Esta semana, el Ministerio del Interior emitió una alerta por nieve y bajas temperaturas en diversas zonas del norte y del centro de España. Y es que según las predicciones de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), este fin de semana habrá acumulaciones de hasta 20 centímetros en Huesca, Cantabria, Burgos, Soria, Navarra y otras localidades.
Las bajas temperaturas han marcado la semana en curso, pero se extenderán también este fin de semana y principios de la que viene. Se prevén hasta -10 grados °C en algunas áreas. El «frío intenso» dejará heladas generalizadas y nevadas a cotas muy bajas al norte peninsular y Baleares, según la Aemet.
El Ministerio exhortó que de ser imprescindible viajar por carretera, «debe ir muy atento y tener especial cuidado con las placas de hielo” e informarse de la situación meteorológica y el estado de las carreteras.
Episodio de frío intenso en la Península y Baleares
En la segunda mitad del domingo 26 y primera mitad del lunes 27 entrará por el nordeste peninsular una masa de aire muy frío, provocando un descenso significativo de las temperaturas en la Península y Baleares. A partir del miércoles dicha masa comenzará a retirarse, y con ella tendrá lugar una recuperación paulatina de las temperaturas, cita la Aemet en su comunicado.
Para el domingo se espera un descenso de las temperaturas en el tercio norte peninsular, salvo en el interior de Cataluña y nordeste de Aragón. Sin embargo, el mayor descenso se verá el lunes, que será más notable en la mitad este peninsular y Baleares. Por lo que es probable, según la agencia, que no se superen los 5 grados en esas zonas y a partir del martes 28 habrá una recuperación paulatina de las temperaturas.
Las noches y madrugadas serán heladas en prácticamente toda la Península, salvo zonas litorales y suroeste peninsular.
Por ahora, los días más fríos del invierno han sido el 23 y 34 de enero, según la Aemet. No obstante, el pico del actual episodio frío se producirá el lunes 27 y martes 28: Si las predicciones se cumplen, la temperatura media en el conjunto de España será ligeramente inferior a la de aquellos días de enero.
Alerta por nevadas y bajas temperaturas
El frío polar que afecta gran parte de España está dejando precipitaciones en forma de nieve. Al norte del país las nevadas copiosas aumentan los espesores de las estaciones de esquí y mantiene un ambiente ideal para hacer este deporte.
Este último fin de semana de febrero las precipitaciones serán más probables en el Pirineo Catalán. En la mitad oriental de la cordillera sí que podrá nevar durante la mañana del domingo. «De este modo, se mantienen las condiciones de frío, por lo que podrá haber un buen estado de la nieve nueva en varias zonas de España. Sin olvidar que son condiciones favorables para la producción de nieve», apunta Irene Santa, física y meteoróloga de Eltiempo.es.
Los espesores del Pirineo catalán presentarán máximos de hasta 160 centímetros en estaciones como Baqueira Beret, Boí Taüll o La Masella. Mientras que los espesores más bajos están en La Molina, con entre 40 y 80 centímetros. Mientras que en estaciones del norte de Aragón los espesores van desde los 40 hasta los 70 centímetros de Cerler hasta los 40-190 de Formigal y Panticosa o los 80-240 de Candanchú y Astún.
Por otro lado, la estación de Sierra Nevada en España presenta actualmente más de 73 kilómetros esquiables con unos espesores de nieve de entre 20 y 100 centímetros con una calidad de nieve polvo dura.
Tormentas de invierno también en California
Esta misma semana, la ciudad de Portland, en Oregon, Estados Unidos registró una serie de tormentas invernales que provocó el cierre de gran parte de la ciudad. Casi 28 centímetros de nieve que cayeron en la ciudad más grande de Oregón paralizó los viajes en carretera desde partes de la costa del Pacífico hasta las llanuras del norte.
La nieve tomó por sorpresa a los conductores, quienes tuvieron que permanecer en sus vehículos durante varias horas. Algunos incluso pasaron la noche ahí, o los abandonaron por completo mientras las autoridades luchaban por despejar las carreteras. Otros pasajeros se bajaron de autobuses desviados y caminaron en grupos hacia un lugar seguro.
Las nevadas, fuertes vientos y bajas temperaturas también dejaron sin electricidad a casi un millón de hogares y negocios en varios estados del país. Muchas escuelas tuvieron que cerrar y se retrasaron miles de vuelos.
Días anteriores el Servicio Meteorológico Nacional había pronosticado solo una pequeña posibilidad de nevadas significativas.