Por Iñigo Aduriz
11/12/2015
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Representan en torno al 9% de la intención de voto de todo el país, lo que según el último estudio preelectoral del CIS podría traducirse en unos 30 escaños del total del nuevo Parlamento. Además, en un escenario tan fragmentado como el que se augura para la nueva legislatura, podrían resultar determinantes en la conformación de mayorías, e incluso podrían decantar la investidura. Pero los partidos nacionalistas, independentistas o regionalistas son los grandes olvidados de la campaña electoral, por lo menos en la agenda de campaña estatal, que es la que siguen los principales medios de comunicación con sede en Madrid. ¿Cómo está siendo la campaña de estas formaciones, a las que ya se han acercado las grandes en busca de pactos poselectorales?
El debate a nueve del pasado miércoles mostró en parte algunos de sus mensajes, si bien en el cara a cara no estuvieron presentes todos. Faltaron partidos con representación parlamentaria como Amaiur –que en la última legislatura mantuvo siete escaños en el Congreso y que ahora se presenta como EH Bildu–, ERC –que logró 3– o BNG –que obtuvo 2–. Pero la voz de PNV, Democracia i Llibertat o Unió –son dos partidos tras la escisión de CiU– lograba hacerse escuchar en un medio estatal, y eso que esas fuerzas han sido socios tradicionales de PP y PSOE en la conformación de mayorías y en la aprobación de leyes a lo largo de la democracia.
Democracia i Llibertat, partido creado a raíz de la refundación de la Convergència Democrática de Catalunya (CDC) del aún president de la Generalitat de Cataluña, Artur Mas, centra su campaña en la defensa del proceso independentista puesto en marcha a partir de 2012 y consolidado a través de la resolución aprobada por el Parlament. «Si Cataluña quiere salir adelante, la ciudadanía no puede desaprovechar la única carta poderosa que tiene, que es el voto», aseguraba Mas esta semana durante un acto de campaña. Arremetía, también, contra el Estado por emplear «la Fiscalía, los tribunales y poderes económicos».
En busca de una voz propia
«Lehenik Euskadi» (primero Euskadi). Ese es el lema de campaña del PNV, el partido nacionalista del País Vasco. Así, ante las propuestas de nuevos partidos como Ciudadanos, que plantean la eliminación de los derechos históricos del pueblo vasco, recogidos en la Constitución, y la incorporación de Euskadi al régimen común en materia de recaudación de impuestos, la formación del lehendakari, Iñigo Urkullu, se presenta como la gran defensora del autogobierno vasco. «Cumplir el Estatuto, reconocimiento mutuo y bilateralidad», reivindicaba en la última semana el presidente del PNV, Andoni Ortuzar.
Más allá de la defensa del foralismo o del autogobierno se sitúan tanto ERC como EH Bildu, coalición que integra a la izquierda abertzale, EA, Alternatiba y Aralar y que sustituye a Amaiur como posible representante de esas fuerzas en Madrid. La independencia es el objetivo de ambos partidos y, a pesar de ello, concurren a unos comicios de ámbito estatal. Los catalanes se lanzan a por el voto al grito de «som república» (somos república) y en defensa de una consulta independentista en Cataluña. Se presentan como «la garantía» de que el proceso soberanista avance. «Bildu erabakira» («Súmate a decidir») es, en cambio, el lema escogido por EH Bildu. «Apostamos por la soberanía plena, queremos trabajar para cambiarlo todo, por el cambio en mayúsculas. No queremos que decidan quienes están a 400 kilómetros«, aseguraba hace unos días Onintza Enbeita, candidata por Bizkaia.
En defensa del autogobierno
Los independentistas gallegos del BNG concurren a los comicios bajo las siglas de Nós Candidatura Galega y con el lema «A forza de noso pobo» («La fuerza de nuestro pueblo»). El candidato y número uno por A Coruña al Congreso de la mencionada candidatura, Carlos Callón, aseguraba recientemente que «Galicia no puede permitirse no estar con voz propia en el Congreso» para formular los problemas que le afectan y buscarles una solución. «Somos un país rico pero empobrecido, no podemos permitir que esta situación continué», afirmaba.
La defensa del autogobierno navarro también es la bandera que agitará Geroa Bai, la formación nacionalista de la actual presidenta de Navarra, Uxue Barkos. Y Ana Oramas, cabeza de lista de Coalición Canaria por la provincia de Tenerife aseguraba recientemente, por su parte, que Canarias tiene que estar, «con sus singularidades», en el debate que habrá en torno a la reforma de la Constitución, y también debe estar presente cuando se debata la modificación del sistema de financiación autonómico. Su lema es «Luchar por Canarias. Construir el futuro».