Por Iñigo Aduriz
07/09/2016
Si Maddalen Iriarte parte con alguna ventaja de cara a las próximas elecciones al Parlamento Vasco del 25 de septiembre es que es ampliamente conocida por la ciudadanía. Todos los vascos la han visto en las últimas tres décadas presentando informativos, programas de actualidad y, en los últimos años, conduciendo el espacio de análisis y debate Azpimarra de la Euskal Telebista (ETB), la televisión pública de la comunidad.
Su nombre suena con fuerza para convertirse en la candidata de EH Bildu a la Lehendakaritza, al menos sobre el papel, después de que este martes el Tribunal Constitucional no admitiera a trámite el recurso del candidato escogido por la marca de la izquierda abertzale, Arnaldo Otegi, contra su inhabilitación para concurrir a las elecciones, y le impidiera así optar a ser lehendakari por la coalición independentista en los comicios del próximo día 25.
La idea de la coalición era que figurara como número dos de la lista por Gipuzkoa, pero el hecho de que los tribunales hayan dejado a Otegi fuera de juego la sitúan como número uno de esa plancha. Y posiblemente aspirará a candidata a lehendakari junto con otros integrantes de EH Bildu que también figuran en las listas de la coalición como Miren Larrion, Iker Casanova o Larraitz Ugarte. Es, al menos, la más mediática.
Nacida en San Sebastián en 1963, la periodista ya había sonado como posible candidata de la izquierda abertzale a lehendakari en 2012, cuando finalmente la escogida fue la profesora de la Universidad del País Vasco, Laura Mintegi. Además de su amplia trayectoria en ETB, la donostiarra también es conocida por colaborar en distintos medios de comunicación como 7K, el dominical del diario Gara en el que ha mantenido una columna de opinión que se ha distinguido por su defensa del euskara, de la igualdad o del derecho a decidir y la independencia.
Un nuevo escenario
Tras conocer la inhabilitación prácticamente definitiva de Otegi, el propio dirigente y el conjunto de EH Bildu han insistido, en todo caso, en que seguirá siendo él el candidato de la izquierda abertzale para los comicios del 25S. «Hoy más que nunca a sonreír, a convencer y a ganar», aseguraba el propio líder de Sortu a través de su cuenta de Twitter, nada más conocer la decisión del Tribunal Constitucional. E Iriarte ha insistido una y otra vez que, ocurriera lo que ocurriera en los tribunales, Otegi seguiría siendo su candidato.
Pero su inhabilitación abre un nuevo escenario en el País Vasco, que vuelve a situar a EH Bildu en el centro de la atención mediática. Provoca, además, algo que no sucedía en la política vasca desde 2005: que tres de las principales fuerzas políticas de la comunidad, PSE, EH Bildu y Podemos, llevarán al frente de sus listas a mujeres. Además de Iriarte, concurrirán la socialista Idoia Mendia y la aspirante a lehendakari de la formación morada, Pili Zabala. Por hombres han optado el PNV, con el aún jefe del Ejecutivo vasco, Iñigo Urkullu, a la cabeza; y el PP, liderado por el exministro Alfonso Alonso, así como Ciudadanos, cuyo cabeza de lista será Nicolás de Miguel.
El derecho a decidir volverá a estar, también, entre los asuntos principales que se debatirán a lo largo de la campaña que se inicia este viernes, y que marcarán los más que probables pactos de gobierno posteriores. Y es que las encuestas auguran un panorama alejado de las mayorías absolutas, y que dificultan incluso la formación de alianzas.
Lo que sí vaticinan los sondeos es que entre las fuerzas más votadas estarán el PNV, Podemos –que concurre por primera vez a unas elecciones autonómicas en Euskadi– y EH Bildu, tres organizaciones que entre sus propuestas contemplan ese mencionado derecho a decidir, e incluso no descartan la convocatoria de una consulta soberanista.
Si bien no ha ido tan lejos, Urkullu sí ha contemplado este miércoles una consulta a la ciudadanía vasca para la reforma del Estatuto de Autonomía entre las propuestas que ha presentado en Vitoria, que ha recogido la agencia Efe, y que pondrá en marcha en el caso de que vuelva a conseguir llegar a la Lehendakaritza.
En cuanto a ETA, el PNV vuelve a plantear su propuesta de 2014 para que se haga efectivo «un proceso de desarme rápido, viable y con cobertura social, internacional e institucional» y también reclama la transferencia de las competencias de prisiones y el acercamiento de los presos etarras a cárceles próximas al País Vasco.