Un nuevo ingrediente para el control social y el despropósito ha significado el aumento de la gasolina anunciado la noche de este sábado por Nicolás Maduro, que entrará en vigencia a partir de este lunes en Venezuela.
El precio del litro será de 5.000 bolívares (0,019 euros) y solo se tendrá acceso a 120 litros al mes en 1.200 estaciones de servicio en caso de los coches y de 60 litros para las motos. Una vez superada esa cantidad, el precio será de 0,50 dólares el litro, en un país donde el salario mínimo integral es de cuatro dólares mensual, que se venderá en 200 estaciones que estarán en manos privadas.
Para acceder a esos primeros 120 litros será imprescindible utilizar el Carnet de la Patria, un mecanismo de identificación y control que desde enero de 2017 viene implementando el régimen para canalizar las misiones sociales. Se estima que un 40% de los venezolanos poseen el Carnet.
«El transporte público de pasajeros, moto taxi y el transporte público de carga tendrá un subsidio del 100% de combustible por estos próximos 90 días», dijo. También indicó que para los primeros 30 días se utilizará el último número de las placas para echar el combustible.
Un tanque de gasolina irá de 23 a 46 dólares
Los modelos de coches más comunes en Venezuela son Aveo, 46 litros; Corolla, 55; Optra, 60. Explorer, 75,8; 4 Runner, 79; Fortuner, 80 y Grand Cherokee, 93 litros. Esto significa que llenar el tanque estará entre unos 23 dólares y 46 dólares, aproximadamente.
“Es imposible que a estos nuevos precios un trabajador común o un pensionado que cobra menos de cuatro dólares al mes pueda usar su carro. Esto no tiene ningún sentido”, afirmó este domingo José Rodríguez, de 63 años, un vecino de la urbanización de clase media de El Marqués, en el este de Caracas.
El orden para surtir los vehículos será por el primer número que aparezca en la placa leído de izquierda a derecha. El día lunes les tocaría a los 1 y 2, el martes 3 y 4, miércoles 5 y 6, jueves 7 y 8; y viernes 9 y 0.
El combustible que se comenzará a comercializar proviene de Irán y llegó en días recientes a bordo de cinco tanqueros, que trajeron al país 1,5 millones de barriles, aunque se desconoce cuántos fueron enviados a Cuba.
La deficiencia del transporte colectivo
En Venezuela los servicios públicos están en crisis y uno de los más afectados es el transporte colectivo tanto público como privado, por lo que su uso genera graves problemas para los ciudadanos en general. En el caso del privado se suma el agravante de que no hay efectivo en el país para cancelar el servicio. Esta realidad hace que el venezolano se vea obligado a usar vehículos particulares.
Y es que a pesar de los problemas de suministro de gasolina, que se han agravado en los últimos tres meses cuando la severa escasez llegó incluso a la capital del país, los venezolanos tenían el precio de gasolina más bajo del mundo. Así ha sido históricamente, pero después de la última reconversión monetaria que se hizo en agosto de 2018, cuando al bolívar se le eliminaron cinco ceros, la nación se quedó sin una moneda para cancelar el combustible en las estaciones de servicio. No es una exageración afirmar que durante casi dos años y medio prácticamente se regaló.
El economista Asdrúbal Oliveros abordó este domingo el aumento de la gasolina desde cuatro aspectos: la lógica política, lo óptimo del esquema, el impacto en precios y las perspectivas.
“Sobre el primer punto, es clave para el gobierno de Maduro mantener rentas ilícitas a los grupos de poder pues eso es un factor de cohesión interna. El contrabando de combustible siempre ha sido una de las más importantes. Cuando la gasolina se acabó ese contrabando se convirtió en un mercado negro a lo interno. Lo vivimos estos días (en algunas pocas estaciones con combustible el litro llegó a venderse hasta en tres dólares). Un precio de 5.000 Bs y otro de $0,5 por litro, mantiene esos incentivos”.
