Para repatriar a los migrantes venezolanos que han salido del país, el presidente de la República, Nicolás Maduro solicitará apoyo a la ONU. Dijo que pedirá 500 millones de dólares a la Organización de Naciones Unidas.
Dada la crisis social y económica que atraviesa Venezuela, unos 2,3 millones de venezolanos han salido al exterior, de los cuales 1,6 millones desde el año 2015, según la ONU.
«Le voy a solicitar que me consiga 500 millones de dólares, para traerme (…) a todos los migrantes que se fueron de Venezuela que quieran regresar, todo quieren regresar«, dijo Maduro.
Sostuvo que con esos recursos pagará los aviones. “No me los voy a traer a pie», acotó.
El Gobierno nacional activó el plan «Vuelta a la patria» para facilitar el regreso de los venezolanos que migraron a otros países de la región. Según el oficialismo, unas 3.000 personas lo han hecho.
Arrestados 34 gerentes de supermercados
En cadena de radio y televisión, Maduro dijo el jueves que 34 gerentes de supermercados fueron arrestados por supuestamente ocultar productos e incrementar los precios.
Esta práctica no es extraña que ocurra en el país. Ya en otras ocasiones, el Gobierno ha arremetido contra los gerentes y empleados de las cadenas de supermercados acusándolos de esconder productos básicos como arroz, pasta, café o harina de maíz. Ante esto organismos empresariales como Consecomercio y Fedecámaras han señalado que se trata de una medida coercitiva que en nada solventa los problemas esenciales de falta de producción y por lo tanto de oferta.
«Tuvimos un grupo de supermercados que les escondió los productos a la gente y que les empezó a cobrar el precio que les dio la gana. 34 gerentes de grandes supermercados están tras las rejas procesados por violar la ley», dijo Maduro, reseñó Reuters.
En los meses de agosto y septiembre, representantes del Ejecutivo nacional y de empresas productoras de alimentos se han venido reuniendo para establecer lo que el Gobierno llamó una política de precios justos. No obstante, Maduro señaló que «unos dicen una cosa y vienen los supermercados y dicen otra”.
El presidente venezolano culpa a los dueños de los supermercados de no cumplir con el abastecimiento y los precios acordados. Llamó a los venezolanos a denunciar precios «injustos» para evitar «ser robados».
Economistas dicen que las reformas de Maduro no abordan los problemas de raíz de Venezuela, como el control del tipo de cambio y la creación excesiva de dinero, lo que afirman podría desestabilizar aún más la economía venezolana.
Pago de gasolina con el carnet de la patria
A partir de la semana próxima, específicamente desde el lunes 24, está previsto se extienda en el país el nuevo sistema de pagos de la gasolina, para lo cual será necesario usar el “carnet de la patria”, una tarjeta emitida por el Gobierno para afianzar su control social.
Aunque todavía no se ha anunciado el nuevo precio del combustible, Maduro ha dicho que será a precios internacionales. Según él será la manera de evitar el contrabando hacia los países fronterizos, principalmente Colombia.
#EsNoticia 📰 | @NicolasMaduro: Instalarán sistema biopago en gasolineras del país desde el próximo lunes 24 de septiembre https://t.co/GfDjpQpbvq pic.twitter.com/9iIPDEx74O
— Prensa Presidencial (@PresidencialVen) September 21, 2018
Desde el 4 de septiembre, con la utilización de mecanismo biométricos (uso de las huellas dactilares) y el mismo carnet de la patria, se viene implementando un nuevo esquema de cobro en los estados fronterizos de Amazonas, Apure, Delta Amacuro, Bolívar, Falcón, Sucre, Táchira y Zulia. La idea es que ahora llegue a más regiones.
La gobernadora opositora del estado Táchira, Laidy Gómez, aseguró que esta modalidad de cobro “fracasó” porque no hay buen internet en esas localidades.
“Señores de Pdvsa y del Gobierno nacional, ni el chip, ni el carnet de la patria, ni los bolívares soberanos han servido para acabar con la desgracia de la gasolina en el Táchira. Si antes se hacían 12 horas de colas, hoy la gente duerme hasta tres días en las estaciones de servicio. Hay municipios donde no está llegando gasolina y esto dilata la distribución de alimentos y la movilización en general de las familias”, denunció Gómez.
Contra la falta de efectivo
En la cadena de radio y televisión, Maduro también arremetió contra los bancos y le dio 48 horas para «liberar» el dinero que estaban acumulando.
Desde hace unos dos años, Venezuela enfrenta la falta de efectivo, que según el Gobierno es por las “mafias” que operan en Colombia. Esta realidad origina que en Caracas y en muchas grandes ciudades exista la reventa del dinero, una práctica que se extiende en el país. Es común encontrar productos que escasean y a precios más bajos si se paga con efectivo.
Sobre el particular Maduro dijo que se va a legislar para evitar que se siga vendiendo el efectivo y las personas incursas en esas actividad serán castigadas.
Con la puesta en operación de un nuevo signo monetario, el bolívar soberano, se esperaba que la escasez culminara. No fue así. La entrega de dinero en los bancos está muy limitada y a las puertas de las instituciones financieras se observan grandes colas.
Además de las “mafias”, Maduro acusa a la banca de secuestrar el “dinero del pueblo”. Señaló que a pesar de que se distribuyó a todas las instituciones financieras el suficiente dinero, “no está en la calle”.
«Liberen el billete, está en el arca de los bancos. Tenemos 10 veces más billete del que pusimos a circular y del que hace falta en la circulación nacional y ahora con la disciplina fiscal, monetaria que tenemos, estamos sobrados», aseveró.
Oposición culpa de la escasez al BCV
El gobernante venezolano pidió al Banco Central (BCV) y a la Superintendencia de Bancos (Sudeban) «hacer respetar» la norma que consiste en entregar los billetes sin límites a los ciudadanos.
Este viernes, el diputado a la Asamblea Nacional, Ángel Alvarado, culpó a BCV por la “escasez” de dinero en efectivo que existe en las entidades bancarias públicas y privadas del país.
El mes pasado se hizo una reconversión monetaria que le quitó cinco ceros al bolívar y puso en la calle una nueva familia de billetes, que hace algo más manejable los bolívares en un país que según el Fondo Monetario Internacional cerrará con una inflación cercana al 1.000.000%.
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