esmeraldas y 1,5 kilos de oro de 24 quilates.
Here's the special 300-plus-jewel belt that @wbcmoro is offering to the @FloydMayweather @TheNotoriousMMA winner. pic.twitter.com/kDDDqkJfWr
— Lance Pugmire (@pugboxing) August 23, 2017
El público reaccionó al anuncio de forma negativa, dado que muchos han pensado que este galardón «resume el circo que es el combate Mayweather-McGregor», según el diario ‘Metro’. Antes de la presentación nunca se había hecho mención a trofeo alguno, al que los protagonistas del combate nunca se han referido en sus ruedas de prensa y tampoco lo hicieron en la de este jueves.
Y, como cosa paradójica, Sulaimán vivió un momento incómodo, cuando su discurso quedó interrumpido unos segundos por un fallo del micrófono mientras anunciaba la creación del cinturón.
His mic got off just as the WBC were announcing their 'Money' belt for Mayweather vs McGregor …. seems about right #MayweatherMcGregor pic.twitter.com/LbwZKzDqxh
— Coral Barry (@Coral__Barry) August 23, 2017
McGregor no necesitaría ni siquiera ganar la pelea para hacer más daño al espíritu del boxeo. McGregor está luchando en el césped de Mayweather y si logra hacer una actuación decente y creíble, ya eso es una pequeña victoria para McGregor y UFC. Y Mayweather ha sido retratado a menudo como el mejor boxeador libra por libra de todos los tiempos, por lo que -para sí como marca- no debe perder con McGregor.
Pero, pase lo que pase, es probable que los representantes de ambas esquinas, tanto en lo emocional como en lo financiero, intente reclamar una victoria moral después del hecho. Lo que no sabemos es si es boxeo, como deporte, pueda hacer luego lo mismo.