En Bolivia, Luis Arce ya se siente ganador. Un par de encuetas privadas lo apuntaron como el próximo presidente de ese país y a dos días de la contienda, los cómputos oficiales llegaban al 72% del escrutinio, se perfilaba como vencedor.
Es prácticamente el heredero de Evo Morales. De ganar, llevará sobre su espalda la carga de ser el primer gobernante electo después de él, que además es miembro de su mismo partido político. Ante esto, la duda sobre si su mandato será igual al de Morales se asienta no solo en territorio boliviano, sino también en el resto del continente y del mundo.
“Yo soy una persona muy diferente”, afirmó Arce en una entrevista. Admitió ciertas coincidencias con Morales, pues fue su ministro de Economía y a él se le atribuye una época próspera en Bolivia, pero fue enfático al desmarcarse. Su trabajo, dice, se hará a su manera.
Luis Arce, el candidato que desmarcarse de Evo Morales
Luis Alberto Arce Catacora, de 57 años de edad, se acerca al poder en Bolivia. Es economista, contador general, catedrático de universidad y político. Fue ministro de Economía y Finanzas Públicas durante dos períodos (2006-2017 y en 2019); ambos durante el primer, segundo y tercer Gobierno de Evo Morales.
Lo reconocieron como impulsor y artífice del crecimiento económico que se registró en Bolivia durante entre 2006 y 2019. En enero de 2020 lo escogieron como candidato a la presidencia. Miembro del partido del Movimiento al Socialismo-Instrumento Político para la Soberanía de los Pueblos (MAS-IPSP) se postuló con el excanciller David Choquehuanca Céspedes como candidato a la vicepresidencia.
De acuerdo con datos preliminares no oficiales al 95% de actas, Arce sería el presidente electo con mayoría absoluta. Eso sí, quiere llegar a la presidencia fuera de la sombra de Evo Morales. Es lo que asegura.
La presidenta interina, Jeanine Áñez, y el candidato rival Carlos Mesa ya reconocieron el triunfo de Arce, aunque pidieron esperar resultados oficiales. Entre tanto, analistas políticos sacan una conclusión conjunta: Luis Arce se encontrará con una Bolivia profundamente dividida.
División para la que Arce ya tiene una respuesta. Para él no se trata de otra cosa que diferencia de intereses de clases. Una percepción que se ha agudizado con la pandemia y que tiene que ver con el modelo neoliberal que implementaron en noviembre de 2019. Un modelo en el que los beneficios son para “los empresarios y ricos”.
El recorrido de Luis Arce
El socialista Arce Catacora nació el 28 de septiembre de 1963 en la ciudad de la Paz. Creció en el seno de una familia de profesores y de clase media. En 1968 comenzó sus estudios escolares y en 1980 se graduó de bachiller.
En 1984 se graduó como contador general del Instituto de Educación Bancaria (IDEB) de la Paz. Dos años después ingresó a la Facultad de Ciencias Económicas y Financieras de la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA), donde se tituló como economista.
Sus estudios no estuvieron limitados a Bolivia. Entre 1996 y 1997 obtuvo un Máster en Ciencias Económicas en la Universidad de Warwick, en Conventry, Inglaterra y también es doctor honoris causa de la Universidad de los Andes y de la Universidad Privada Franz Tamayo.
Su recorrido como funcionario publico de Bolivia comenzó en 1987, cuando ingresó al Banco Central de Bolivia, donde realizó gran parte de su carrera profesional.
Es un economista de sólidos antecedentes académicos que no reniega de su formación marxista. Fue catedrático de pregrado y posgrado en universidades públicas y privadas de Bolivia e impartió varias conferencias en diferentes instituciones académicas de Europa, Estados Unidos y América Latina. Fue el 23 de enero de 2006 cuando el entonces presidente de Bolivia Evo Morales lo nombró ministro de Hacienda y tres años después asumió el mando en el nuevo Ministerio de Economía y Finanzas Públicas.
Entre las medidas que tomó se encuentran el incentivo al mercado interno, estabilidad del tipo de cambio y las políticas de industrialización de recursos naturales. Bajo su mandato Bolivia pudo reducir la población en situación de pobreza de un 38,2% a 15,2%, según informes del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo. En 2018 el país registró un 1,51% de inflación, la más baja desde la gestión 2009. Todo englobado en un modelo de desarrollo social comunitario productivo.
Sin embargo, Arce tuvo que abandonar su cargo de ministro porque le habían detectado un tumor cancerígeno en el riñón y debía iniciar tratamiento médico. Viajó a Brasil para tratarse con especialistas en ese país y luego regresó a Bolivia recuperado para hacerse cargo del ministerio nuevamente.
