Han transcurrido seis días desde la declaración del estado de alarma, con la consecuente parada generalizada de la actividad empresarial, y ya hay más de 132.000 solicitudes de registros de expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE).
En las próximas semanas, la cifra podría crecer exponencialmente, mientras se sienten los efectos de las medidas de aislamiento para contener la expansión del coronavirus.
El cierre de sectores enteros –como el comercio o el turismo– anuncia que centenares de miles de personas pueden quedarse sin empleo por algunas semanas o quizás meses.
De acuerdo con estas estimaciones, el número de empresas y trabajadores afectados por un ERTE solicitado a lo largo de la pasada semana superaron a los registrados durante los últimos seis años en su conjunto.
El tamaño no importa
Incluso antes del anuncio del decreto de estado de alarma y las medidas de ayuda, las empresas ya habían empezado a tomar medidas para hacer frente al rompimiento de la cadena de cobros y pagos causada por el desplome del consumo por el confinamiento de la población.
Y aquí vale decir que el tamaño no importa. Desde pequeños comercios y negocios hasta grandes empresas, están presentando sus expedientes de regulación de empleo temporal.
Ya el miércoles pasado había entre 400 y 500 ERTE «en cola» en la Dirección General de Trabajo, «una cifra abrumadora», reconocía la ministra Yolanda Díaz.
Esa responsabilidad es, sobre todo, de las empresas que utilizan estos mecanismos. Desde este Ministerio no se permitirá el abuso de un estado de alarma y de emergencia económica y social. Cumplir las normas para velar por nuestro Estado de Bienestar es tarea de todas y todos pic.twitter.com/0jpKwzAdo1
— Yolanda Díaz (@Yolanda_Diaz_) March 20, 2020
Sectores más afectados
Como era de esperarse, el turismo es uno de los sectores más perjudicados debido al cierre de fronteras y suspensión de conexiones áreas. La situación ha comenzado a traducirse en ajustes e incluso suspensiones de empleo para intentar reducir costes ante la caída en picado de ingresos.
Otro sector fuertemente impactado es el de automoción e industrias auxiliares. La industria auxiliar, de recambios y talleres, también se ha visto afectada.
Firmas de moda, gimnasios o cadenas de restauración también se han sumado a la ola de aplicación de ERTE de esta semana.
Los más notorios
Entre los ERTE más elevados que ya han sido los anunciados está el caso de Alsea España. El grupo que regenta las cadenas Vips, Domino’s Pizza y Starbucks, llegó a 22.000 solicitudes. Le siguen Globalia (15.000 empleados), Ryanair (15.000), Seat (14.800), Burger King (14.000), Iberia (13.900) y Renault (12.000),
Otros números significativos son los de Decathlon (11.800 empleados), Ford (7.400), Norwegian (7.300), Tendam –Cortefiel, Springfield, Women’secret– (7.000), H&M (6.000) y Mango (4.767).
Otras compañías ya han empezado a negociar y podrían plantear próximos ERTE.
Particularmente significativo es el caso de Inditex. La textilera podría aplicar ERTE a los 25.000 empleados que tiene en España dedicados a tiendas a partir del próximo 15 de abril, si se mantiene el cierre.
Compromiso colectivo
Yolanda Díaz, en un reciente encuentro por videoconferencia con sus homólogas europeas, señaló: “La propuesta española es ambiciosa, contundente y adaptada no solo a la crisis sanitaria sino a la necesidad de mantener empleos, promover la conciliación, extender prestaciones y garantizar salarios. Nadie se debe quedar atrás y ese es nuestro objetivo”.
La ministra destacó que la respuesta de la Unión Europea ante el COVID-19 “debe ser un compromiso colectivo” y “la ciudadanía de la UE debe saber que el modelo social europeo seguirá siendo una garantía de futuro”.
La respuesta de la UE al #Covid19 es un compromiso colectivo. Hoy, con mis homólogas europeas, he abordado acciones coordinadas, en lo laboral y lo social, para combatir esta pandemia y para que la ciudadanía sepa que el modelo social europeo seguirá siendo garantía de futuro. pic.twitter.com/c9MQ1KH1Pt
— Yolanda Díaz (@Yolanda_Diaz_) March 19, 2020
El recurso del ERTE
Un ERTE es una suspensión temporal de la relación laboral. Es decir, el trabajador queda despedido durante un periodo concreto de tiempo.
Es un proceso de carácter colectivo, afecta de manera simultánea a una parte o el todo de la plantilla. Su duración depende de la causa que lo justifique o de lo que acuerden la dirección de la compañía y el comité de empresa.
Entre las recientes medidas anunciadas por en Consejo de Ministros para hacer frente a los efectos económicos del coronavirus, se contempla la flexibilidad en los ajustes temporales de plantillas, la posibilidad de facilitar los procesos para la aplicación de los ERTE, establecer exoneraciones para las empresas y extender la elegibilidad para el disfrute de este beneficio.
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