El Gobierno estadounidense desistió de proteger a las mariposas monarcas. Aunque son candidatas a ser declaradas especie en peligro de extinción, pasarán varios años antes de que se dé ese paso. Hay otras especies que también están a la espera de esa designación y faltan recursos.
Ambientalistas consideran que la demora podría ser desastrosa para las vistosas mariposas anaranjadas y negras: Ahora corren el peligro de desaparecer por quedar desprotegidas.
Charlie Wooley, jefe de la oficina regional de los Grandes Lagos del Servicio de Pesca y Vida Silvestre, el estatus de las monarcas se reconsiderará anualmente. Es probable que haya novedades antes, pero por ahora se contempla incluirlas en 2024 al amparo de la Ley de Especies en Peligro. «Salvo si la situación no mejora lo suficiente como para que la medida sea necesaria», agregó.
Mariposas en peligro
El creciente uso de pesticidas en el campo, el cambio climático y y la destrucción de algodoncillos de los que dependen han causado una gran merma de estas mariposas, cuyas migraciones producen espectáculos naturales únicos.
Los científicos calculan que la población de las monarcas en el este de Estados Unidos ha disminuido un 80% desde mediados de la década de los años noventa. En el oeste, la diminución ha sido aún más pronunciada.
La directora del Servicio de Pesca y Vida Silvestre, Aurelia Skipwith, explicó lo que hizo para entender la situación de las monarcas. Mediante amplios estudios y procesos rigurosos y transparentes, basados en la ciencia, comprobó con su equipo que estas mariposa cumplen los requisitos fijados por la Ley de Especies en Peligro. No obstante, primero debe enfocar sus limitados recursos en medidas «más prioritarias».
En la lucha por su conservación
Entretanto, los científicos seguirán monitoreando las cantidades de mariposas y la efectividad de lo que Wooley describió como la campaña más grande jamás librada para salvar una especie animal en peligro.
Con la declinación de su población en los años noventa, comenzó una campaña de preservación en la que participan escolares, propietarios de viviendas y tierras, además de las organizaciones empeñadas en la conservación del medioambiente, gobiernos y empresas. Algunos creen que estos esfuerzos son suficientes y no se requieren regulaciones del gobierno.
Sin embargo, las organizaciones ambientalistas dicen que es vital protección de la Ley de Especies en Peligro. Sobre todo en el oeste del país, donde en 2019 apenas se contaron 30.000 mariposas. En los años ochenta, millones de ejemplares pasaban el invierno en las costas de California. Este año esperan contabilizar unas 2.000 nada más, de acuerdo con Sarina Jepsen, directora del programa de especies en peligro de la organización conservadora Xerces Society.
Jepsen creen que puede estar ocurriendo el colapso de la población de las monarcas en el oeste del país. Por su parte, las autoridades responden que, por más que una especie merezca protección, su incorporación en la lista puede demorar unos años si los recursos son limitados y hay otras especies más prioritarias en la misma situación
La oficina de los Grandes Lagos indica que hay nueve especies más prioritarias. Sin embargo, grupos defensores de especies dijeron que 47 es extinguieron mientras esperaban por ser incorporadas a la lista, un destino fatal.
Incluir a las mariposas en la lista de especies en peligro
Tierra Curry, científico del Centro para la Diversidad Biológica, cree que designarlas especie en peligro de extinción garantizaría que las monarcas cuenten con un plan integral de recuperación. «Es la única decisión prudente que se puede tomar», dijo.
Si se les declara especie en peligro, los organismos federales tendrían que consultar con el Servicio de Pesca y Vida Silvestre acerca de los daños que podrían representar para las monarcas medidas como la ampliación de las carreteras. Asimismo, el Servicio podría recomendar otras medidas y regulaciones pensadas especialmente para las mariposas. Algunos especialistas insisten en que no son alentadoras las perspectivas de las monarcas a largo plazo.
El medioambiente y las mariposas monarcas
Las monarcas del sur de Canadá y el este de Estados Unidos migran de a millones a las regiones montañosas de México en invierno. En tanto que las del oeste se dirigen a la costa californiana; sin embargo, sequías cada vez más fuertes han causado que menos mariposas sobrevivan a las migraciones al sur durante el invierno, de acuerdo con Orley «Chip» Taylor, ecologista de la Universidad de Kansas.
La temperatura cada vez más alta también hace que las mariposas abandonen prematuramente sus invernaderos, lo que afecta su reproducción.
Si no se frena la pérdida de su hábitat ni se reduce el calentamiento global, en treinta años no habrá migraciones de monarcas. Advirtió también Taylor que la pérdida del hábitat se suma la desaparición de los algodoncillos en los que plantan sus huevos,
Mariposas grandes viajeras
Las monarcas son conocidas por su increíble migración. Es la única mariposa que realiza una travesía de este tipo, cerca de 5.000 kilómetros.
Nacen de huevos, de los que eclosionan en forma de larva. Luego de se comen la cáscara del huevo y después se alimentan de las plantas del algodoncillo sobre las que nacieron y constituye el único alimento de las larvas.
Mientras engordan, las larvas se convierten en orugas. Después crean una dura bolsa protectora que las rodea conforme entran en la fase de crisálida. De ahí emergen en forma de adultos bellamente coloreadas de negro, anaranjado y blanco. Su patrón colorido las hace fáciles de identificar. Tiene un fin. Avisa a los depredadores que son venenosas y saben muy mal.
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