Oliveros se pronunció por un esquema de transferencias
El alza de la gasolina ha sido un tema tabú en Venezuela y en los últimos 21 años, primero con el fallecido presidente Hugo Chávez y ahora con Maduro, no se ha querido subir el precio por temor a un nuevo “Caracazo”. Fue una revuelta popular que ocurrió en 1998 después de que el expresidente Carlos Andrés Pérez subió la gasolina en 12 centavos de dólar. Aunque las cifras oficiales se refieren a 276 muertos y numerosos heridos, algunos reportes extraoficiales sitúan el número de fallecidos en más de 3.000.
Para Oliveros era necesario subir la gasolina desde hacía rato.
El director de Ecoanalítica mostró su desacuerdo con el esquema anunciado por Maduro. “Lo ideal era establecer un precio competitivo (uno solo, no varios) y luego diseñar un esquema de transferencias a los ciudadanos venezolanos. En cash. Para poner gasolina, para pagar el transporte, para lo que le diera la gana. Era una forma de que el Estado no se apropie de esos recursos. Lo propuesto está lejos de eso”.
Sostuvo que el alza del combustible tendrá impacto en precios, en una primera etapa, pues el costo del transporte se ajusta, lo que viene sucediendo desde hace semanas, dado los precios del mercado negro. “Pero una vez que se asumen los nuevos precios, hay una adecuación de la estructura de costos. Así que el impacto es más de corto plazo”.
“Por último, la clave de todo es que haya gasolina. Y esta tiene que venir de afuera. Si no llega gasolina de afuera, el esquema que viene es de precios a mercado negro, de los más altos del mundo, corrupción y colas. Parte de lo vivido ya. ¿Se puede producir aquí? Muy poco. Siendo generosos el 25% – 30% de lo que necesitamos. Así que es insuficiente. Esto apenas arranca…”.
Comienza desescalada flexible y gradual
Maduro también anunció que a partir de este lunes se inicia por la pandemia del coronavirus un esquema de desescalada flexible y gradual, pero que no regirá para los municipios fronterizos con Colombia y Brasil.
Se ejecutará el modelo 5×10, es decir, cinco días de flexibilización donde será obligatorio el uso de mascarilla en el transporte y espacios públicos, y luego 10 días de cuarentena. En esta primera etapa se reactivarán nueve sectores: bancarios, económicos, comerciales, textil, talleres mecánicos, industrias, farmacias, comercios y transporte. El sector alimentación y salud continuarán funcionando de acuerdo a las normas establecidas previamente.
- Agencias bancarias trabajarán de 9:00 am a 1:00 pm. El ingreso se organizará por el terminal del número de cédula. El viernes será un día especial para la atención de personas jurídicas.
- Consultorios médicos y odontológicos, 7:00 am a 2:00 pm.
- Construcción, 8:00 am a 1:00 pm.
- Ferreterías, 11:00 am a 4:00 pm.
- Peluquerías, la industria textil y calzado, industria de materia prima para la agroindustria, así como el sector de higiene personal y la industria del hogar, 10 am a 4:00 pm.
- Talleres mecánicos y ventas de autopartes, 9:00 am a 1:00 pm.
- Servicios personalizados de refrigeración o plomería, 9:00 am a 2:00 pm.
- Transporte público, que estaba activo, 7:00 am a 5:00 pm.
De acuerdo a Maduro, la cifra de contagios por coronavirus es de 1.459 y de 12 fallecidos. Calificó como un “foco peligroso” para la propagación del virus el mercado de Las Pulgas, en Maracaibo (estado de Zulia).
Desde la oposición no comparten las cifras del régimen. El presidente encargado Juan Guaidó, calificado así por más de 50 países, entre ellos EE UU, ha señalado que “desafortunadamente hay una opacidad en el manejo de estos números, no son confiables. Hay periodistas que son arrestados o secuestrados por simplemente informar o denunciar casos existentes de coronavirus. Venezuela ha alcanzado su capacidad máxima (en salud) y es difícil diseñar un escenario real».
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