Arce y su visión sobre los partidos de derecha
En 2016 el entonces presidente Evo Morales celebró un referendo para saber si los bolivianos aceptaban cambiar la Constitución para que él se postulara de nuevo en los comicios presidenciales para un cuarto mandato. Sus compatriotas le dijeron no.
El partido de Morales, Movimiento al Socialismo (MAS), llevó el asunto al Tribunal Constitucional Plurinacional de Bolivia en 2017 y este organismo anuló el referendo y eliminó los límites a la reelección presidencial.
Morales se volvió a postular en 2019 y en un conteo rápido de votos proyectaba una segunda vuelta entre él y su rival, Carlos Mesa. Pero el escrutinio se detuvo después de 24 horas y cuando se reanudó los resultados daban como ganador a Morales en la primera vuelta. Este cambio desató protestas en Bolivia por las sospechas de fraude electoral y Morales renunció el 10 de noviembre de 2019 y salió del país. En su ausencia asumió el cargo como presidenta interina la vicepresidenta del Senado, Jeanine Áñez.
Ante esta situación Arce toma posición. Insiste en que el MAS es un partido mayoritario y en 2019 no hubo fraude, que fue un golpe de Estado orquestado por los partidos de derecha. La derecha es el problema, asegura.
Dice no saber cuándo Evo Morales regresará al país, aunque el expresidente aseguró que retornaría de Argentina apenas Luis Arce se hiciera con la Presidencia. Eso sí, Arce es tajante al desmarcarse de la figura de Evo Morales. Dice que no será parte de su Gobierno, aunque si desea apoyar, esa ayuda será bienvenida.
Estrechar relaciones y la importancia económica
Las diferencias que Arce pretende solucionar no solo se limitan a Bolivia. También tienen que ver con algunas medidas que tomó la actual presidenta interina Jeanine Áñez, respecto a Cuba y Venezuela, países que fueron aliados de Morales.
Lamentó cómo se han llevado las relaciones internacionales durante el último año, apuntando a que estas decisiones se debieron a un tema ideológico cuyas consecuencias no solo se han dado en el ámbito diplomático. «Vetar a Cuba, Rusia y China ha incidido en la pérdida de oportunidades de acceder a medicinas para el coronavirus», dijo.
De acuerdo con los analistas, justamente el impacto de la pandemia en el debilitamiento de la economía pudo haber fortalecido el voto por Arce. Estaría en juego la esperanza de que el ahora político mejore la situación del país sudamericano. Arce prometió reducir la política estatista y potenciar las empresas públicas que abrió en su gestión como ministro hace algunos años. “Vamos a enseñarles cómo se hace, vamos a volver a nuestro modelo”, enfatizó.
También agregó que como medida para combatir la crisis económica del país buscaría renegociar el pago de créditos con organismos internacionales. No descartaría pedir otros si fuera necesario.
Las relaciones entre Bolivia y Estados Unidos
Parte del argumento de Arce de diferenciarse de Evo Morales recae en su propuesta de una política abierta “para todos”. Un espacio en el que incluso se propondría reconducir la relación de Bolivia con Estados Unidos. Una idea que parece recíproca.
Michael Kozak, subsecretario de Estado adjunto del Departamento de Estado para Asuntos del Hemisferio Occidental de Estados Unidos, describió las elecciones de Bolivia como “pacíficas y creíbles”. Además, felicitó a Arce durante una llamada con periodistas.
Kozak agregó que el presidente Donald Trump y Estados Unidos tienen ganas de trabajar con el nuevo Gobierno boliviano en intereses comunes para los ciudadanos. Además, aseguró que su país ha demostrado que puede ser un aliado de éxito de una “gran gama” de Gobiernos.
El senador estadounidense y excandidato socialista Bernie Sanders también se pronunció sobre el triunfo de Arce. En un mensaje en redes sociales compartió que celebraba la victoria de Arce, quien ayudó a reducir la pobreza y la desigualdad cuando fue ministro de Economía. Arce agradeció a Sanders por sus felicitaciones, pero no agregó nada respecto a Estados Unidos.
Bolivia y Estados Unidos no tienen embajadores desde el año 2008. En aquel momento el gobierno de Evo Morales expulsó a Phillip Goldberg por sospechas de espionaje y Washington actuó en reciprocidad.
Luis Arce asegura que no cree en milagros, pero sí cree en trabajo en equipo. Con esa consigna espera recuperar a una Bolivia dividida y que todavía pregunta si sus políticas serán iguales a las de Evo Morales.
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