Por: Cambio 16
19/10/2016
Este miércoles por la noche se llevará a cabo el tercer y último debate presidencial de cara a las elecciones en Estados Unidos. El evento televisado será la única oportunidad que tendrán los candidatos para terminar de convencer a los ciudadanos de todo el país antes del 8 de noviembre.
Después de los dos últimos encuentros en los que la aspirante demócrata Hillary Clinton ha salido más favorecida, la atención se centra en su rival republicano Donald Trump, de quien se espera un cambio de estrategia como última carta para lograr revertir las tendencias que lo destinan a la derrota.
El escenario no podía ser mejor para el magnate. El debate se realizará en Las Vegas, ciudad donde se encuentra uno de sus más importantes hoteles (Trump International Hotel) entre otras inversiones; el estado es Nevada, uno de los que le ha dado mayor apoyo y donde las encuestas se mantienen reñidas; y por último la cadena televisiva moderadora será Fox News, la que le ha dado más difusión al aspirante durante esta campaña 2016.
Por su parte Hillary Clinton, que intenta llegar a la Casa Blanca por segunda vez, tiene el camino menos rocoso para lograr el objetivo, sin embargo, un error podría revertir todo el apoyo que ha logrado en estados históricamente republicanos.
“Clinton tiene que demostrar que es el único presidente en el escenario”, dijo el analista político Mike Murphy, al programa Today que transmite la cadena NBC.
Para lograrlo la aspirante ya tiene preparada una estrategia que intenta terminar de noquear a Trump, golpeándolo por el área que más le importa: las inversiones.
Al debate de esta noche, la campaña demócrata llevará a dos empresarios conocidos por el magnate que retiraron su apoyo al partido Republicano y terminaron invirtiendo en la campaña de Clinton.
Meg Whitman, Presidente ejecutivo de Hewlett-Packard (HP) y ex candidato republicano a gobernador de California, y Mark Cuban, el dueño de los Dallas Mavericks (fútbol americano), un equipo deportivo que, según la revista Forbes, es el de mayor valor en el mundo por encima del Real Madrid y Barcelona.
Pero Trump tampoco irá sólo. Después de desprestigiar la gestión de Hillary Clinton al frente del Departamento de Estado en el primer Gobierno de Barack Obama, el republicano llevará al debate a Malik Obama, un medio hermano del actual presidente de Estados Unidos.
Malik es nacido en Kenia y ahora es ciudadano estadounidense. Ambos comparten el mismo padre, y su apoyo a Trump fue anunciado en julio pasado. Se espera que él critique la gestión de su pariente y la de Clinton cuando trabajaron juntos en la misión que acabó con el derrocamiento de Muammar Gaddafi en Libia.
Además Trump prepara la participación de Patricia Smith, madre de Sean Smith un diplomático que perdió la vida en un ataque al Consulado de EE.UU. en Bengasi (Libia) y que acusa a Clinton de “asesinar” a su hijo.
Medios de Comunicación y figuras públicas de la política en Estados Unidos han dado la victoria a Hillary Clinton en los primeros dos debates. Otra victoria en el de esta noche sería una hazaña que los republicanos no podrían enfrentar.
Todd Graham, director de debate en la Southern Illinois University Carbondale, asegura que tres victorias en fila “casi nunca sucede», pero de ocurrir “sería un gran problema» para los republicanos, porque sus votantes menos conservadores pueden terminar de retirar el apoyo por no tener una razón para votar por Trump.