Por Jaume Esteve
09/10/2016
Ha sido la serie del verano y amenaza con convertirse en una de las sensaciones del año. Stranger Things se ha ganado a pulso esa denominación gracias a su homenaje al imaginario ochentero. Ha sabido ir más allá del topicazo del pastiche de referencias para jugar en otra liga: la de los productos que trascienden el homenaje y podrían encasillarse en la época que referencian.
Pongámonos en situación: típico pueblo pequeño de Estados Unidos sacado de novela de Stephen King se encuentra al lado de un laboratorio secreto del gobierno en el que algo extraño sucede. Una criatura sobrenatural queda suelta y su liberación acaba con un desaparecido, un niño que se desvanece sin dejar ni rastro.
Niños, bicicletas, adolescentes que prueban las mieles del sexo, personajes pintorescos (con una Winona Ryder excesiva y algo pasada de vueltas) y un batiburrillo de géneros que van del terror a la ciencia ficción pasando por la pura historia de aventuras con tintes sobrenaturales. Sí, Stranger Things es pura ficción ochentera que ha llamado la atención del propio Stephen King.
“Es pura diversión. No te la pierdas. Winona Ryder brilla”, escribió en Twitter. La recomendación pilló en fuera de juego a los creadores de la serie, los hermanos Duffer, a los que quizá conozca por Hidden, una cinta de terror estrenada en 2015.
“Devorábamos sus libros cuando teníamos la edad de los protagonistas. Recuerdo leer El Fugitivo en una noche. It fue muy importante para mi hermano y para mí. Es obvio que ha sido una de las grandes inspiraciones. Cuando leí su tuit sobre la serie traté de no echarme a llorar, fue justo antes de la premiere y me rompió por dentro”, explicaban los hermanos al Hollywood Reporter pocos días después de que se estrenara la serie.
La ficción, exclusiva de Netflix, parece querer abarcar demasiado en unos primeros compases pero no sólo logra mantener el tono, sino que hace de sus escasos ocho capítulos uno de sus fuertes. En algo más de seis horas, la historia tiene tiempo para tocar todos los palos, resolver la trama principal y hasta de dejar un final ligeramente abierto.
En el momento de escribir este texto se desconocía si Netflix iba a renovar la serie aunque todas las señales apuntaban a ello. Los hermanos Duffer ya han adelantado algunos de los elementos de la trama que esperan introducir de cara a la segunda temporada.
Stranger Things triunfa allá donde Super 8 intentó salir airosa. Y los hermanos Duffer son conscientes de que no basta con lanzar referencias para hacer un homenaje (la misma premisa se puede aplicar a Big Bang Theory). El cuidado del guion, de los personajes, de la puesta en escena y hasta de la deliciosa banda sonora (a cargo de Survive, un dúo electrónico afincado en Austin) es igual de importante que colocar un póster de Posesión Infernal o de hacer la referencia de turno a Poltergeist en una trama que, en ocasiones, bebe de la cinta de terror.
Pero si algo ha certificado el éxito de Stranger Things es que la amalgama de producciones propias de Netflix se abre camino, poco a poco, en el imaginario popular. House of Cards, Orange is the New Black, Bloodline, Narcos, Daredevil o Marsella son propuestas muy diferentes entre sí pero que muestra la fortaleza de un modelo que puede permitirse el lujo de apostar por un producto supuestamente de nicho y que se ha convertido en la comidilla de las redes sociales.
Stranger things
Netflix
Le gustará si le gusta:
El revival ochentero, las películas protagonizadas por niños con ganas de aventura, los pueblos de Stephen King, las tramas con unas gotitas de terror.
Creada por:
Los hermanos Duffer.
Actúan:
Winona Ryder, David Harbour y Matthew Modine.
Capítulos:
Una temporada de ocho episodios.
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