En el mundo natural, una gran cantidad de especies han desarrollado formas únicas de adaptarse a su entorno y sobrevivir. Los colibríes, por ejemplo, son conocidos por su capacidad de volar hacia atrás, su velocidad y agilidad en el aire, y su habilidad para localizar y recolectar néctar de las flores. Pero, ¿sabía que también tienen una relación con el alcohol?
Un grupo de investigadores de la Universidad de California, Berkeley, liderados por el biólogo Robert Dudley, estudió la relación entre los colibríes y el consumo de alcohol. Su investigación se centra en la pregunta de si estos pájaros beben alcohol con más frecuencia de lo que se pensaba y si tiene algún impacto en su comportamiento o en su capacidad para sobrevivir sus depredadores. El estudio se publicó en la revista Royal Society Open Science.
Los colibríes beben alcohol diariamente
Los investigadores se plantearon varias preguntas. ¿Cuánto alcohol consumen los colibríes en su búsqueda diaria de sustento? ¿Sienten atracción por el alcohol o les repele? Dado que el alcohol es un subproducto natural de la fruta azucarada y el néctar floral que producen las plantas, ¿es el etanol una parte inevitable de la dieta de los colibríes y muchos otros animales?
En una serie de experimentos, el equipo descubrió que los colibríes tienen una clara preferencia por el néctar que contiene niveles bajos a moderados de alcohol. Los colibríes son capaces de detectar el alcohol en el néctar y parecen disfrutarlo.
En algunos casos, los colibríes han bebido grandes cantidades de néctar con alcohol sin mostrar signos de embriaguez o pérdida de coordinación. “Los colibríes consumen cada día el equivalente al 80% de su masa corporal en néctar”, dijo Dudley, profesor de Biología Integradora de UC Berkeley. “La mayor parte es agua y el resto azúcar. Pero incluso si hay concentraciones muy bajas de etanol, ese consumo volumétrico produciría una alta dosis de etanol, si estuviera disponible. Tal vez, con los comederos, no solo estemos criando colibríes, sino que les proporcionamos un asiento en el bar cada vez que entran”.
El alcohol como fuente adicional de energía
Dudley supone que los colibríes podrían estar bebiendo alcohol como una fuente adicional de energía. El alcohol es una fuente de carbohidratos que puede ser metabolizada rápidamente por el cuerpo. Proporcionando energía de manera más rápida que el néctar sin alcohol.
Esta teoría se ve respaldada por el hecho de que los colibríes parecen preferir el néctar con niveles moderados de alcohol, que proporciona una fuente de energía adicional sin llegar a niveles peligrosos. “Están consumiendo la misma cantidad total de etanol, solo están reduciendo el volumen de la solución al 2% ingerida. Eso fue realmente interesante”, dijo Dudley. «Ese fue una especie de efecto de umbral y nos sugirió que lo que sea que haya en el mundo real, probablemente no supere el 1,5%».
El experto aclaró que los colibríes «no se están emborrachando», pues queman el alcohol y lo metabolizan muy rápido. Lo mismo con los azúcares. Así que probablemente no estén viendo ningún efecto real.
Preocupa el consumo de alcohol de los colibríes
Sin embargo, también hay algunas preocupaciones sobre el consumo de alcohol por parte de los colibríes. En niveles más altos, el alcohol puede ser tóxico para los pájaros, lo que podría tener un impacto negativo en su salud y supervivencia. Además, el alcohol también puede afectar la capacidad de los colibríes para procesar información y tomar decisiones. Lo que podría hacer que sean más vulnerables a los depredadores o a otros peligros de su entorno.
Aunque los resultados de la investigación financiada por la Fundación Nacional de Ciencias son interesantes, aún queda mucho por aprender sobre la relación entre los colibríes y el consumo de alcohol. Los investigadores aseguraron que seguirán estudiando esta relación en el futuro para determinar si existe algún impacto significativo en la salud y la supervivencia de los colibríes. Y también si hay alguna forma de ayudar a proteger a estas aves en su hábitat natural.
Anteriormente, estudios encontraron una relación entre el néctar de las flores que consumen distintos animales con niveles altos de alcohol. Por ejemplo, en 2008 investigadores determiaron que las flores de palma que consumen las musarañas de árbol de cola de pluma de Malasia, tenían niveles de alcohol de hasta 3,8% por volumen. Otro estudio, publicado en 2015, encontró una concentración de hasta un 3,8 % en el néctar ingerido por los loris perezosos, un tipo de primate.