Por Iñigo Aduriz
10/04/2017
«Lanzar un mensaje de unidad y de compromiso con el proyecto de integración europea en un momento decisivo de su historia». Este será el principal objetivo de la III Cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de los países del Sur de la Unión Europea que se celebra este lunes en Madrid y que supone la continuación de las reuniones que se celebraron anteriormente en Atenas y en Lisboa.
En este caso la anfitriona es España, que organiza la cumbre que tendrá lugar en el Palacio de El Pardo de Madrid y a la que asistirán los principales dirigentes de Francia, Italia, Portugal, Malta, Chipre y Grecia. Los líderes de todos esos países tendrán encima de la mesa los grandes retos a los que se enfrenta la UE, principalmente la salida del Reino Unido y los flujos migratorios.
Tal y como ha informado el Gobierno a través de una nota, la Cumbre de Madrid tiene lugar pocos días después de la Cumbre de Roma (25 de marzo) y de la notificación del Reino Unido de su intención de retirarse de la Unión Europea (29 de marzo), y antes del Consejo Europeo extraordinario (29 de abril) que adoptará, según está previsto, las orientaciones para el Brexit.
El Ejecutivo explica que la Declaración de Roma, aprobada por todos los países de la Unión Europea el pasado 25 de marzo, «estableció una serie de prioridades y líneas de avance» y que «ahora es el momento de poner en práctica los compromisos de Roma y continuar avanzando en el proyecto europeo».
Insisten, asimismo, en que la UE «es el ejercicio de integración más exitoso de la historia, que ha consolidado un espacio de paz, seguridad y bienestar económico». Por eso y de cara al futuro, el Gobierno considera que Europa «debe seguir trabajando para hacer frente a las cuestiones que más preocupan a los ciudadanos y consolidar su proyecto de integración». En el ámbito económico, el objetivo principal es asegurar que el mercado común y el euro funcionen eficientemente y que sus beneficios lleguen a todos los ciudadanos.
A la luz de dichos hitos, dos son los principales ejes temáticos de la Cumbre de Madrid: el futuro de la Unión Europea y el Brexit. El fin no es otro que «alcanzar un acuerdo de salida justo y equilibrado que siente las bases para una relación futura mutuamente beneficiosa».
La cumbre suscribirá una declaración conjunta que según el Gobierno hará referencia a la inmigración, lucha contra el terrorismo, política económica y social, política común de seguridad y defensa y la Unión por el Mediterráneo.