Por Lara Malvesí (Efe)
14/06/2016
El italiano Osteria Francescana, del chef Massimo Bottura, ha logrado este martes ser el primer restaurante italiano en convertirse en el mejor del mundo tras desbancar al Celler de Can Roca (Girona) en la gala de los «50 best Restaurant«.
El Osteria Francescana fue el número dos en la edición 2015 y llevaba ocho años entre los cinco primeros. Su chef fue cuestionado por la crítica en el pasado por saltarse algunas barreras de la cocina tradicional de la «mamma» italiana.
El título para el restaurante de Módena (Italia) hizo que los hermanos Roca no pudieran renovar el número uno conseguido en Londres en 2013 y 2015.
Visiblemente emocionado, el chef italiano dedicó a su familia y a su equipo el galardón. Bottura señaló que «la receta del éxito pasa por el trabajo duro», y dijo que los cocineros «no son estrellas del rock».
«El mejor ingrediente para el futuro es la cultura. La cultura trae conocimiento y abre conciencias», afirmó con una bandera italiana sobre los hombros. El chef animó al resto de restaurantes a unirse a su proyecto para abrir un local en Río de Janeiro que ayude desde este verano a paliar el hambruna en las favelas.
Tras el Osteria y el Celler se situó Eleven Madison Avenue, de Nueva York, y, en cuarto lugar, el peruano Central. Relegado quedó el Noma de Copenhague, que tras años en los primeros tres puestos se tuvo que conformar con el puesto número cinco.
Más allá de El Celler de Can Roca, el restaurante Tickets, de Barcelona, de Albert Adrià fue el que consiguió escalar más puestos de la lista (13), pasando del 42 al 29.
También subieron (del 19 al 16) Azurmendi y el Asador Extebarri, que quedó en la décima posición. Cayeron algunos puestos el valenciano Quique Dacosta, en el 49, Arzak (21), y Mugaritz (7).
El galardón para la mujer chef fue para Dominique Crenn, del restaurante Atelier, en San Francisco, especializada en cocina vegetariana. La cocinera estadounidense tuvo unas palabras sobre la masacre de Orlando y llamó a la tolerancia: «Lo que queremos al cocinar es unir a la gente, sentarnos en torno a una mesa», señaló al recoger el galardón.
El ganador del premio al mejor repostero fue para el alsaciano (Francia) Pierre Hermé, conocido por preparar los mejores «macarons veloutés» del mundo.
Es la primera edición en la que no gana un repostero español después de tres años. En 2014 ganó Jordi Roca y en 2015 Albert Adrià. Por su parte, Joan Roca, consiguió el galardón al mejor chef elegido entre sus compañeros, un premio que dio un toque dulce a la derrota. El cocinero restó importancia a la pérdida del primer puesto y dijo no sentir «decepción» y tomarse «con deportividad y buen humor» pasar a ser el número dos.
Del panorama latinoamericano destacó en el número 4 el peruano Central, en Lima, que repite posición.
El ránking de los 100 mejores restaurantes se elabora a partir de los votos de unas 1.000 personas del sector elegidas por la revista Restaurant.
La publicación ha dividido el mundo en 27 regiones y en cada una de ellas ha seleccionado a 36 personas, cada una de las cuales puede emitir siete votos, de los cuales tres tienen que ser usados para nominar a restaurantes fuera de su región. El próximo año la gala de los «50 best» tendrá lugar en Melbourne, Australia.