Por Cambio16
12/07/2018
El Tribunal Federal de Brasilia ha absuelto este jueves al expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva del cargo de obstrucción a la justicia, uno de los procesos judiciales a los que se enfrenta.
La acusación de este cargo contra Lula se dio tras las declaraciones del exsenador Delcidio do Amaral. El político aseguró que el exmandatario le pidió que sobornara a un testigo de una investigación. Sin embargo, el juez del Tribunal Federal de Brasilia Ricardo Leite ha dictaminado que no hay pruebas suficientes para justificarlo.
De esta forma solo queda contra Lula la condena de un juez federal y un tribunal regional por delitos de corrupción pasiva y blanqueo de capitales por aceptar un tríplex de lujo en Sao Paulo como pago de la constructora OAS por sus favores políticos.
La defensa del exmandatario insiste en que las condenas contra Lula son una «persecución» para tratar de impedir que vuelva a ser presidente.
Por su parte, Lula ha asegurado desde la prisión de Curitiba que no abandona sus aspiraciones de llegar a la Presidencia de Brasil, que celebra elecciones en octubre.
El pasado fin de semana (08 de julio), un juez regional exigió la excarcelación de Lula. En un auto argumentó que su detención «vulneraba sus derechos políticos». No obstante, su decisión fue tumbada por el presidente del Tribunal Regional Federal de Porto Alegre, zanjando una polémica judicial en torno al caso.
Lula Da Silva ha agotado prácticamente la segunda instancia. Solo le queda acudir a los altos tribunales brasileros para revertir la condena. Si la sentencia se hace firme por estos tribunales, no podrá competir en los comicios. Hasta entonces, Lula podrá intentar inscribirse. En caso de que no se lo permitan, podrá acudir al Tribunal Electoral para que decida.