La contaminación por lindano de las aguas de los ríos españoles no ha terminado. Al contrario, sus daños persisten aunque es una sustancia prohibida por la Unión Europea para su uso desde el año 2008.
El más reciente informe de Ecologistas en Acción, con datos del Ministerio para la Transición Ecológica y la Agencia Vasca del Agua se determinó que en 13 de las 19 comunidades autónomas del Estado hay daños por esta sustancia.
Madrid, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Galicia, Andalucía, Valencia, Extremadura, Aragón, Cataluña, Navarra, Euskadi, Murcia y Cantabria son las zonas donde hay mayor presencia de lindano, un pesticida para eliminar las plagas de parásitos en agricultura y ganadería.
Los ríos afectados por el lindano
Un total de 17 demarcaciones hidrográficas están contaminadas con el pesticida en mayor o menor medida. La organización ecologista le preocupan en especial los niveles de lindano presentes en las cuencas del Guadalquivir, Cantábrico Orienta, Duero y Segura. Encontraron incidencias graves con valores superiores al límite estipulado por la Directiva Europea Marco del Agua, fijados en 0,004 miligramos por litro.
La investigación fija el alerta especificamente en tres puntos: O Porriño, en Galicia; Sabinánigo, Aragón y la cuenca del Bajo Nervión-Idaizabal y Gardelegi en Vitoria, Euskadi. Tres lugares superan el nivel de lindando de los 0,004 milígramos por litro.
De acuerdo con los ecologistas, la contaminación estaría relacionada con los vertidos de la sustancia que realizan empresas químicas como Transportes Bonbi, Industrias Químicas del Norte o Chemical y Nexana, entre las más grandes.
Un pesticida prohibido
El lindano es un material sumamente tóxico que se prohibió en España y se dejó de fabricar hace más de una década. Sin embargo, sus características hace que sea muy persistente y tenga una degradación muy lenta en el tiempo.
Además de eso, cuenta con unas propiedades muy volátiles que de alguna manera permiten que se «bioacumule» y se transmita entre diferentes especies. Todo a través de la cadena trófica.
La presencia del químico se ha asentado en áreas naturales de España; sin embargo, los ecologistas muestran que en 2017 y 2018 su presencia se incrementó en determinados puntos. El País Vasco es uno. La detecciones aumentaron de 1% a 11% en un año. Aclaran que el aumento no necesariamente se debe a la cantidad de lindano en las cuencas, sino porque hay más seguimiento a la presencia de esta sustancia. Una situación que se ha dado en varias de las zonas donde se comprobó incremento de lindano.
Un problema que no solo afecta a los ríos
El lindano no solo afecta las aguas de los ríos. Por sus características volátiles se expande y se encuentra en la madera. Un problema que ha señalado la organización Ekologistak Martxan con muestreos durante 2019. Registraron concentraciones de hasta 3,64 milígramos por kilo de madera en Enekuri, Vizcaya; de 6,67 en algunos árboles de Jata, también en Vizcaya y de 0,94 en Sabiñánigo, Huesca.
Koldo Hernández, responsable de las políticas de sustancias químicas de Ecologistas en Acción, precisa que la situación es preocupante. El lindano puede desprender humos sumamente tóxicos, como fosgeno, cloruro de hidrógeno y monóxido de carbono cuando se expone al calor. Un incendio en las zonas donde los árboles estén contaminados puede ser perjudicial para la salud de las personas.
Además, la organización critica la contradicción que existe entre las normas del agua para el consumo humano y las directivas del Marco del Agua en Europa, que miden la calidad ambiental de las aguas. Se permiten cantidades de lindano de hasta 2,5 veces superiores en las aguas aptas para el consumo que en la de ríos y lagos.
Como corolario del informe, la demanda que hacen a las autoridades ambientales, especialmente a MITECO, que intensifiquen las revisiones de la presencia de esta sustancia para erradicarla de forma efectiva en los entornos naturales. De igual forma ponen de manifiesto la necesidad de modificar la legislación de consumo de agua para humanos y qu erradique la permisividad actual con la presencia del lindano.
Lindano, un riesgo cancerígeno
La Agencia Internacional para la Investigación sobre el Cáncer, que depende de la Organización Mundial para la Salud, en razón de las evidencias científicas clasificó el lindano como «cancerígeno para los seres humanos». Lo ubicó en el Grupo 1, en el cuan se encuentran los contaminantes más peligrosos.
El lindano causa múltiples daños, como tumores o alteración del funcionamiento hormonal. Además su peligro es alto así sea en bajas concentraciones. Ecologistas en Acción esperan que la clasificación de la IARC sirva para fortalecer la eliminación de esta sustancia y el control de quienes siguen usándola y contaminando los ríos españoles.
Lea también: